El pasado fin de semana, Brasil estrenó presidente, Jair Bolsonaro, un militar de reserva y político de ultraderecha. El cargo lo empezará a ejercer el primero de enero del 2019 y terminará el primero de enero de 2023.

Bolsonaro se hizo famoso por sus posiciones nacionalistas y conservadoras, por sus críticas a la izquierda, por su visión contraria a los derechos LGBT y por sus declaraciones controvertidas durante la campaña electoral de Brasil. Sus posiciones generalmente son clasificadas como alineadas a los discursos de extrema derecha.

Documentos secretos del Ejército brasileño muestran que en la década de los ochenta, superiores de Bolsonaro lo evaluaron como dueño de una “excesiva ambición en realizarse financiera y económicamente”, particularmente el coronel Carlos Alfredo Pellegrino.

En 1988, Bolsonaro entró en la vida pública como concejal de la ciudad de Río de Janeiro por el Partido Demócrata Cristiano. Ahí fue conocido por sus ideas nacionalistas, conservadoras y por sus críticas al comunismo y a la izquierda. En las recientes elecciones presidenciales se lanzó como candidato del Partido Social Liberal, y triunfó frente a Fernando Haddad del partido del Trabajo, quien sustituyera a Lula da Silva.

La doctora Cristina Gomes, investigadora de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) en entrevista con Siempre! habló sobre las implicaciones de su designación y la verdadera personalidad de Jair Bolsonaro.

Qué significa el triunfo de Jair Bolsonaro y los riesgos que implican para la democracia en Brasil y América Latina?

El triunfo de Jair Bolsonaro tiene un impacto más allá de Brasil y América Latina, significa la consolidación de ese crecimiento de grupos de derecha en casi todos los países de América Latina, de Europa y de Estados Unidos empezando por Donald Trump, es una nueva tendencia después de haber predominado por muchos años la izquierda en América Latina, aunque él es una persona mucho más extrema que todos los demás mandatarios.

Ello resulta preocupante porque no es una persona demócrata, porque están los representantes de la derecha liberal como son Macri de Argentina y otros en América Latina pero es na persona extrema, autoritaria y fascista. Así, el riesgo es que la derecha de AL vaya por esta tendencia extrema y autoritaria.

Otro punto importante, es que su propuesta es muy belicista, ha punado porque todos tengan derecho a tener armas como sucede en Estados Unidos. De hecho Bolsonaro ha declarado en varias ocasiones que Trump es su ídolo; le rinde homenaje a la bandera de Estados Unidos y asegura que es su modelo a seguir.

El tema del armamento también es un riesgo porque como sabes, tenemos muchos conflictos en las fronteras con los demás países. Además ya hemos tenido balaceras en las escuelas, no como en Estados Unidos pero si las hay, así que este tema del armamento aumentará la violencia interna en Brasil.

Hablando de América Latina quiero mencionar los conflictos que tenemos en las fronteras. Cuando Lula era presidente hubo un pequeño incidente con Bolivia respecto a unos préstamos para apoyos de Petrobras para Bolivia, y querían que Brasil declarara la guerra a Bolivia por ese incidente económico, se pusieron más belicistas. Ahora, durante la campaña, el hijo de Bolsonaro declaró la guerra a Venezuela para solucionar los problemas de los hermanos de Venezuela.

También se registró un conflicto muy fuerte con Paraguay, por los indígenas que fueron asesinados en 2010 y que ocasionó el derrumbe del ex presidente Fernando Lugo, porque fue un conflicto binacional pero involucrando a una población muy vulnerable como es la población indígena de Paraguay.

Veo dos riesgos: que la derecha latinoamericana siga esta tendencia fascista con un discurso de ganar las elecciones y perseguir al opositor y a los movimientos sociales así como proponer el armamento de la población, lo que resulta una tendencia muy complicada.

Si AL por otro lado, va a estar vinculado con una tendencia belicista del candidato y el apoyo del ejército, la mitad de su ministerio va estar compuesto por generales y mariscales del ejército, eso ya lo definió. Va a ser un sistema militarista muy fuerte en un país que de por sí ya tiene un historial militar y de conflictos con las fronteras.

Algunos especialistas lo califican más como un Hugo Chávez o un Alberto Fujimori que como un populista de derecha ¿qué opina?

No, es mucho peor, no es comparable. Primero porque Hugo Chávez tuvo una visión muy nacionalista, aunque   venía del ejército, tuvo una tendencia más nacionalista y de izquierda. Bolsonaro odia al bolivarianismo y a Hugo Chávez, no va en ese sentido.

Su populismo tiene un corte distinto, no organiza a la sociedad en torno suyo, sino que organiza grupos armados y los apoya directamente. Son como los paramilitares de Colombia, es muy distinto en ese sentido, es gente que extorsiona a la población cobrando servicios a la población, cobran por llevar el gas a las comunidades pobres, a las favelas.

Por ejemplo, Hugo Chávez acostumbraba hacer consultas populares para tomar sus decisiones pero Bolsonaro usa su historial y el apoyo del ejército para respaldar sus decisiones, ya dijo ahora que va a cerrar el Congreso y la Suprema Corte. Incluso su hijo ha declarado que para cerrar la Suprema Corte solo necesita un cabo y un soldado, no es necesario mandar un jeep con cinco soldados, este tipo de cosas muestran un total irrespeto por las instituciones y por la democracia.

Lo único que el tiene en común con Alberto Fujimori es el nepotismo, toma lo peor de los dos ex mandatarios pero no se equipara con ninguno de los dos. A él se le está comparando con Rodrigo Duterte de Filipinas, él sigue muchas de las propuestas de Duterte, la principal, que ya defendió en su programa de gobierno es que los policías puedan matar a los que consideran delincuentes sin tener ningún tipo de investigación.

Considera que el deber de la policía es matar incluso propuso un premio de productividad por el número de muertes, el policía que más mate a personas, mas va a ganar.

Eso no lo hemos visto en AL ni en el mundo solo en Filipinas con Duterte, por eso digo que ese es el personaje al que más se acerca, además de fascistas como Mussolini y Hitler, porque propone el exterminio de los diferentes grupos, los gays, los negros; dice que prefiere tener un hijo muerto que gay. No se refiere bien ni hacia los negros ni tampoco hacia a las mujeres.

Es difícil entender por qué votaron por él. Lo que se puede pensar es que las persona no tienen un solo rol en la sociedad, tú puedes ser mujer pero identificarte con el candidato por otras condiciones, por ejemplo alguien que sea blanco y supremacista pero que no tolera a los negros. A las empleadas domésticas no habla de tenerles un contrato de trabajo ni darles esa seguridad entonces ahí hay una especie de identificación, hay un conflicto de clases.

Mucha gente votó por Bolsonaro hay pobres, negros, gays, una complejidad de personas y aunque son pobres o negros ellos tienen alguna necesidad de poder y piensan que al estar al lado de Bolsonaro, nada les va a faltar, van a tener un arma, van a poder defenderse de las humillaciones que sufran y este poder, es lo atractivo de la propuesta autoritaria. Están enloquecidos con este poder como si pudieran adquirirlo inmediatamente.

También hay una insatisfacción con los gobiernos anteriores del Partido del Trabajo, desde que salió Dilma Rousseff ya había una crisis pero todavía no era tan fuerte, aunque ya había una frustración. Por otra parte, Bolsonaro tiene un odio especial en contra de las universidades y con los medios de comunicación, eso no pasó con Hugo Chávez ni con Alberto Fujimori ni con ningún otro presidente.

Redacción