Ayer fue una dura jornada para las bolsas en Estados Unidos. El Dow Jones por ejemplo tuvo una caída de 3.1%, considerada la peor desde febrero pasado, mientras el Standard & Poor’s cedió un 3,29%; en ambos casos, fueron los porcentajes más bajos desde principios del pasado mes de febrero. El índice tecnológico Nasdaq se desplomó aún más al registrar 4% de baja, lo cual no le había pasado desde junio del 2016. ¿A qué se debió esto?

Según el presidente del banco central estadounidense, Jerome Powell, se debió a los temores despertados en los inversionistas de un aumento en la rentabilidad de la deuda pública y un consecuente ascenso en los tipos de interés por parte de la FED. Esto quiere decir que el dinero se está volviendo cada vez más caro, lo que afectar directamente a los consumidores estadounidenses, cuyas hipotecas o pagos de autos se elevarían dramáticamente. Esta es la tercera vez que estos ajustes se realizan. En un intento por salir al paso, Donald Trump dijo que “la FED se volvió loca”.

Su comentario prácticamente desestima las medidas adoptadas por Powell, a quien él mismo puso en el cargo, y que ha asegurado en repetidas ocasiones que los tipos de interés tienen que subir porque en la condición actual están lejos de garantizar una posición estable para el crecimiento económico. Por supuesto que esto no le gustó a Trump, ya que su plan de recuperación económica depende de que no haya esas constantes subidas en las tasas de interés y le dé a su electorado un mensaje seguro de sus políticas.

Sin embargo, Trump salió al paso entra la prensa que lo cuestiona diciendo que se trataba de “una corrección que se veía venir desde hace tiempo”.

Por su parte, la Casa Blanca también defendió al mandatario al restar importancia a la caída bursátil, de la que dijo que “la base y el futuro de la economía de EEUU siguen siendo increíblemente fuertes”, señalando que que el desempleo está en un nivel bajo, y los recortes de impuestos a las empresas.

“Las políticas económicas del presidente Trump son las razones de estos éxitos históricos, y han creado una base sólida para que el crecimiento continúe”, señaló Sarah Huckabee Sanders en un comunicado.