Entrevista con Rafael Gárate, Asociación Mexicana de Profesionales de Relaciones Públicas

 

Los mexicanos hacemos frente al Coronavirus Covid-19, una enfermedad altamente contagiosa, cuya propagación costará cientos de miles de vidas, y que ya provoca efectos económicos y sociales a escala global.

Al momento de escribir estas líneas suman 93 casos confirmados de Covid-19 en México. La Ciudad de México es la que tiene más casos positivos de infección con 21, Nuevo León 14, Estado de México 10, Puebla 9, Querétaro 7, y Yucatán 6.

El gobierno a través de su cuenta de Twitter, afirmó que se destinarán 3 mil 500 millones de pesos para atender la pandemia de Covid-19, “y salvaguardar la salud de las y los mexicanos”. Además de que las medidas para la segunda fase serán anunciadas en su momento conforme a parámetros técnicos y científicos. Así la administración de López Obrador no tiene prisa y se toma con calma el asunto.

Mientras tanto se decidió suspender clases en todos los niveles educativos a partir del viernes 23 de marzo, pero también se ha insistido en que no se suspenderán vuelos, ni se cerrarán las fronteras, ni los puertos marítimos. La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, informó que a partir de esta semana se cancelarán todos aquellos eventos, ya sea públicos o privados, que aglomeren a mil personas como mínimo.

El gobierno Federal estima que la contingencia en el país dure alrededor de 12 semanas.

Para conocer el manejo de la comunicación del gobierno del presidente López Obrador en la materia, este semanario entrevistó a Rafael Gárate, Presidente de la Mesa Directiva de la Asociación Mexicana de Profesionales de Relaciones Públicas, quien opinó que los mexicanos, somos un país escéptico por naturaleza, y cualquier información y decisión que tome el gobierno siempre es muy cuestionada.

 

 

Sin embargo, apuntó, “pongo de ejemplo el 2009 cuando estaba como presidente Felipe Calderón, recuerdo que en el puente de mayo, en el más largo que tenemos del primero al cinco de mayo, se decidió cerrar prácticamente todo: restaurantes, teatros, cines. En ese momento la medida fue muy cuestionada. Hoy a toro pasado, podemos ver que fue en su momento una buena decisión que mucha gente satanizó y se enojó”.

Y añadió, “me parece que hoy, más allá de cuestionar si el gobierno está tomando una buena ó mala decisión en el tema salud, están perdiendo la batalla en comunicación. Qué sucede, ese escepticismo que tenemos todos los mexicanos, está haciendo que la batalla mediática la estén ganando las redes sociales, los mensajes de Whatsapp, artículos de medios de dudosa reputación, artículos que vienen de otros países, estos videos de gente que supuestamente está en España, o que supuestamente está en Italia, etcétera. Entonces al no haber una definición y una comunicación directa, en donde la gente, los medios, no estén recibiendo respuesta por parte del gobierno, quien está ganando la batalla es esa desinformación que se está generando alrededor de los medios de comunicación, cuando digo los medios de comunicación, lo son básicamente las Redes Sociales”.

El entrevistado sostuvo que más allá de cuestionar, o enjuiciar  las decisiones que médicamente está tomando el gobierno, “me parece que al no haber una definición y una postura sólida, formal, clara, están perdiendo la batalla con los medios y las redes sociales”.

Rafael Gárate manifestó “si lo analizamos desde un punto comunicacional, el presidente no se está saliendo de su agenda y de su característica postura ante la mayor parte de la situaciones. O sea, no estamos hablando nada más del Coronavirus, él está siguiendo con el guión que ha marcado desde el inicio de su gestión, entonces esa no es la parte que nos debería sorprender. La parte que nos debería sorprender es la parte de comunicación más técnica. Es decir decisiones que no se explique porqué se toman o no; se mencionó el evento que hubo en la Ciudad de México donde hubo una reunión en un concierto el Vive Latino, en donde habían más de 50 mil personas reunidas, y no se dio una explicación de porqué se permitía ese evento; se tomaban comentarios aislados de algunos funcionarios, se tomaban declaraciones de la Jefa de Gobierno, en realidad nunca hubo una explicación y ese es el temor”. Al no haber una postura sólida, formal por parte ya no del presidente, de los técnicos que están llevando este caso, me parece que mediáticamente siempre van a estar enjuiciados  y perdiendo la batalla con los medios.

Consideró que los medios también han caído mucho en la especulación: “Vemos videos, crónicas, fotos impresionantes del Papa, dando la bendición de los miércoles con una explanada del Vaticano vacía. Porque no tenemos otras imágenes, no tenemos una postura oficial de este gobierno, más que enviando señales claras que son las que deberían estar inundando los medios, y no las estaríamos tomando de otras partes porque no hay una postura, y una línea de comunicación perfectamente marcada por el gobierno”.

Prosiguió: “Entiendo que ellos han tratado de tener un sólo vocero, que es el subsecretario de Salud, pero no ha convencido a nadie, y algo que percibo en los medios masivos es que los mismos opinólogos políticos que hablan sobre las elecciones, sobre otros temas políticos y económicos, son los mismos que opinan alrededor del Coronavirus. Creo que los medios poco se han metido al tema técnico y al tema de salud”.

El Presidente de la Mesa Directiva de la Asociación Mexicana de Profesionales de Relaciones Públicas, mencionó hay que pensar que quién está tomando la responsabilidad en este momento es la Iniciativa Privada, los restaurantes, los hoteleros, están tomando sus medidas. Hay que recordar que México es un país en donde el 80 por ciento de la población vive de los servicios, de la señora que tiene su puesto de comida, de los restaurantes, de los hoteles, y esa gente no puede parar. Sin embargo, se están tomando medidas precautorias que aunque no las ha marcado el gobierno federal, varios gobernadores lo están haciendo.

