Entrevista con Emilio Vizarretea Rosales, analista político

 

Hace unos días los mexicanos nos enteramos que de manera oficial el Presidente Andrés Manuel López Obrador asistió a Badiraguato, Sinaloa, a visitar los avances que registra la construcción de la carretera que conecta a Sinaloa con Chihuahua.

Sin embargo después de su encuentro con la señora Consuelo Loera de Guzmán a quién Andrés Manuel saludó de mano, aún cuando estamos en plena contingencia por el Covid-19, previamente el  Jefe del Ejecutivo sostuvo una larga plática con el licenciado José Luis Meza, abogado defensor de Joaquín “El Chapo” Guzmán, la versión cambió.

Por lo anterior muchos nos preguntamos si el encuentro con la madre de Guzmán Loera fue espontáneo o planeado, justo el 29 de marzo, fecha del cumpleaños de Ovidio Guzmán.

En camino hacia La Tuna, lugar donde se realizó el evento oficial, encabezado por López Obrador, se instalaron tres retenes o filtros de revisión, a cargo del Ejército y la Guardia Nacional. Narran que desde el primer filtro ya era una odisea pasarlo para quien no justificara un motivo real de circular por dicha carretera. El segundo fue imposible, de no aparecer el nombre en la lista oficial de invitados registrados por Presidencia de la República. Incluso ahí quedaron varados los senadores sinaloenses Rubén Rocha Moya, quien iba acompañado por el Presidente del Poder Judicial en Sinaloa, Enrique Inzunza Cázarez, el diputado federal Alfredo Villegas, el alcalde de Culiacán Jesús Estrada Ferreiro, entre otros. Ellos fueron invitados del gobernador Quirino Ordaz.

Cuando el presidente amablemente saludó a doña Consuelo Loera, le pidió que no se bajara de la camioneta, y acto seguido le comenta que ya leyó su carta.

 

 

En fin, los mexicanos nos preguntamos si el encuentro fue premeditado o espontáneo, para tal efecto este semanario entrevistó al analista, Emilio Vizarretea Rosales, licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública de la UNAM, quién opinó: “Me parece que ha sido un hecho lamentable, innecesario pero que también el presidente traía sus propios cálculos, sus intereses, sus necesidades, y sus deseos perfectamente valorados, lo que él no esperaba quizás es que hubiera un registro testimonial de lo que ahí estaba ocurriendo, y esto pues lo sorprendió. No puede ser que pasaba por ahí y me los encontré, es como lo que ocurrió con Ovidio, pasábamos por aquí, lo vimos y desde ahí fuimos por él. No, eso no existe, ni en el mundo real ni menos en el de la delincuencia”.

El analista, con estudios de Postgrado en Ciencia Política, Relaciones Internacionales, y Seguridad Nacional, manifestó que es lamentable, porque el Presidente representa al gobierno y al Estado mexicano, entonces tiene que cuidar las formas, porque precisamente esto genera una serie de murmuraciones, que tienen que ver con una supuesta vinculación con la delincuencia organizada. “Hay muchos señalamientos en donde no puede haber evidencia desde luego, pero lo que si puede haber es el tratamiento que les ha dado, en particular a esta familia, es muy sospechoso y deja mucho qué desear sobre todo en el contexto de inseguridad en el que nos encontramos”.

Enfatizó que no solamente es la visita ó el saludo, son los elementos que vienen desde aquel denominado Culiacanazo de la liberación que hizo como Presidente, como Jefe del Gabinete de Seguridad Nacional, y liberó a Ovidio. “Tal parece que ha habido una secuencia por las cartas que han circulado que nadie ha desmentido”.

Por lo anterior Emilio Vizarretea se preguntó “¿A dónde nos lleva esto? Mire, el tema no es quiénes estaban ahí, sino qué necesidad tiene el Presidente de estar ahí, no es un tema de andar identificando a los personajes, ¿qué estaba haciendo ahí? Ir por una viejita y con respeto lo digo, dentro del esquema, todos los que estaban ahí son cómplices de un delincuente punto. Y si a eso se agrega la complicidad, es brutal y lamentable. No soy Ministerio Público, ni autoridad, pero lo que si puedo mencionar es por lo que hemos escuchado tanto en medios como en redes sociales, es que ha generado un malestar innecesario, y en los momentos menos adecuados, menos oportunos”.

 

 

La nueva mafia del poder

Emilio Vizarretea Rosales argumentó “¿qué coincidió con el aniversario de Ovidio? qué curioso, qué casualidad, no. Qué pasa, que ahí está y ahí estaba la señora esperándole. Mire qué casualidad, que se quedó a comer, qué casualidad, que pasó al restaurante Panamá en Culiacán, y ahí estaba casi la banda, qué casualidad… ¿Entonces qué, él es un integrante distinguido de la nueva mafia del poder? Eso es lo que está ocurriendo y el Presidente quiere desviar la atención con otros temas. Mire, este no es un tema menor, es un tema delicado.

