La libertad que hay que darle a un pueblo es la cultura

Miguel de Unamuno

 

A mediados del 2012 un grupo de jóvenes vecinos de la colonia Tlaxpana alzó la voz de alerta: el Cine Cosmos había sido adquirido y el inmueble sería demolido para dar paso a una “moderna agencia funeraria”.

Bajo el lema “Sobre Mi Cadáver”, ese grupo de promotores culturales del barrio se lanzó a cerrar la calzada México-Tacuba e inició una campaña de salvamento a la que varios nos unimos a fin de impedir que ese emblemático espacio, pionero de las matinées de 3 películas por $1 peso, cayera víctima de la picota.

La defensa arquitectónica del inmueble provocó el interés de los defensores y de los descubridores del Art Decó, quienes pronto destacaron la línea y funcionalidad del edificio concebido en 1948 por el arquitecto Carlos Crombé y ejecutado por el arquitecto Vergara para sustituir el primer inmueble siniestrado el día de su inauguración.

Varios de los cronistas urbanos rememoraron la importancia social de dicho cine como espacio de entretenimiento infantil de las colonias aledañas y, por supuesto, el movimiento estudiantil reivindicó su calidad de escenario icónico de la cruel represión del “Jueves de Corpus”, perpetrada el 10 de junio de 1971, -este año se cumplirán cinco décadas- con aquel acto repulsivo, en contra de un grupo de estudiantes, ordenado por el presidente Luis Echeverría Álvarez.

El cúmulo de memorias en torno al inmueble animó, desde el primer momento, al diputado Víctor Hugo Romo a solicitar recursos al gobierno de la Ciudad para adquirirlo y rescatar su función social y memorística, acción que desencadenó un largo proceso jurídico-administrativo cuyas complicaciones no fueron óbice para disminuir el compromiso de rescate, a pesar de los recursos que ello requirió.

La propuesta de integrarlo a la Red de Fábricas de Artes y Oficios de la Ciudad de México es el resultado de un acuerdo entre el gobierno de la otrora delegación Miguel Hidalgo y el entonces Secretario de Cultura, Eduardo Vázquez Martín, para quien fortalecer al conjunto de las FARO, concebida por su mentor, el poeta Alejandro Aura, al inicio del siglo XXI, le permitió continuar con las obras de rescate e invitar al prestigioso arquitecto Enrique Norten a replantear la intervención del espacio.

Enriqueciendo el proyecto de artes escénicas, el gobierno que encabeza la Dra. Claudia Sheinbaum concluye este 13 de marzo de 2021 las obras básicas de la FARO Cosmos, mismas que albergarán la sede de la Orquesta Típica de la Ciudad de México, al tiempo de contemplar un museo temático sobre “El Halconazo” de 1971 y una serie de espacios culturales que permitirán cumplir a cabalidad la aspiración libertaria de Unamuno: dando Cultura, la mayor forma de libertad, al pueblo.