Y recordó cuando en 2009  Yeidckol Polevnsky se volvió famosa al decir “no le hagan caso a lo que dice el gobierno, y vamos a abrazarnos y vamos a apapacharnos”,  me parece que es el mismo discurso que estamos escuchando hoy, la sorpresa es que no hay sorpresa. El presidente y el gobierno federal están siguiendo una línea de comunicación que han utilizado siempre. Mañana habrá un festejo en Petróleos Mexicanos para celebrar o conmemorar la expropiación petrolera y no pasa nada, parece que todo se va a llevar a cabo. Pemex es una torre con siete mil, ocho mil empleados, tuve la oportunidad de darme una vuelta por la mañana y no hay ni un sólo filtro de sanidad, no hay un sólo protocolo, creo que ahí está el tema, que no hay una línea de comunicación y de protocolos.

La gente, añadió, se sentiría mucho más tranquila si llegara a sus oficinas –hablando del gobierno–, y hubiera un protocolo.

Rafael Gárate consideró “va más allá del discurso del presidente, ya lo conocemos y así va a seguir actuando, pero las oficinas de gobierno deberían seguir algún tipo de protocolos”. Es un tema de actuación puntual en los lugares de trabajo de la gente, leía que empresas privadas por ejemplo, le están diciendo a sus empleados si ustedes llegan en transporte público, tienen permiso de llegar 2 o 3 horas después para que no se metan en horas pico al metro por ejemplo, me parece una medida adecuada para seguir trabajando, y una precaución razonable que cualquiera podría tomar; asimismo implementar horarios escalonados para que no hubiera tanta aglomeración en el transporte público, vaya podrían tomarse medidas un poco más visibles, para generar tranquilidad en la población. Pero no hay un liderazgo que esté marcando esas precauciones.

El entrevistado indicó esas son las cosas que permean en los medios, en las redes. “Imagina que eres un empleado de PEMEX llegas a tu torre y te encuentras con que no hay una sola medida de precaución, en un lugar donde hay más de 5 mil personas reunidas, entonces eso es lo que permea más que lo que dijo el subsecretario en la mañana, esos son los mensajes que 5 mil personas están enviado a sus redes y a los medios. Definitivamente esa es la comunicación que nos está llegando a todos.

Confió en que la pandemia no sobrepase las decisiones que se están tomando, “pero si me sorprende que en los Aeropuertos haya poca prevención, que los vuelos sigan llegando de Italia, una medida mínima. ¿Quién está tomando la iniciativa? las líneas aéreas, de cancelar algunos vuelos, volvemos a los mismo, al no haber una línea que marque protocolos mínimos, la iniciativa privada y la sociedad es la que está tomando las medidas”.

Rafael Gárate consideró que es necesario recordar que el tema de salud pública es responsabilidad de los ciudadanos, tampoco le podemos echar la culpa al gobierno si no está haciendo lo que esperamos que haga, en su momento Felipe Calderón fue muy tajante y enfático,  se le criticó demasiado, entonces creo que esas medidas un poco deben ser lideradas por la iniciativa privada, mientras el gobierno federal no tome posiciones claras y directas.

Alertó en que no nos percatamos de que el Coronavirus va a dejar de ser un tema de salud, para pasar a un tema de Seguridad Nacional. “Volvemos a lo mismo, Petróleos Mexicanos, pues es el estandarte de este gobierno, y qué va a pasar si hay un número importante de enfermos en las plataformas petroleras, en las plantas de distribución, en la misma torre corporativa de PEMEX, o sea se va a volver un tema más allá de salud un tema de Seguridad Nacional.

Gárate manifestó: “hoy el presidente decía, qué bueno que incrementamos nuestra producción petrolera, pues sí, pero no he visto un sólo protocolo que hable de qué va a pasar con las plataformas petroleras, esa gente que está a la distancia, que depende de gente de tierra, que hay infección en los puertos, qué va a pasar con toda esa gente, hoy no lo sabemos”. Estoy asumiendo que ellos tienen un protocolo que van a implementar en su momento, pero volvemos a lo mismo, comunicacionalmente los empleados no lo saben, no lo ven.

Recomendó empezar a utilizar el sentido común, tomar nuestra responsabilidad como ciudadanos, y medidas precautorias. “No es una solución ir a comprar galones de gel, papel de baño, comida, hay que ser lo suficientemente conscientes de que con prevención, tomando nuestra distancia, evitando asistir a lugares concurridos, creo que son medidas responsables, sencillas, que todos podemos tomar y no esperarnos a que el gobierno empiece a dar las indicaciones, porque no sabemos cuándo van a llegar”.

Otro problema de comunicación, enfatizó, es que no es un periodo vacacional: “Sale un secretario a dar la noticia más importante que ha dicho el gobierno, sobre las medidas que están tomando respecto a los niños, y habla de vamos a ampliar las vacaciones, no son vacaciones, estamos en una situación excepcional en la que el país nunca había estado, pues había que hablar algo así y me parece que también los niños lo entenderían perfecto, al decirles: Hay una enfermedad   que nos puede dar a mucha gente, vamos a quedarnos en casa”.

Por último afirmó, en este momento, las palabras deben ser muy bien cuidadas y no nada más las palabras, los tiempos, el tomar decisiones,  mandar mensajes con un lenguaje correcto en un momento adecuado, puede parar todo este escepticismo y toda esta psicosis que se empezó a generar.