“La Democracia es el peor sistema de gobierno diseñado por el hombre,
con excepción de todos los demás”.Winston Churchill.
Un año después de aquellas apabullantes elecciones en las que Morena y Andrés Manuel López Obrador, arrasaron en las urnas, el domingo pasado, seis estados de nuestro país tuvieron elecciones, entre ellos, Puebla y Baja California que disputaban las gubernaturas, además de Durango; Tamaulipas; Quintana Roo y Aguascalientes con cambio de congreso local y alcaldías.
Esta contienda arrojo datos interesantes, dignos de análisis, veamos: Morena gana las dos gubernaturas en juego, se queda con Baja California, sus cinco alcaldías y todas las diputaciones locales, sin duda arrebata al PAN el bastión que había conservado desde aquel histórico triunfo de Ernesto Ruffo en 1989, hace treinta años, y que paradójico es el destino, que justo el PAN pierde las elecciones con una participación pobrísima de ciudadanos, solo el treinta por ciento de participación. Aquí en esta entidad el setenta por ciento de los electores mandaron al diablo el proceso electoral, a los partidos políticos y en general a todos sus candidatos.
Tres décadas de administraciones panistas, sin duda generan desgaste en el ejercicio de gobierno, si a ello sumamos una pésima evaluación de la administración de Kiko Vega y la fuerza del gobierno morenista de la república, las renuncias de priistas destacados sumándose a Morena, pues se dio el caldo de cultivo perfecto para que el PAN dejara de ser opción de los bajacalifornianos, lo interesante es que Morena triunfa con un margen mínimo de apoyo social, la mayoría del electorado le dio la espalda.
En Puebla dicen que el PAN perdió pues dan por sentado que el gobierno seguía siendo suyo, nada más falso, después de la muerte de los Moreno Valle, y del gobierno interino de Jesús Almeida, los diputados locales, le dieron el control del gobierno a un viejo priista aliado con Morena, quien puso el gobierno al servicio de Barbosa para allanarle el camino, con todo y que el PAN se quedó sin el apoyo de muchos liderazgos cercanos a Moreno Valle; Morena solo superó por diez puntos al PAN, la lógica electoral se invirtió, el PAN gana la capital del estado y los municipios de la zona metropolitana, que había perdido abrumadoramente hace un año.
Quintana Roo un híbrido electoral coalicionista, pierde ante Morena. Aguascalientes, Tamaulipas y Durango son triunfos arrolladores del PAN sobre Morena, los números son contundentes.
Resultados finales: tres estados para el PAN, tres para Morena. No hay Morena Invencible, ni PAN Muerto; La única oposición real y consolidada para el futuro es el PAN. Lo local cobra relevancia por encima de lo nacional. Las contiendas futuras solo serán entre dos: Morena y PAN y quedó demostrado que no hay triunfos permanentes ni derrotas eternas, para nadie.
@perezcuevasmx