“Busca ventanas y no espejos para inspirarte”.
 Nach.

 

Ante los graves hechos en Venezuela debemos de estar alerta a los hechos, acciones, posturas y los bandos alineados para poder ver el mapa completo de lo que pasa en ese país.

Cuando hablo de los bandos que se alinearan no solo me refiero a los internos de ese país, que sin duda darán muchas sorpresas; en el caso de los militares que se han mantenido firmes apoyando al régimen populista de Nicolás Maduro, muchos le seguirán siendo leales hasta el final, pero muchos otros pensaran en su patria, en el futuro de su país, en sus familias y entonces darán el paso para apoyar al movimiento nacional encabezado por Juan Guaidó.

Me refiero también a quienes fuera de ese país se alinearan con unos u otros para apoyarlos y hacer un cambio histórico defenestrando al régimen populista y otros que lo protegerán para tratar de mantenerlo en el poder, no todo está dicho en este terreno.

Voceros leales al “usurpador” –como lo llaman los disidentes y la oposición–, ya hablan de un golpe de Estado, en los hechos y en la realidad jurídica no hablan con razón, pues el golpe de Estado lo dan los militares contra gobiernos democráticamente establecidos, es una irrupción al Estado de derecho; sin embargo, en Venezuela durante las últimas elecciones se demostró que hubo injerencia del gobierno y estas no fueron legitimas.

A todo ello hay que sumar la invasión por parte del ejecutivo y el control a los poderes legislativo y judicial y las presiones políticas, extrajudiciales e ilegales usadas contra los opositores para menguarlos y afectarlos.

Han pasado más de veinte años desde aquel 2 de febrero de 1999, en que Hugo Chávez, llegó al poder en Venezuela, muchas fueron las advertencias, algunos las ignoraron, otros con angustia vieron cómo se iban cumpliendo una a una, hoy son historia, se dieron hechos crueles y sangrientos, gravísimas violaciones de derechos humanos, control total del poder, aplastamiento de la oposición y escandalosos actos de corrupción que han dejado al pueblo de Venezuela  hambriento y sufriente.

En México llevamos apenas unos meses de advertencias sobre las locuras, ocurrencias e imposiciones que realiza el gobierno de López Obrador, semanas en las que hemos visto acelerados procesos de imposiciones, violación de derechos humanos, intromisión a los otros Poderes de la Unión, control político y mediático a los opositores, lo que en Venezuela llevó 20 años de sufrimientos y tragedias para su pueblo, acá lo empezamos a sufrir en pocos meses.

Si estamos viendo las barbas de nuestro vecino cortar, tenemos que poner las nuestras a remojar. El gobierno las suyas porque por más abusos y control del poder que exista, tarde o temprano el pueblo se cansa y pelea por su libertad, la auténtica. Y los ciudadanos debemos remojar las nuestras, porque si no actuamos, tarde o temprano padeceremos lo mismo que nuestros hermanos venezolanos.

 

@perezcuevasmx

perezcuevasmx@gmail.com