El gobierno mexicano asume su responsabilidad sobre el pasado, reconoce a las víctimas del movimiento estudiantil de 1968 y se compromete a la no repetición en el futuro, señaló el titular de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) de la Secretaría de Gobernación, Jaime Rochín.

Precisó que durante el movimiento del 68 “las violaciones a los derechos humanos fueron inobjetables. El Estado usó la represión. Fue un crimen de Estado porque éste empleó francotiradores que dispararon para crear caos, terror y una narrativa oficial para criminalizar la protesta, y continuó más allá de las detenciones arbitrarias y la tortura”.

Durante su participación en el coloquio internacional Ciudadanías en Movimiento M68, realizado en el Centro Cultural Tlatelolco, presentó la resolución de lo que “constituye la primera reparación colectiva que reconoce una de las páginas más trágicas de la historia reciente de México”.  Dijo que el Estado emitió la resolución por la que se determinan medidas de satisfacción de carácter colectivo, como parte del derecho a la reparación colectiva a favor de las víctimas del 2 de octubre de 1968.

Jaime Rochín comentó que en dicha resolución se reconoce que las acciones del gobierno tuvieron impacto en el ámbito individual y colectivo que generaron polarización en torno al movimiento y estigmatizaron a los estudiantes por su ideología.

Además de que se implementarán las acciones denominadas Colección M68, ciudadanía en movimiento, para la recopilación de diferentes acervos públicos y privados que serán digitalizados con la intención de reconstruir los hechos.

Mientras que la reparación simbólica, que servirá de soporte a la memoria, será a través de la creación del Monumento a la ausencia, éste se construirá en el piso del Centro Cultural Universitario Tlatelolco y consistirá en la impresión de 400 pares de huellas en el piso.

Indicó que la inversión para estas acciones será de 6 millones de pesos, 3 millones para cada proyecto.

De igual forma, destacó que algunas víctimas solicitaron como medidas reparatorias una disculpa pública del Estado mexicano. Es momento de que el Estado vea al pasado con honestidad para así poder tener una mirada limpia hacia el futuro. “Es momento de recordar para no repetir, no hay otra manera”, enfatizó el titular de la CEAV.

 

(Con información de El Universal)