“Después de lo que está pasando en el mundo, se ha esparcido ya el rumor de que después de Maduro sigue él. Imaginemos en qué temporalidad está colocando al gobierno de México, es un hecho lamentable que ha tenido una repercusión que lo único que ha generado en el Presidente es que pierda respeto, le pierdan confianza, no sea un sujeto con el cual la gente tenga el interés o la intención de seguir adelante. No es un tema gratuito, si andaba abajo del 35 por ciento de sus encuestas, que es algo que si le preocupa, yo creo que en este momento anda por los suelos, y entonces veremos quién lo levanta”.

En el transcurso de la entrevista el académico destacó que con esta visita pareciera que López Obrador quiere quedar bien con sus patrocinadores. “Y tengo que decirlo así, porque la manera en que se está confrontando con los distintos sectores productivos, da una pena ajena, el gobierno jaloneado por el Presidente, ha llegado lento para atender una necesidad, un problema, una emergencia un riesgo y una amenaza ya a la Seguridad de la Nación. El presidente llega lento, llega mal, llega en una posición de ignorancia, y peor aún, sin ningún plan, sin ningún proyecto. La contingencia ahí se la van llevando para tener algo qué decir. El Presidente en este caso lo voy a decir con respeto, como ocurrió con el caso del Movimiento Feminista, no tiene nada qué decir, el Presidente dijo, está afuera de la jugada literalmente”.

Emilio Vizarretea Rosales añadió que cuando ocurrió lo de Ovidio, el Culiacanazo de la liberación de un delincuente buscado, “la pretensión o el problema que había de los dos grupos fundamentales, el cártel Jalisco y el cartel de Sinaloa, que habría divisiones, bueno, parecía que el cártel de Sinaloa estaba en segundo lugar, pero con ese posicionamiento y los señalamientos que se esparcieron, realmente lo ponen en una situación muy endeble al Presidente. Es decir, López Obrador ha pasado realmente a una situación de debilitamiento brutal y todo el discurso que traía se fue a la basura, no tiene nada qué decir ante los hechos evidentes”.

Por otra parte afirmó que existen señalamientos de una omisión ó de una complicidad. “Y esos señalamientos dado el manejo que se hizo a posteriori de lo que ocurrió en Culiacán, pues nos desmintieron todos los señalamientos del propio Presidente. O sea, el tema de que era para proteger a la Ciudad no fue más que un argumento falaz, que lo que quería era proteger a un delincuente”.

Asimismo señaló que la actitud de la madre Guzmán Loera se entiende desde un aspecto sentimental, emocional, “eso puede ser válido pero tampoco la señora lo haría en alguna medida sino tuviese realmente la comunicación con el Presidente. Mire, hay tanta gente que ahorita le está pidiendo al Presidente que lo atienda desde la hija de la señora Robles que tienen ahí, hasta las cartas sobre la falta de medicamentos, la falta de atención, la falta de plazas, la falta de cumplimiento de la palabra. Bueno, que le puedo decir, todo eso ya está documentado ya no son sus enemigos ni los conservadores, es la gente que lo apoyó a él también.

“Y en este caso la preferencia se la está dando a la delincuencia y eso creo que no es sano ni para él, ni para el país, ni para nadie, no solamente tenemos el mes más alto en homicidios, aún y a pesar de la crisis de salud, sino que tenemos un problema mayor de falta de atención. Es decir, el Presidente prefiere hacer una visita donde desperdicia tres ó cinco horas, en lugar de ponerse a chambear sobre lo que hay qué resolver”.

Emilio Vizarretea Rosales reitera que el costo del viaje que realizó López Obrador a Badiraguato, Sinaloa, va a ser inevitable, “no solamente por lo que ha ocurrido ya a nivel internacional, en los principales periódicos del mundo, al margen del posicionamiento y la cuestión ideológica, del populismo, y todo lo que queramos señalar, lo ven de una manera muy sencilla allá, es cómplice, eso es delicadísimo, y qué significa, bueno que la presión de Estados Unidos en el caso nuestro ha debilitado la posición del gobierno, y la defensa ante Estado Unidos, y entonces pues si teníamos una posición débil, ahorita estamos entregados realmente a placer de lo que decida la campaña del presidente Trump, y su gobierno”.

Agregó que es lamentable, “mucha gente está esparciendo ésta idea mala me parece pero terminando Trump con Maduro, el que sigue es Andrés Manuel”.

Finalmente Emilio Vizarretea dijo que la delincuencia en México no habrá de terminar porque “ha aprendido las lecciones de omisión y las está replicando, la delincuencia aprendió que no sufre ningún daño, que no los están persiguiendo, pareciera que gozan del manto protector presidencial. Ojalá el Presidente tome cartas en el asunto por su bien, por el de todos los ciudadanos y porque las condiciones de inseguridad, salud, y crisis económica en que nos encontramos, mejoren”.