El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, ofreció un mensaje donde confirmó que su gobierno cancelará la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco, y que procederá a adaptar la actual base militar de Santa Lucía.

El tabasqueño afirmó que se trata de una buena noticia, porque procede de la consulta, “un ejercicio democrático”. “Cuando hay democracia no existe la corrupción”, aseguró.

Respecto a los resultados, López Obrador enfatizó en tres puntos: Primero, que es viable desde el punto de vista técnico construir el nuevo aeropuerto en Santa Lucía. “Está demostrado que no existen problemas técnicos, que pueden operar ambos aeropuertos”.

De manera inédita, aseguró que en los días previos a la consulta se reservó información acerca de una petición de ayuda hecha al gobierno francés para determinar, mediante una empresa de prestigio, si era viable o no la construcción de las pistas en la base militar.

El presidente Emmanuel Macron habría contestado de manera inmediata, asegurando que “la rapidez con la que hemos respondido a sus solicitudes dan muestra de cuanto queremos que la relación franco-mexicana sea prioritaria”.

El segundo punto de énfasis para AMLO, es que con la decisión de suspender la construcción en Texcoco se salva el lago Nabor-Carrillo y se protegerán las aves migratorias, lo que calificó como un triunfo ambientalista.

En tercer lugar, el próximo mandatario refirió que en términos económicos el Gobierno Federal se ahorraría alrededor de 100 mil millones de pesos, al mismo tiempo que se solucionaría la saturación del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.


Asimismo, se comprometió a que en tres años se va a tener resuelto el problema en definitivo, con la creación de dos pistas y de un carril confinado del Aeropuerto Benito Juárez hasta Santa Lucía. “Vamos a iniciar ya los trabajos para resolver el problema”.

Agregó que se hablará con los empresarios y contratistas para acordar que continúen con los trabajos en la nueva sede.

Detalló que se establecerán mesas de diálogo para iniciar con la rehabilitación del terreno de Texcoco y el lago Nabor Carrillo, así como para establecer qué ocurrirá con los trabajos avanzados.

“Tiene que ser un gran centro ecológico y deportivo para la Ciudad de México”, explicó sobre lo que ocurrirá con el terreno del NAIM.

Al ser cuestionado sobre la caída del peso de más del 2 por ciento tras los resultados de la consulta, Andrés Manuel dijo que no era algo “significante”, y puso en duda que la caída sea por el tema del aeropuerto. Sobre las posibles demandas de parte de las constructoras del NAIM, aceptó que están en su derecho de ejercer acciones legales, sin embargo su equipo se reunirá con los inversores para solucionar los problemas que puedan surgir.

Respecto a la presunta participación del grupo Rioboó como contratista en el nuevo proyecto, AMLO negó cualquier interés del ingeniero en él. “Se acabó la corrupción”, puntualizó.

Por su parte, el próximo secretario de Comunicaciones y Transportes, Javier Jiménez Espriú, dio un repaso de la jornada de consulta, y afirmó que “ha sido un ejercicio inédito del derecho a expresarse que tiene todo mexicano”.

La inversión en Santa Lucía, dijo, será menor de 100 mil millones de pesos, lo que compensará las pérdidas por la cancelación del NAIM, y aseguró además que el procesos será transparente y honesto y se trabajará con el Estado de México y la Ciudad, para mejorar las condiciones de vida en Texcoco y en la zona de la base aérea.

Sobre las críticas al Tren Maya, el presidente electo afirmó que sí habrá consulta, pero se está estudiando cómo será llevada a cabo, aunque adelantó que será modificado el artículo 35 de la constitución para hacer posibles más instrumentos democráticos.