Conferencia Magistral “Opiniones sobre el PRI”, impartida por el Lic. José Antonio González Fernández, Presidente de la Comisión Nacional Preparatoria de la 23 Asamblea del PRI, el pasado 23 de octubre.

Muchas Gracias José Murat, mi querido amigo Presidente del partido, Alejandro Moreno, Pablo Angulo, Augusto Gómez Villanueva y demás compañeros, miembros del Comité  Ejecutivo Nacional.

Amigos y amigas todos Priistas, un agradecimiento por su presencia y por su tiempo para iniciar juntos estos trabajos de nuestra XXIII Asamblea del Partido, las palabras que acaba de pronunciar el señor presidente del partido son muy alentadoras, y coinciden plenamente con lo que precisamente hoy escribió con otras palabras en su columna semanal en el Diario, El Universal.

El Partido al que le gusta reflexionar y pensar, es al que pertenecemos, encontramos en el diálogo y el debate una fuente de aprendizaje y una zona franca para tomar las mejores decisiones, que además de garantizar nuestra unidad, nos permiten mostrarnos ante los demás actores políticos y la ciudadanía como un ente que marca sus propios tiempos y espacios, que no sigue decisiones cupulares o personales, como hoy en día es tan visto. Eso me enorgullece y me alienta a seguir trabajando en este Comité Ejecutivo Nacional.

Pertenecemos a un partido caracterizado por la institucionalidad, no solo hacia dentro, sino que llevando su ideología al terreno de la gobernanza, ha sido el gran constructor de instituciones, ha sido el PRI el arquitecto del andamiaje nacional, ese que hoy en día está amenazado por el partido en el Poder, por cuestiones ideológicas y caprichos personales que se empeñan en destruir lo andado, sin ninguna propuesta que llene el espacio. Por eso, esto nos debe enorgullecer y nos obliga doblemente a defender a México y sus Instituciones.

 Deseo expresar nuevamente mi agradecimiento al Presidente del partido, quien una vez más me refrenda su confianza y me da cabida en este dialogo y reflexión que se convoca rumbo a nuestra XXIII asamblea. Un diálogo que no inicia hoy, porque en el PRI nos gusta prepararnos y entrarle a fondo, un diálogo que como ustedes deben de recordar, se inició desde febrero del 2020, pero que fue interrumpido por la aparición del COVID, que hoy se reanuda y me brinda el honor de presidir esta Comisión que no es sino un apoyo a todos aquellos que busquen que sus opiniones, propuestas, agendas, sean escuchadas. Una Comisión integrada por priistas, que tienen como denominador común la lealtad y el trabajo comprometido con el Partido. La experiencia a disposición de todos los militantes del país.

A los priistas que me acompañan les reconozco su militancia y capacidad, así como la vocación de servicio que han mostrado a través de múltiples oportunidades que han tenido para servir al  Partido, para dirigirlo y para estar presentes en todo momento en que se les ha requerido.

Celebro la creación de esta Comisión y la celebración de las pláticas magistrales y foros que están por venir, pues mantienen viva nuestra tradición, esa que cada 3 años nos  convoca a un espacio de reflexión entre la militancia.  Una vez más como cada tres años, nos preparamos para este ejercicio democrático que está inserto en nuestra tradición partidista de compromiso, lealtad, libertad y apertura, que ha caracterizado al Partido Revolucionario Institucional a lo largo de su historia.

Esta Asamblea  no lo dudo, marcara el antes y el después, por eso es necesario analizar varios aspectos.

 

  1. EL ESCENARIO.

Previo a reflexionar sobre los ejes que deben encausar nuestra Asamblea, es preciso tener muy claro donde estamos.

Como Partido, es evidente que por tercera ocasión somos un partido de OPOSICIÓN, pero en una de las situaciones más comprometidas, pues las cifras de los últimos procesos electorales no son halagüeñas, basta recordar:

  • 2006 el candidato del PRI quedó en tercer lugar con una votación del 22.03%
  • 2012 ganamos con un 38.20% del electorado.
  • 2018 quedamos en tercer lugar con el 16.40% ante el triunfo avasallador del contrincante, con el 53%.

