En la edición de la semana pasada, la revista Proceso publicó que el empresario Javier Joaquín López Casarín, operador y mano derecha de Marcelo Ebrard, ejerce un poder fáctico dentro de la Secretaría de Relaciones Exteriores: sin ser servidor público ni diplomático.
Con esta acción queda clarísimo que el semanario continuará realizando reportajes sin sustento, seguramente en un tiempo se olvidaran de Javier Joaquín López, pues solamente se trataba de darle un golpe al canciller Marcelo Ebrard, lo que no se sabe aún es de parte de quién.
De acuerdo con el periodista Raymundo Riva Palacio, el reportaje de la revista fue oportuno no por sus revelaciones, que no hubo, sino por lo que sucedió con la embajadora de México en Estados Unidos, Martha Bárcena, pues según él: “El canciller, contra lo que se piensa fuera de Palacio Nacional, no es de la confianza de López Obrador, y en el entorno más cercano al presidente, lo consideran un traidor”.
Nada más falso, pues el propio AMLO, ha reconocido no en pocas ocasiones, la enorme confianza que tiene depositada en su operador político en el ámbito exterior.
Debido a su gran potencial como operador político, el canciller Marcelo Ebrard ha logrado concretar aciertos muy positivos para el gobierno de la 4T, saliendo victorioso de crisis como la migratoria y la firma del T-MEC.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha reconocido en varias ocasiones, que la confianza que ha depositado en Marcelo Ebrard para que lo represente en el extranjero es total, y no tiene reparos en hacerlo de forma pública.
Hace dos semanas, el mandatario federal reconoció y apapachó a los integrantes del cuerpo diplomático de México, entre ellos, al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard. Durante la 31 Reunión de Embajadores y Cónsules realizada en el Salón Tesorería de Palacio Nacional, López Obrador aseguró que la política exterior de México va bien gracias a que los diplomáticos a cargo de Marcelo Ebrard se han apegado al principio de no intervención.
Además el tabasqueño hizo un pequeño paréntesis para dedicarle unas palabras a Ebrard, mismas que reproduzco a continuación: “Decirles también que ha sido para mí de gran apoyo el contar con el trabajo, la conducción en política exterior de Marcelo Ebrard me ha ayudado mucho. Ya ven que no me gusta viajar mucho, no necesito hacerlo, tengo una muy buena representación. Marcelo me representa muy bien en todos los foros y lo va a seguir haciendo”.
Y es que para el Jefe del Ejecutivo, hasta el momento la política exterior ha sido ejemplar y reconocida en todas partes: “La política exterior es ejemplar, ya de nuevo empiezan a hablar de que México, como se decía antes, es el hermano mayor en el caso de la América Latina y El Caribe, y en lo que tiene que ver con la vecindad con Estados Unidos lo mismo, hay una relación de respeto mutuo y (así lo) queremos mantener con todos los gobiernos y con todo el pueblo del mundo”, destacó.
Y aunque es prematuro hablar de la sucesión presidencial, es indudable que Marcelo Ebrard es uno de los personajes que ocupa un lugar fundamental en la lista, en la cual también se encuentran la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum; el titular del IMSS, Zoé Robledo; el líder de la bancada de Morena en el Senado, Ricardo Monreal; y el secretario de Hacienda, Arturo Herrera.
Sí Ebrard continúan siendo el hombre de toda la confianza del presidente, sin duda será uno de los rivales a vencer rumbo a la carrera presidencial.