El ministerio británico de Defensa anunció que pondrá a 3.500 soldados “en alerta” por si deben asistir a otros departamentos del Gobierno, por ejemplo en puertos o aeropuertos, en caso de un brexit sin acuerdo. La medida forma parte de los preparativos que ha empezado ha estudiar el Gobierno de Theresa May en caso de una posible salida brusca de la Unión Europea el 29 de marzo de 2019.

En una intervención en la Cámara de los Comunes, el ministro de Defensa, Gavin Williamson, precisó que, aunque no ha recibido “de momento” ninguna “petición formal” de apoyo, ha dispuesto que ese contingente de soldados esté disponible para colaborar en cualquier escenario de crisis, como podrían ser largas filas en las fronteras.

En el Consejo de ministros semanal, el Ejecutivo conservador analizó las medidas que se tomarán para preparar una posible, aunque no deseada, salida de la UE sin acuerdo de retirada o para la futura relación comercial. Entre otras cosas, el ministerio de Economía prevé distribuir 2.000 millones de libras (unos 2.200 millones de euros) adicionales repartidos entre todos los departamentos gubernamentales irán destinados como parte de los planes de contingencia en el caso de darse ese escenario.

También se enviarán a lo largo de la próxima semana 80.000 correos electrónicos para asesorar a las empresas y que estén preparadas si finalmente no se ha conseguido fijar el pacto.

La UE ha puesto también en alerta prenavideña a los 27 y publicará sus propios planes de contingencia para el ‘no deal’ el miércoles.

El portavoz del Partido Liberal Demócrata, Vince Cable, acusó al Ejecutivo de querer asustar con “una guerra psicológica”, mientras que el Partido Laborista, primero de la oposición, sopesa si presenta una moción de censura contra la Administración conservadora.

May se ha comprometido a someter a votación parlamentaria un pacto del brexit la semana del 14 de enero, tras haber suspendido la prevista para el 11 de diciembre, pero no está claro que consiga recabar los apoyos necesarios para que sea aprobado, lo que haría más probable una salida drástica de la UE.