Entrevista a Luis Miguel González, Director Editorial de El Economista

 

En términos generales la iniciativa de “Paquete Económico 2020”, que el pasado domingo el presidente Andrés Manuel López Obrador entregó al Congreso de la Unión, cumple con las expectativas que tienen que ver con estabilidad, porque es un presupuesto prudente, razonable, que garantiza estabilidad, pero se abre un signo de interrogación cuando se trata de crecimiento, afirmó en entrevista a Siempre! Luis Miguel González, Director Editorial del periódico El Economista.

Agregó que en buena medida el tema del crecimiento lo debemos tomar en serio todos, no únicamente el gobierno. “El paquete económico es una de las piezas para generar el crecimiento, pero hay que ser realistas, hay otros elementos que intervienen, está la inversión privada, el contexto internacional, lo digo porque no todo depende de lo que el gobierno haga o deje de hacer, afortunadamente”.

El especialista en economía, se muestra optimista al decir que hay tiempo o margen para que el propio gobierno federal, en el rubro del crecimiento corrija, y presente  sino en el paquete económico, en el transcurso de los próximos meses algo más comprometido con el tema del crecimiento.

Refiere que no necesariamente el Presupuesto está dirigido a estimular el crecimiento y el empleo. “Creo que el generar empleo depende de más cosas y fundamentalmente no le toca al gobierno garantizarlo, sino generar las condiciones”. La creación de empleos, insiste, es fundamentalmente del sector privado y tiene que ver con asuntos que no necesariamente están en el paquete económico, por ejemplo el Estado de Derecho y combate a la inseguridad.

 

Dos Bocas, mala idea

Luis Miguel González, opina que la construcción de la refinería Dos Bocas es una mala idea, ya que “entre más sabemos de esta Refinería, más nos convencemos de que no es un proyecto económicamente racional, se alimenta básicamente de una retórica nacionalista energética, que nos va a costar muy caro”.

Por otra parte, el economista señala que a diferencia de Dos Bocas, la Comisión Federal de Electricidad es una empresa que  como cualquier consorcio de ese tamaño requiere de recursos, del apoyo del gobierno y en este caso es más fácil justificar los dineros.

Luis Miguel González, Director Editorial de El Economista

 

Cultura, Medio Ambiente y Salud

Luis Miguel González afirma que estos sectores siempre han sido sacrificados. “El que los programas sociales y los proyectos de seguridad sean beneficiados, una parte tiene que ver con la coyuntura. Es decir, la seguridad es una prioridad, no crece mucho el presupuesto pero de todos modos reconoce que ya era muy alto. Y en el caso de los proyectos sociales hay que tomar en cuenta que es el primer presupuesto hecho por la Cuarta Transformación, y en ese contexto es relativamente normal que se trate de un presupuesto en el que se quiere dejar su huella”.

Respecto del sector salud, destacó que más importante que el monto total de los recursos destinados a salud, va a ser la forma en que se ejerzan y la dinámica que se establezca.

 

Turismo

Afortunadamente, dice, el sector turístico depende más de la inversión privada. “No me preocuparía tanto por el sector turismo en parte porque ahí si tenemos grupos empresariales, gobiernos locales, México ha demostrado a lo largo de los años que sabe hacer turismo, evidentemente hay un problema de competitividad internacional y otros asuntos, no necesariamente considero la respuesta estaba en darle más dinero a ese sector”.

Este rubro, recalcó, para bien o para mal, lleva mucho más tiempo trabajando en su propia lógica, le debe más a la capacidad de resiliencia de emprendimiento de la iniciativa privada, que a los recursos del Presupuesto Federal. “No soy tan pesimista, me preocupa más por ejemplo la caída del presupuesto de secretaría de Comunicaciones y Transportes, ya que no veo muy claro el tema de infraestructura más allá de los grandes proyectos”.

Luis Miguel González admitió que luego de conocerse el paquete económico del próximo año, la respuesta lógica es que no hay un mayor entusiasmo por parte del empresariado, sin embargo “luego uno piensa, el sector empresarial en México son más de 4 millones de empresas, en su mayoría son bi-PYMES –Business Intelligence que refiere a la inteligencia de negocios–, que en buena medida dependen más de sí mismas que del gobierno”.

Es importante, enfatizó, que cuando hablamos del sector empresarial, no se debe perder de vista, que tendemos a pensar en los 20, 30 ó 50 mayores empresarios, pero quienes tienen más en juego respecto a si una política pública funciona o no, son los microempresarios, y con frecuencia dependen más de políticas locales, que de las grandes decisiones federales.

 

“Entre más sabemos de esta Refinería, más nos convencemos de que no es un proyecto económicamente racional, se alimenta básicamente de una retórica nacionalista energética, que nos va a costar muy caro”.

 

Hacienda: recaudación a 3.5 billones

El especialista explica que el paquete Económico se complementa con las Leyes que están dedicadas al combate a la evasión fiscal y a la defraudación, insisto, apunta “queda la duda sobre qué va a pasar con los informales pero hay una señal muy fuerte respecto al combate a los factureros, a la defraudación a escala industrial, habrá que ver cómo aterrizan la ley así como ver los primeros casos para entender cómo va a estar el tema de a quién le cobran, cómo, etcétera”.

La gran novedad corresponde a la persecución a la evasión fiscal, apuntó.

Respecto a la información de que economistas de Citybanamex, Moody’s, Capital Economics, Barclays y Goldman Sachs coinciden en que hay supuestos macroeconómicos dentro del presupuesto 2020, como petroprecios, crecimiento y superávit primario, que podrían no cumplirse y representar un riesgo para las finanzas públicas de México, Luis Miguel González asegura que si bien es cierto, también habría que tener en cuenta que todos los paquetes económicos de los últimos 15 años, no han fallado en los pronósticos de crecimiento.

“Creo que en ese sentido una de las cosas más relevantes es que los pronósticos son indicativos, y no necesariamente el hecho de que no se cumplan significa el fin del mundo. Evidentemente crecer al 2 por ciento permitiría un crecimiento de los ingresos tributarios, pero hay otra forma  de incrementar estos ingresos sin que haya crecimiento. Básicamente con mayor presión fiscal, aunque no suba la tasa impositiva, simplemente si la autoridad está encima de los contribuyentes, puede lograr que haya una mayor recaudación”, aseveró el especialista.

La expectativa, dice, es que una parte de los contribuyentes que en este momento no cumplen, empiecen a pagar. Una de las grandes dudas, opina, es a cuántos de los informales realmente se les puede cobrar, qué tan viable es, “desde mi punto de vista es una cosa en la que el presupuesto, o el paquete económico nos queda a deber”.

El director editorial de El Economista, manifiesta que aunque es posible, difícilmente a partir de noviembre, Petróleos Mexicanos arrancará con 15 licitaciones de los primeros contratos de Asociaciones Público Privadas, que junto con la inyección de capital del gobierno, le permitirán alcanzar la meta de producción de un millón 951 mil barriles diarios estimados en el Paquete Económico 2020.

 

La mala y la buena noticia

Finalmente, González afirma que lo que más llama su atención, es la mala noticia del Paquete Económico que está en el Congreso de la Unión, como es la baja del 5 por ciento en inversión fija bruta de parte del Gobierno Federal, “es un concepto un poco teórico, mucha gente no repara en lo delicado que es, bajarle a un presupuesto inversión que ya era bajo. Por el contrario la buena noticia,  es que el gobierno se está comprometiendo a no gastar más de lo que ingresa”.