Entrevista con Ricardo Alvarado, maestro en políticas púbicas CIDE

Para Ricardo Alvarado, politólogo de la UNAM y maestro del CIDE, la manera de gobernar mejor, independientemente de las ideologías, es a través de rutinas y reglas que tienen que abarcar a todos y no doblarse porque uno cree que es bueno. Y las irregularidades que enfrenta el Indep, remarca, deben resolverse en base a la ley y a las normas. Precisa:

“Dos cuestiones: una, cambiar los nombres de las cosas, cuando estamos demasiado tiempo en el discurso, es importante en materia de gobierno y sobre todo de combate a la corrupción, pero no puede ser lo único. Pareciera que lo que le pasó al SAE fue solo un cambio de nombre, porque o sus directivos no se ciñeron a la tarea, no han tenido el tiempo o el apoyo del resto del gobierno para hacer los cambios necesarios. Un nombre grandielocuente, que no  empata con la realidad.

“Modificar la realidad con base en discursos implica cambiar leyes y rutinas de gobierno y precisamente en el Indep se complicaron las cosas. El presidente declara que las personas de su proyecto de nación necesitan tener un compromiso absoluto con el proyecto y lo que le contesta Jaime Cárdenas es que a él se le pidió lealtad ciega y no puede tener una lealtad ciega.

“Eso nos lleva a otro problema: en la teoría de las burocracias, la gran preocupación es que éstas no estén sujetas a los caprichos de política. Es una obsesión de más de cien años en este ramo del conocimiento y la mejor respuesta que hemos encontrado de cómo lidiar con la presión que ejercen los y las políticas, es que la burocracia debe ser fiel a sí misma, a sus rutinas, a sus procesos y eso la vuelve más o menos independiente de los caprichos de la política.

“No debe haber una lealtad absoluta al mandatario sino ad a la ley, a las rutinas que establece la propia burocracia, es lo que le permite funcionar mejor, dice la teoría y aquí lo hemos podido demostrar. En estos casos, podemos pensar que existe ciertas presiones al interior del gobierno federal de no romper pero si rodear las leyes a conveniencia, para lograr un objetivo político determinado que va más allá de lo que necesitan hacer las instituciones de gobierno”.

 

Indep-Infonavit-FGR

“La discusión que teníamos cuando la Fiscalía le otorgó al gobierno federal el cheque por 2 mil millones de pesos, es que ese dinero no era extra, es dinero desfalcado de una institución —Infonavit—, que lo perdió y lo correcto era que ese organismo lo recuperara. Lo robado tiene que regresar a donde fue desfalcado no a donde sea.

“Lo peor: el cheque no tenía fondos, lo que nos deja con más preguntas, ¿que pasa con la rifa del avión, dónde están los premios?

“Si el instituto no cumple con los objetivos que nos señalaron, con qué objetivos sí está cumpliendo. La nueva persona que se hará cargo, Ernesto Prieto, suponemos que él entonces si está dispuesto a doblar las reglas del juego, las leyes, insisto no romperlas, doblarlas, jugará en la línea o cambiará la disposición del juego.

“Si esto pasa en un organismo chiquito en términos presupuestales, hay que Imaginar que pasa en áreas de gobierno más grandes, con menos funcionarios decidiendo, como en la secretaría de Salud que ahora solo tiene un subsecretario y que debajo de él, un monton de organismos reguladores como Cofepris.

“Esto nos hace preocuparnos de como funciona la estructura de gobierno.  Gobernar es difícil, porque implica jugar con las reglas del juego, porque son las reglas justo las que hacen a un gobierno, es lo que está determinado en las leyes, por eso deben de cumplir. Los problemas se tienen que resolver con base en las leyes y también en este tipo de situaciones administrativas”.