«inteligenti pauca»*

«A buen entendedor, pocas palabras»

 

A dos días de la conmemoración del descubrimiento de América, las estatuas que conforman el monumento de Cristóbal Colón que se ubicaba en el Paseo de la Reforma desde el año de 1877 fueron retiradas, la justificación de la Secretaría de Gobierno de la Ciudad de México fue que las estatuas serían restauradas de forma profunda, a fin de preservar el patrimonio cultural y artístico que dicho monumento representa. Algunas personas opinan que más bien se trató de protegerlas del vandalismo y destrucción que ya había sido anunciado por grupos de “anarcos”.

El día 12 de octubre se celebró el día de la hispanidad, el día de la raza, o el “descubrimiento de América”, hace 528 años por Cristóbal Colón, navegante de origen genovés que recibió el apoyo financiero de los Reyes Católicos de Castilla y Aragón para llevar a cabo su expedición.

En el año de 1992 cuando se conmemoraron los 500 años de tal evento, hubo previamente un gran debate respecto si debía ser considerado como la invasión, conquista, victimización y exterminio de los pueblos originarios o bien el encuentro de dos culturas, la cultura española y la de los numerosos pueblos originarios del continente americano. En este gran debate participaron entre muchos otros, Don Miguel León Portilla quien propuso la idea de celebrar el “encuentro de dos mundos” y Don Edmundo O’Gorman que lo rebatió con argumentos sólidos como, que no se puede descubrir lo que ya existe, o que el encuentro de dos mundos no fue realmente tan simple.

Lo cierto es que las heridas siguen sin cicatrizar, sobre todo si se le recuerda como el Día de la Raza, aduciendo al mestizaje forzado, que se produjo con posterioridad a la llegada de Colón a la isla de Guanani; y en los años subsecuentes con la permanencia principalmente de los españoles, y posteriormente de portugueses, ingleses y franceses en el continente americano.

En México como muchas otras naciones, somos el resultado de ese mestizaje e integración de culturas, la originaria y la impuesta por la conquista; al día de hoy según cifras del INEGI, nuestra población está conformada por el 6.6 % de población indígena y el resto somos población con cierto grado de mestizaje, 500 años después de la Conquista de nuestro territorio por Hernán Cortés debieran ser suficientes para procesar ese trauma, y asumirnos como lo que somos el resultado de la mezcla de razas que genéticamente ha producido a la rica y variada Nación mexicana pluricultural y pluriétnica .

En lugar de estar exigiendo disculpas por las acciones cometidas hace ya 500 años, deberían de ocuparse por resolver lo presente, tal parece que en el gobierno se les descompuso la brújula, hoy México enfrenta serios y graves problemas. En los últimos días, semanas o meses algunos sucesos, agudizaron la gravedad de varios que desde hace tiempo nos agobian. La pandemia que ha cobrado ya más de 80 mil muertes, la inseguridad, la corrupción y la impunidad son problemas que corroen la vida nacional. Otros graves problemas son los económicos; la pérdida de valor del peso, la caída del precio del petróleo y el consecuente ajuste al gasto público. Estos problemas, los sociales y los económicos representan los modernos caballos del apocalipsis que nos aquejan.

En lo social, la corrupción, ese mal endémico que nos atosiga desde hace siglos, requiere de acción conjunta de sociedad y gobierno. La plena vigencia del Estado de Derecho y la edificación de un Estado Democrático de Derecho, es tarea inacabada que requiere del concurso de toda la colectividad y nada se remedia con lamentos y menos con regodearse con que las cosas marchen mal.