Muerto el PRI no se acabó la rabia de la corrupción. En Jalisco, estado que gobierna el señor Enrique Alfaro Ramírez, se favorece a los amigos con licitaciones a modo, como lo ha denunciado el Diario NTR Guadalajara, gracias a la reportera Sonia Serrano, quien reveló una más que sospechosa operación por 3,634 millones de pesos.

El señor Alfaro, quien llegó al gobierno jalisciense cobijado por el partido Convergencia por la Democracia, enarbola el programa A Toda Máquina, que lanzó una licitación para el arrendamiento de maquinaria por la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader).

No es extraño que algunos privilegiados se enteren del contenido de los concursos oficiales antes de que aparezca la respectiva convocatoria, pues para eso tienen contactos en la esfera del poder. Tampoco es raro que tales concursos sean trajes sobre medida para que los amigos resulten ganadores. Ese fue el caso de la citada licitación de la Secretaría de Agricultura jalisciense, en la cual solo dos firmas cubrieron los requisitos exigidos: Operadora de Servicios Mega S. A. de C. V., firma ganadora, y Avancap, S. A. de C.V.

El asunto despíde un fuerte hedor a componenda, a cochupo, pues ocurre que la representante legal de las dos empresas concursantes es la misma persona: Mariel Rodríguez Printzen, quien entre 2010 y 2014 trabajó para las notarías 26 y 83 de Guadalajara, las que casualmente pertenecen al padre y el hermano del gobernador Alfaro. Por supuesto, al hacerse pública esa relación, una mano santa bajó de internet tan comprometedores datos.

El tufo a corrupción se acrecentó con el viaje a Los Ángeles del señor gobernador Alfaro y de la diputada Mirza Flores Gómez, adonde fueron a presenciar un partido de basquetbol de los Lakers en compañía del ganador de la licitación, Guillermo Romo Romero, quien se hizo cargo de todos los gastos de la pareja.

Por lo pronto, el comité directivo estatal del PRI ya pidió la intervención de la Auditoría Superior del Estado de Jalisco y de la fiscalía anticorrupción. A su vez, los diputados locales de Morena exigieron que tanto la citada fiscalía, como la Contraloría estatal y las auditorías de Jalisco y de la Federación tomen cartas en el asunto, demanda que apoyan diversas organizaciones civiles.

Cuando representantes de los medios le solicitaron una respuesta al gobernador Alfaro, este respondió: “No, no, no. Eso que cada quien se lo conteste solo. Cada quien que haga (sic) su responsabilidad…” Veremos que hace el góber con la suya.