Mario Morales Castro

Nació en Santo Amaro, Sousel, Portugal, el 16 de noviembre de 1941. Fátima Maldonado es poeta, crítica literaria y periodista. En el periódico Expresso fue responsable de la crítica literaria. Es autora de una propuesta lírica en que la atención al mundo cotidianamente repartido, a partir de una condición femenina asumida de manera insistente sin declaraciones doctrinarias o premisas ideológicas desligadas de la propia elaboración poética, se articula con la remembranza y el diálogo arriesgado en las zonas más íntimas de un nuevo espacio poético. Aquí una muestra de su poesía, en mi traducción.

Fátima Maldonado es autora de la obra poética: Cidades Indefesas, 1980; Os Presságios, 1983; Selo Selvagem, 1985; Uma Urna no Deserto, 1989; Caҫa e Persuasões (con pinturas de Paula Rêgo), 1991; Cadeias de Transmissão (toda su obra reunida), 1999. Y en narrativa: Com Florbela em Navarra (relatos), 1991; A Jóia, 1994; Lava de Espera (libro de viajes con fotografías de António Pedro Ferreira), 1996.

CAMPO DE REFUGIADOS

Alguns não os víamos há anos

faziam parte da nossa mais salubre

juventude

no trabalho ainda havia escape

no amor ainda havia perigo

banquetes celebravam extorsões

compromisos sagrados aluíam

amores mais indeléveis

sucumbiam aos uivos

nas coutadas

frente à horda não havia defesa

aquele virus jovem não cedia

pisava ameaças ignorava apelos

qualquer moderação nos parecia funesta.

(…) Os poucos resistentes engordaram

sofrem do coração bebem cerveja

têm a pasta surrada de desgostos

outros alistam-se na cave do comércio

mirram no pó as caudas abanadas

à cintura as facas do açougue,

sabujos escreven coisas irrisórias

enquanto a terra se torna combustível.

CAMPO DE REFUGIADOS

Algunos no nos veíamos hace años

formaban parte de nuestra más salubre

juventud

en el trabajo aún había escape

en el amor aún había peligro

celebraban banquetes extorsiones

compromisos sagrados mataban

a amores más indelebles

sucumbían a los aullidos

en los cotos de cacería

frente a la horda no había defensa

aquel virus joven no cedía

pisaba amenazas ignoraba llamados

cualquier moderación nos parecía funesta.

(…) Los pocos resistentes engordaron

sufren del corazón beben cerveza

tienen el portafolio maltratado de disgustos

otros se alistan en la cava del comercio

marchitan en el polvo las colas sacudidas

en la cintura los cuchillos de la carnicería,

lameculos escriben cosas irrisorias

mientras la tierra se torna combustible.

CERIMÓNIA FUNESTA

O corpo não responde

às vozes de comando,

como um cão estropiado

já desdenha os apelos

os antigos convites

às funestas moradas,

esqueceu-se do ponto

vai olvidando senhas

os códigos das grutas

acumulando lixos

as servidões austeras

diluem-se num canto

o corpo não atende chamadas

não estremece ao ruído da chave

não suporta

qualquer intromissão

secou num aterro,

os restos à vista

a memória escava

da lembrança os rastos

avidamente suga

de tal fausto os ossos,

de tão vitais cerimónias

nos tão secretos barcos

mesmo o pouco que resta

ainda se mastiga.

CEREMONIA FUNESTA

El cuerpo no responde

a las voces de mando,

como un can estropeado

ya desdeña los llamados

los antiguos banquetes

a las funestas moradas,

se olvidó de la cita

va olvidando señas

los códigos de las grutas

acumulando basuras

las servidumbres austeras

en un rincón se diluyen

el cuerpo no atiende llamadas

no se estremece al ruido de la llave

no soporta

ninguna intromisión

se secó en un terraplén,

los restos a la vista

la memoria excava

del recuerdo los rastros

ávidamente chupa

de tal boato los huesos,

de tan vitales ceremonias

en los barcos tan secretos

incluso lo poco que resta

todavía se mastica.

