El sociólogo brasileño Boaventura de Sousa Santos, entrevistado por Miguel Ángel Velázquez para La Jornada (4/VIII/19), soltó algunas verdades inquietantes. Dijo por ejemplo que en América Latina hay izquierdas que paradójicamente atacan a los gobiernos de izquierda. No mencionó al zapatismo ni a su caudillo, pero es obvio que se refería a caciques de ese talante.

De Sousa recordó que la calificadora Merril Lynch dijo hace mucho tiempo que las dos áreas de negocios más rentables eran la educación universitaria y la salud. Por fortuna, parece que en este sexenio no se profundizará en esa política, no al menos en la educación, porque en lo referente a la salud la mayoría de los mexicanos no cuenta con acceso a médicos, medicinas y hospitalización, y no se entiende cómo puede acabarse con esa situación.

Señala el célebre sociólogo que se pretendió que la democracia regulara al capitalismo, “pero es el capitalismo el que regula la democracia”. Porque la economía de mercado acepta la democracia “mientras le es funcional”, pero si no, “la democracia se convierte, casi en todos lados, en cómplice de la corrupción, en la distorsión de las esperanzas de mucha gente”.

El reportero pregunta si la “honestidad alcanza para reinventar la democracia” y el entrevistado responde tajante: “no basta la honestidad, tiene que haber un proyecto político… La democracia, para salvarse, tiene que ir a la calle en las próximas décadas. La democracia actual es buena, pero es poca, y como poca no resiste”.

Advierte el doctor por la Universidad de Yale que el imperio ha cambiado (algunas de sus estrategias), pues ha realizado “una gran inversión en el sistema judicial latinoamericano, sobre todo en Colombia y Brasil, para crear un sistema inquisitorial”, para lo cual la CIA y otras agencias gringas entrenan y forman a los magistrados, y fomenta la injerencia de las iglesias evangélicas de matriz estadounidense.

Para finalizar, el sociólogo portugués advierte que si Andrés Manuel López Obrador fracasa, “estaremos en la oscuridad total, sin proyecto político” y que si vuelve la derecha al poder “lo hará con la idea de la venganza total, con resentimiento, porque las élites aquí no son sólo capitalistas sino también colonialistas”.

Habrá que tomar en serio a De Sousa Santos, pues con el PRI y el PAN en la lona y los demás partidos en la marginalidad, más allá de la opinión que nos merezca López Obrador, si fracasa México entrará en uno de los periodos más negros de su historia. Ojalá nos equivoquemos.