HUNTSVILLE, ALABAMA.- Si cada día hay más jóvenes México-Americanos y latinos laborando en NASA, hay una respetada dama que ha sabido hacer su trabajo, dando todo el reconocimiento a sus jefes; se maquilla poco; y siempre enfocada en ayudar a todos, hizo a sus tres hijos ingenieros, como ella misma lo dice: “puedo hacerlos a todos, tienen la misma oportunidad, el espacio no tiene fronteras ni razas, ni estatus social; mientras tengan buenas calificaciones; ganas de salir adelante, yo los ayudo, no me importa que vengan del campo, que no sepan conducir un carro, yo los ayudo”, su nombre: Elia Ordóñez, una México-Americana de quien se habla poco, pero que ha hecho mucho por nuestros jóvenes.

Ha habido gente que no ayuda y se involucra en las organizaciones sin afán de lucro para aparecer en las glamurosas historias de la televisión en español, donde no han tenido cuidado de indagar su pasado, Siempre USA se ha dado a la tarea de investigar la gente verdaderamente valiosa con un pasado de servicio y trabajo.

Elia, como prefiere que le llamen, hace a un lado hablar de su importante carrera en NASA, para ayudar a jóvenes latinos y mexicanos a terminar su universidad, sin importarle status económico, ni raza, ni religión, ella les abre la oportunidad a todos y por generaciones ha ayudado a hijos de trabajadores agrícolas.

En una ocasión se le trató de hacer un reconocimiento pero prefirió ayudar a una familia de trabajadores agrícolas accidentados.

Como lo dice su perfil de Damas en NASA, para Elia Ordóñez devolver a su comunidad hispana nativa es primordial en su vida. La señora Ordóñez nació en Moctezuma, Chihuahua, México, e emigró a los Estados Unidos en 1974. (For Elia Ordóñez, giving back to her native Hispanic community is paramount in her life. Ms. Ordóñez was born in Moctezuma, Chihuahua, Mexico, and immigrated to the United States in 1974).

Como es difícil estar casada con un piloto, porque difícilmente estaba en casa, Elia que no es partidaria de hablar de su vida personal, explica que crió a sus hijos y luego se unió a Gil, un gran mexicano de Oaxaca, y gran amigo quien le permite combinar sus actividades y le apoya en todo momento.

Hablar de Elia Ordóñez, quizás solo el nombre les sea familiar a sus parientes en El Paso, Texas, pero jamás pasará desapercibida para casi 30 ingenieros que trabajan en NASA de los mas de 200 que ella impulsó con las becas de la agencia espacial.

Casada con un piloto de pruebas de los Estados Unidos, —cuyo nombre es clasificado por seguridad nacional—, luego se separaron por común acuerdo, y Elia Ordóñez,  por su profesión y cualidades es contratada para encargarse de impulsar a los jóvenes de los sectores minoritarios, —afroamericanos, asiáticos-americanos y mexicanos-americanos entre otras minorías que aspiraran ser parte del programa espacial—, cargo que exitosamente desarrolla hasta hace unos años y, por cuestiones de presupuesto de la agencia espacial corta hasta nuevo aviso.

Durante la administración Trump, Elia Ordoñez y varios empleados son llamados para el programa, “Space Force”, (Fuerza Espacial),  y fueron re contratados por su probada experiencia. La señora Ordóñez , es de las pocas mexicanas-americanas empoderadas, con gran experiencia y muy respetada en la agencia aeroespacial.

Actualmente, Elia Ordóñez, maneja una área administrativa, pero siempre se ha preocupado de orientar a jóvenes con la experiencia y buenas calificaciones, que se interesen en una área de la inmensa cobertura de lo que significa la navegación del espacio, desde todas las dimensiones, advirtiendo que lo más importante son los conocimientos en matemáticas, y áreas muy relacionadas al espacio y las mismas universidades, avalan tales conocimientos y los refieren a NASA, de lo contrario ellos pueden buscar orientación y ayuda en el sitio de NASA en el internet.

Algunas preguntas se omiten de la entrevista, debido a que por el alto cargo que Elia Ordóñez representa, se la hizo un “background check” investigación realizada por todas las agencias del gobierno federal, en el cual verifican si sus antecedentes y su integridad de buena conducta le permiten desarrollar un empleo como tal en la agencia aeroespacial.

Durante la entrevista fue difícil hacer preguntas obligadas sobre la experiencia de haber estado casada por décadas con un piloto de pruebas de NASA, pero no pudieron ser respondidas debido a la documentación que ella firma (liability disclousure) y que muy amablemente, nos dice, permíteme y te hablo de lo que puedo hablar: Estados Unidos es un gran país, y NASA es una de las agencias que lo puso en tal nivel de potencia.