UM FADO

Quem viu barcos

ir ao fundo

tem nos olhos a certeza

aposta firme na boca

rude descrenҫa na reza

Quem viu barcos trazer escravos

muniҫões e artifício

figueira brava na costa

aҫoite preso no riso

Quem viu barcos

magoá-lo,

ferros, lavas e palmeiras

descrê santos e novenas,

nega laҫos, destrói cercos,

toma ventos por lareiras.

MÁGOA URBANA III

Ruas encolhem

refervem

na barrela do sol,

cada vez mais liberto do ozono

o astro recrudesce

na ordália,

fogo e água

maníacos

desventram rotas

apunhalando Ceres,

bosques trucidam,

broncos descosem

grifos à dentada,

incineram vinhas

mediatizam o sangue mais secreto,

cascos, asas, vaticinios

regressam a lugares inviolados,

de Gaia é a vinganҫa

UN FADO

Quien vio barcos

irse al fondo

tiene en los ojos la certeza

apuesta firme en la boca

ruda incredulidad en el rezo

quien vio en barcos traer esclavos

municiones y artificios

higuera brava en la costa

azote preso en la risa

quien vio en barcos

lastimarlo,

hierros, lavas y palmeras

no cree en santos y novenas,

niega lazos, destruye cercos,

toma vientos por hogares.

PENA URBANA III

Las calles encogen

vuelven a hervir

en la lejía del sol

cada vez más liberado de ozono

el astro recrudece

en la ordalía,

fuego y agua,

los maníacos

destripan rutas

apuñalando a Ceres,

a los bosques masacran,

los broncos descosen

grifos a mordidas

incineran viñas

mediatizan la sangre más secreta,

cascos, alas, vaticinios

regresan a lugares inviolados,

de Gea es la venganza.

SELO SELVAGEM

Há um selvagem

que nos une

sulco entre duas marés

intranspónivel

vértice do âmago

rochedo saliente

vórtice paralelo à cínica calote

impudente sinal resultado

imponente razão reconstruída

impossível rasura

tonsura incompleta

mazmorra junto à água suportada

imprudente calҫado deslizante.

Ao desdobrar o mapa

sobre a mesa

bicos de garfos

retinem contra copos

gumes instavilizam

quedas.

O mapa ocupa o centro

e dilacero o dedo

seguindo involuҫões

ríos secos transformados

em crostas

que nos juncam as costas

e incomodam debaixo dos casacos.

Vulcões em demasia

proliferam

queimam nas polpas

digitais impressos.

SELLO SALVAJE

Hay un sello salvaje

que nos une

surco entre dos mareas

insuperable

vértice en el alma

roca saliente

vértice paralelo al cínico casquete

impúdica señal resultada

imponente razón reconstruida

imposible tachadura

tonsura incompleta

mazmorra junto al agua apoyada

imprudente calzado deslizante.

Al desdoblar el mapa

sobre la mesa

puntas de tenedores

tintinean contra vasos

filos desestabilizan

caídas.

El mapa ocupa el centro

y dilacero el dedo

siguiendo involuciones

ríos secos transformados

en costras

que nos laceran la espalda

y molestan bajo los sacos.

Volcanes en exceso

proliferan

queman en las pulpas

digitales impresos.

Impune assassinava

se quisesse

paissagem contradiz

e obedece

<<contradigo-me e depois?>>

lóbrega matéria sem principios

cheia de precipícios

obsceno pincel manejamos

disfraces dissimulam

atoleiros

cúmplice ajuste de canas

sobre vácuos

despenha transeúntes

e acelera.

Nuves deslizam sobre

ocasos recortam

testemunhas

perigosas siluetas

dissimulam.

Haverá neste filme happy end?

Impune asesinaba

si quisiera

paisaje contradice

y obedece

“me contradigo, ¿y luego?”

lóbrega materia sin principios

llena de precipicios

obsceno pincel manipulamos

disfraces disimulan

lodazales

cómplice ajuste de cañas

sobre vacíos

despeña transeúntes

y acelera.

Nubes se deslizan sobre

sucios escenarios

ocasos recortan

testimonios

peligrosas siluetas

disimulan.

¿Habrá en esta película final feliz?