La Unión Europea ha llegado a un acuerdo unánime y a partir de 2021 los plásticos de usar y tirar dejarán de comercializarse. La venta de cubiertos de plástico, bastoncillos y pajitas, y otros productos, se irá reduciendo paulatinamente hasta desaparecer por completo en 2030.

El acuerdo fue alcanzado entre los negociadores del parlamento europeo, los estados miembros y la Comisión

Se trata de productos que representan el 70% del plástico que termina en los océanos y en las playas. Una basura que acaba en los estómagos de tortugas marinas, focas, ballenas y aves, acabando con la vida de cientos de animales marinos, pero también en pescados y mariscos y por tanto, en nuestros platos.

“Los europeos son conscientes que los deshechos plásticos constituyen un enorme problema y la UE en su conjunto ha demostrado una gran valentía, convirtiéndose en líder mundial de la lucha contra los deshechos plásticos marinos”, dijo el vicepresidente de la Comisión Europea, Frans Timmermans, en un comunicado.

Los productos que la UE ha acordado prohibir son precisamente los que resulta más común encontrar en playas. Se trata en concreto de los bastoncillos de algodón, los cubiertos, platos y pajitas, los agitadores de bebida, los palos de globos, productos hechos de plástico oxo-degradable y los envases de alimentos y bebidas hechos de poliespan. A partir de entonces todos estos útiles deberán ser fabricados con materiales más sostenibles.

La Comisión estima que con esta medida se ahorrará en torno a 22 millones de euros en daños medioambientales y se evitaría la emisión de 3,4 millones de toneladas de CO2 de aquí a 2030.

Los 10 plásticos de usar y tirar

  1. Bastoncillos de algodón: la UE prohíbe aquellos productos que también llevan plástico en su diseño. Algunas marcas ya los han sustituido por productos alternativos hechos de papel y cartón.
  2. Cuberterías y pajitas: los cuchillos, tenedores, cucharas, platos, pajitas y agitadores de cóctel hechos con plástico deberían sustituirse por alternativas hechas de otro material.
  3. Palitos de globos: además de su prohibición, los fabricantes de globos también deberán etiquetar su impacto ambiental en el producto y aportar a la limpieza marítima.
  4. Botellas: el objetivo es que desde el 2025 la producción de botellas de plástico se reduzca al menos un 25% y alcanzar al menos un 30% en 2030.
  5. Tabaco con filtro: la Comisión pone en manos de los productores un “esquema de responsabilidad” y espara que desarrollen una alternativa viable.
  6. Bolsas ligeras: sus fabricantes deberán contribuir a la gestión y limpieza de los residuos. Una medida adicional que conviviría con los objetivos de reducción ya implantados y que Bruselas ya ha calificado como un “éxito”.
  7. Envoltorios de dulces: los fabricantes de bolsas de frutos secos o de plásticos para envolver caramelos o chicles deberán promover campañas de alerta sobre los residuos y colaborar en la limpieza y gestión de los mismos.
  8. Envases de comida: Bruselas pide una “reducción significativa” de estos envases –muy usados en la comida a domicilio– y se pedirá a sus fabricantes que colaboren en limpiar y gestionar residuos.
  9. Vasos: también se pedirá a los Estados una “reducción significativa”; el coste, al igual que con los envases de comida, “dependerá del modelo que elija cada país”.
  10. Toallitas y productos sanitarios: sobre las toallitas húmedas, deberán informar a los consumidores si llevan plástico en su composición y sobre el daño que hacen al medio ambiente si no se desechan en una papelera.