“Por cada dólar que se invierte en el programa espacial, NASA recupera 7, y la arteria principal de los proyectos son la educación y el desarrollo de nuevas ideas, y los jóvenes latinos y de todos los países tienen muchísimas, pero en ocasiones por la barrera del idioma o la falta de recursos económicos no los escuchamos, y el gobierno norteamericano está interesado a través de NASA, de escuchar sus ideas, estar con ellos, porque el espacio es de todos”, asegura Elvia, motivada por ver a sus hijos realizados y que ella se frustra al ver truncados los deseos de nuestros jóvenes por falta de un documento o el idioma inglés.

Elia Ordóñez, dice que el idioma ingles se ha popularizado gracias al internet y que cualquier joven lo puede aprender por este medio y así involucrarse en NASA con sus ideas y proyectos.

Asegura que los proyectos de NASA son tan grandes como la dimensión galáctica que vemos en las fotos, así que no esta de más, ninguna idea o propuesta que se reciba de los jóvenes, que la carrera espacial sigue, nunca terminara, y que mientras ella labore en NASA, está segura que sus jefes verán con buenos ojos las ideas, y objetivos de quienes desean colaborar para el proyecto espacial.

 

Fernando “Frank” Caldeiro

Nacido el 12 de junio de 1958 en Buenos Aires, Argentina, pero considera Nueva York y Merritt Island, FL, para ser su ciudades natales. Nasa seleccionada Caldeiro como astronauta en 1996. En 2006, se unió al WB-57 de la Agencia Programa de Investigación a Gran Altitud en Ellington Campo, y llevó a cabo investigaciones atmosféricas experimentos llevados a bordo del avión WB-57.

En 2002, fue nombrado para servir en la Comisión Asesora sobre Excelencia Educativa para hispanoamericanos. Su afición estaba construyendo, volando, y corriendo su propio avión experimental, en que ha registrado más de 500 horas de vuelo Hora.

Entrevistado durante una conferencia, poco antes de sufrir cáncer, Caldeiro dijo que se hizo astronauta, porque su papá, era contador de profesión, y, le dijo: yo no voy a sostener vagos en mi casa, así que terminas una carrera que te de un futuro o te vas de la casa”.

Frank Caldeiro dice que no tuvo más alternativa que estudiar, graduarse e inscribirse en los programas de NASA, hasta que le aceptaron, pudiendo así integrarse a muchos proyectos, pero nunca dejó de lado las propuestas de Elia Ordóñez de ayudarla en la motivación de jóvenes para que no abandonaran la Universidad y de integrarlos a los programas de NASA.

A Caldeiro, le fascinaba ser el orador oficial en los eventos con jóvenes, que Elia Ordóñez organizaba, ayudo muchísimo y al ser bilingüe se tomaba el tiempo para traducirles lo que no entendían.

Gozaba de bucear con el snorkel, aficionado radio (KE4RFI), y metalmecánica. Recibió un título asociado en ciencias aplicadas en tecnología de la Universidad Estatal de Nueva York en Farmingdale en 1978, una licenciatura en ingeniería mecánica de la Universidad de Arizona en 1984, y una maestría en gestión de ingeniería de la Universidad de Florida Central en 1995. Caldeiro fallece el 3 de octubre de 2009, después de una batalla de dos años de sufrir cáncer  en el cerebro

 

Objetivo de tener latinos en la NASA

En una investigación hecha cuando la agencia fue creada, se tomó en cuenta los dibujos que nos nativos americanos, Aztecas, Mayas, e Incas, daban a la formación del espacio sideral y su influencia con la creación de calendarios, estaciones del año.

En la agencia espacial se han encontrado jóvenes que preservan los conocimientos heredados de los ancianos de las tribus, que sabían llegar a un lugar guiados por la ubicación de las estrellas, y todos esos conocimientos,  aún no recuperados en su totalidad, la agencia espacial dice que solo hablando con algunos de las nuevas generaciones, que conocen la información, pudieran aprender más información.

Los equinoccios que se ven en las esquinas de las pirámides, no son obra de la casualidad, significan miles de anos de estudio y observaciones, que la agencia espacial asegura están enterrados bajo algunas ruinas o fueron dados de generación en generación a los miembros de sus tribus.

(Nota del autor: con todo respeto a las televisoras, entiendo que tienen que llenar mucho espacio de tiempo, y desesperados por hacerlo, ponen a cualquier atorrante con buena presencia y eso es lo que ha venido a afectar a las nuevas generaciones de latinos que se impresionan con cualquier colorido video en el internet, o en los canales de TV, y la consistencia de la importancia del contenido lo ignoran por ello en este espacio les trataremos de llevar información interesante, que realmente ayude a nuestra comunidad.)

El autor es corresponsal de Siempre en Estados Unidos.