Cada cierto tiempo, desde alguna posición de gobierno o desde el legislativo, aparece alguna iniciativa que busca regular Internet. En algunos casos es con argumentos como contribuir a disminuir la violencia o fomentar el respeto a las autoridades –por lo que hay quienes prohíben la difusión de memes–, en otros es con motivos que se escudan en la seguridad nacional o casos de desastre, gracias a los cual se permitiría bloquear la difusión de contenidos a través de operadores telefónicos o proveedores del servicio.

Ahora mismo en México hay una iniciativa promovida por Morena que busca precisamente limitar la transmisión de contenidos si, a juicio de las autoridades, hay motivos de seguridad nacional para hacerlo.

En otros países se han dado casos similares, pero en todas partes la sociedad y, en especial, los usuarios de redes sociales, organismos académicos y defensores de la libre expresión se han opuesto a medidas de dicha naturaleza.

El debate se centra en la libertad que debe haber en una red que es de alcance mundial, en la que el libre intercambio de contenidos es su principal valor, algo que –consideran muchos– no debe ser restringido de ninguna manera.

El debate, en tanto, continúa.