Afortunadamente estamos remontando y el proceso electoral de junio pasado, nos permitió tomar un nuevo derrotero. Con una estrategia asertiva y una alianza histórica, evitamos la mayoría absoluta para MORENA en la Cámara de Diputados, reconquistamos la Ciudad de México, elevamos nuestra votación como Partido, pero no es suficiente, tenemos por delante tres años complejos y tenemos que asegurarnos de ganar en el próximo proceso electoral, porque hoy México va a la deriva.

Lo que el 1 de julio de 2018, era incertidumbre y duda, hoy son certezas medibles y acreditables: 

  • Tenemos la certeza de que no se han cumplido las expectativas, al menos en las áreas más críticas, no ha logrado contener la inseguridad, ni acabar con la impunidad, no ha reactivado la economía y por lo tanto no hay herramientas para palear la pobreza y desigualdad social.
  • Tenemos la certeza de haber transitado a un régimen centralista, en el que los poderes locales se desdibujan y los contrapesos se diluyen. 
  • Tenemos certeza del voluntarismo extremo, que  lo lleva actuar bajo el lema “el que quiere puede”, desafortunadamente esa tenacidad no se acompaña de capacidades y desdeña la experiencia y el conocimiento, que lo ha llevado a anunciar un sin número de proyectos inviables
  • Tenemos certeza de que su proyecto de control (aquí yo mando) tiene dos componentes básicos: i) neutralizar cualquier contrapeso, ii) acrecentar y nutrir el apoyo popular con medidas cargadas de símbolos reivindicatorios para las clases populares.
  • Tenemos certeza de que las nuevas políticas públicas y programas de gobierno, carecen de sustento técnico en su diseño, ejecución y evaluación; los equipos responsables de implementarlas, se integran atendiendo a lazos de amistad, afinidades ideológicas y exámenes morales.
  • Tenemos la certeza de que el discurso polarizante y de denigración al pasado ha sido eficaz, pues ha logrado sacar al Presidente de las más de 30 crisis que ya se suman en su gobierno.
  • El Estado de Derecho y el principio de legalidad han sido relegados a un segundo término.
  • Estamos siendo testigos de una nueva forma de procurar y administrar  la justicia: la nueva justicia del enemigo, en la que se construyen nuevos tipos penales para criminalizar la actividad económica, herramientas y organismos de fiscalización prestos a perseguir al adversario al margen del estado de derecho, bajo un criterio de oportunidad y rentabilidad política, en el que a los amigos se les dará justicia y gracia, y a los enemigos, en el mejor de los casos, justicia a secas.
  • Tenemos la certeza de un estancamiento económico.

Estamos en un campo minado, en el que la destrucción marca el aquí y el ahora, basta enumerar lo que ha pasado.

EN MATERIA ECONÓMICA.

  • Se destruyó el 2.5 de crecimiento anual.
  • Se destruyó la confianza y por tanto la inversión.
  • Se redujo drásticamente el fondo de estabilización de los ingresos presupuestarios, pues el gasto público se ha venido financiando con ingresos no recurrentes, hemos estado viviendo de “El guardadito” y está por terminarse. Al primer trimestre de 2021 el fondo de estabilización estuvo en su nivel más bajo desde 2013.
  • Se extinguieron 109 de fideicomisos y el dinero que se destinaba a proyectos culturales, salud, tecnología, ciencia… Así, se dilapidaron 68,000 MDP  y más y hoy no hay no fideicomisos, y no hay dinero.

 

EN MATERIA ENERGÉTICA.

