Hace unos cuantos días se realizó la reunión anual sobre cambio climático, una de las grandes preocupaciones mundiales, en esta ocasión organizado por los Estados Unidos y México fue uno de los países invitados y sin duda, llamó la atención la propuesta presentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador… “nuestra propuesta supondría la ampliación de un programa de siembra de árboles con fines agroforestales el cual podría llevar eventualmente a que los beneficiados obtengan visas temporales de trabajo en Estados Unidos y, posteriormente obtener la ciudadanía en ese país, con ello podríamos hacer un acuerdo; te apoyamos para que siembres tu parcela. Si vas a sembrar café, si vas a sembrar cacao, pues son tres años, te apoyamos tres años y más, pero a los tres años ya que tengas tu cultivo tienes derecho en automático a una visa de trabajo por seis meses para Estados Unidos. Vas seis meses y regresas a tu pueblo”.
Horas antes del arranque de este encuentro, el anfitrión Joe Biden le dijo… No, a esta idea mexicana, que el tema central era cambio climático.
Más allá de simpatías políticas cabe destacar la congruencia mostrada por Joe Biden en torno al tema, basta recordar que entre sus primeras ordenes ejecutivas después de haber protestado como presidente fue el regreso de los Estados Unidos al Acuerdo de Paris, donde se realiza la discusión climática de avanzada; 40 dirigentes internacionales entre los que figuran los jefes: por el Estado Ruso, Vladímir Putin, y por el Estado Chino, chino Xi Jinping, el Estado Canadiense, Justin Trudeau y, como mencioné, por el Estado Mexicano, Andrés Manuel López Obrador. Para liderar hacen falta grandes propuestas y con la mira puesta en ello, Joe Biden se comprometerá a recortar las emisiones con efecto invernadero estadounidense al menos a la mitad para 2030, casi el doble del objetivo inicial.
Este importante compromiso asumido por el Zar climático, John Kerry, cercano colaborador del inquilino de la Casa Blanca está por debajo del asumido por la Unión Europea (UE), que en víspera de esa cumbre alcanzó un acuerdo para reducir sus emisiones netas de bióxido de carbono al menos un 55 por ciento en 2030, frente al objetivo del 40 por ciento actual.
Sin embargo, es de destacar que Joe Biden, se apuntó un gran triunfo desde el momento mismo que anunció que entre los participantes en esta cumbre estarían los representantes de 2 de las grandes potencias emisoras de contaminantes del mundo, Rusia y China.
Y bueno, esta cumbre climática representó el regreso de los Estados Unidos al escenario internacional, una promesa de campaña del hoy inquilino de la casa presidencial que sin duda fue muy bien recibida.
Esta reunión organizada por los Estados Unidos alcanzó su objetivo primario; contribuir a diseñar, acelerar y profundizar las acciones globales tendientes a reducir la contaminación que provocan los combustibles fósiles alterando el clima según afirmaron funcionarios a medios. El mandatario estadounidense siguió la ruta de sus antecesores Gerorge W. Bush y Barack Obama, más no así Donald Trump.
Sin duda que una de las ideas que prevaleció en este foro climático fue lo dicho por John Kerry… “He oído a mucha gente firmando cero emisiones para 2050 y les doy la bienvenida y es fundamental, pero faltan todavía 30 años” pero siempre hay un, pero, advirtió… “sí los países no se comprometen a reducir sus emisiones de aquí a nueve años y no se mantiene la temperatura media de la Tierra por debajo de los 1.5 grados centígrados va a ser complicado llegar a cero emisiones contaminantes en 2050”.
Aparte de Putin y Xi, otros jefes de Estado y de Gobiernos que participaron el jueves fueron: el Presidente Francés, Emmanuel Macron; los primeros Ministros Británicos, Boris Johnson, el de Italia, Mario Draghi, y la Canciller Alemana, Angela Merkel. También estuvieron los mandatarios de; Colombia, Iván Duque; de Argentina, Alberto Fernández; de Brasil, Jair Bolsonaro; de Chile, Sebastián Piñera, y de México, Andrés Manuel López Obrador. Destacaron la presencia del Mandatario de Turquia, Recep Tayyip Erdogan; el de Sudafrica, Cyril Ramaphosa; el de India, Narendra Modi, y por Surcorea, Moon Jae-in; así como las de los jefes de Gobierno Japonés, Yoshihide Suga, por Canadá, Justin Trudeau.
El cambio climático se ha convertido en uno de los temas prioritarios tanto en la opinión pública como en la agenda científica y política a nivel mundial. La lucha contra el cambio climático según ha reportado el gobierno mexicano se ha convertido en una tarea fundamental ya que según han dicho autoridades encargadas del área significa la oportunidad para cambiar las políticas de producción y consumo a través del desarrollo sostenible. Las condiciones socioeconómicas como; la pobreza, la desigualdad, la fragilidad de los ecosistemas naturales y las características geográficas y climáticas hacen que México sea sumamente vulnerable al cambio climático.
Y ante la realidad climática, la óptica mexicana demanda una atención multidisciplinaria, holística y transversal que considere todos los sectores de la población y órdenes de gobierno. El gobierno mexicano ha explicado el carácter transversal que requiere el cambio climático que, en voces de sus responsables, esto implica un desarrollo económico bajo en carbono, la inclusión social y equitativa además de un manejo racional, conservación y restauración de los recursos naturales, es decir, un desarrollo sustentable, sin embargo, este gobierno le ha apostado a la generación de energías sucias, como la construcción de refinerías y uso de carbón.
México, llegó debilitado a este encuentro internacional ya que por un lado impulsa la utilización de las energías fósiles y por el otro lado acude y participa en reuniones donde se impulsan las energías limpias, qué tal.
¡Y así México participó en una reunión climática con una propuesta migratoria…!
@lalocampos03