  • Se cancelaron las rondas petroleros, que resultan el único mecanismo para obtener inversión necesarias para exploración y extracción, 
  • Se cancelaron las subastas de energía eléctrica organizadas por el CENACE y se suspendió el otorgamiento de nuevos permisos de generación, con lo cual se cerró la puerta a la inversión privada y al plan de transición a energías limpias.

 

EN MATERIA DE SALUD 

  • Se destruyó el Seguro Popular, que era un mecanismo para ampliar el gasto público en salud y dar protección a la población no asalariada, el primer paso para transitar a un sistema UNIVERSAL de salud.
  • Se destruyó el fondo de gastos catastróficos. 
  • El Sistema de compras consolidadas de medicamentos que teníamos y año con año aseguraban un abasto de más del 95% y generaban ahorros visibles.

 

EN TEMAS DE PROGRAMAS SOCIALES, EDUCACIÓN Y CULTURA.

  • Se cerraron estancias infantiles,  9566 estancias infantiles fueron sustituidas por la entrega de dinero.
  • Desaparición de cientos de fideicomisos necesarios para incentivar proyectos de investigación, cultura, tecnología etc.
  • Desaparición del Fondo Nacional para la Cultura y las Artes (FONCA)
  • Cambio de reglas, al punto de desparecer del sistema SIN (Sistema Nacional de Investigadores).

 

EN MATERIA DE SEGURIDAD Y JUSTICIA.

  • Fondo de ayuda, asistencia y reparación integral a las víctimas del delito, desapareció.
  • Subsidio de seguridad municipal con lo cual se deja de capacitar, evaluar y atender a los cuerpos policiacos municipales, desapareció.
  • El Sistema penal acusatorio que se basaba en una fiscalía general autónoma (que se diluye con la Ley de la Fiscalía aprobada en 2021) y un sistema que privilegie el principio de presunción de inocencia (en este sexenio se ha creado una larga lista de delitos de prisión preventiva oficiosa)
  • Está en proceso la desaparición de la Policía Federal.

 

SÍ, HAY MUCHAS INSTITUCIONES QUE  YA NO EXISTEN:

  • Los Fondos y fideicomisos.
  • Seguro de separación u seguros médicos de funcionarios
  • 10 Subsecretarías,
  • El Instituto Nacional del Emprendedor (INADEM), Instituto para apoyar la creación de PYMES a través de distintos programas, como, acceso al crédito, incubación de nuevos negocios, acceso a mercados internacionales. LA SEMANA NACIONAL DEL EMPRENDEDOR, se había convertido en una poderosa herramienta para impulsar el emprendimiento y crear nuevas PYMES.
  • PROMEXICO, una de las agencias de promoción más eficientes del mundo, que traía a México el 9% de la inversión extranjera directa, de las agencias mejor posicionadas a nivel mundial, desapareció.

En suma se ha caracterizado este régimen, por destruir y vale la pena recordar otra vez las palabras iniciales del presidente del partido cuando lo caracterizo, que nuestro partido siempre fue la construcción, la construcción de Instituciones.

Por todo lo anterior los trabajos preparatorios rumbo a la XXIII Asamblea, se vuelven especialmente complejos, al tiempo que resultarán estratégicos para definir el futuro  de nuestro Partido. En la  Asamblea podemos debatir sobre la temáticas, los modelos, las mecánicas de trabajo, pero lo único que desde ahora tenemos claro es que debe ser un ejercicio en que se escuchen todas las ideas, todas las voces y todos los criterios, que se asegure un ambiente en el que se garantice la libertad de expresión, de respeto, cordialidad y solidaridad partidista entre militantes, pues son precisamente las diferencias de criterios y  las visiones distintas, incluyendo las encontradas o contradictorias, en las que encontraremos la riqueza y las nuevas ideas.

 

  1. LA REFLEXION DE FONDO.

Una vez precisado el escenario, habrá que empezar a pensar sobre la reflexión de fondo, ¿Qué es la Asamblea?, ¿Cuáles son sus objetivos? ¿Qué función debe tener en este momento histórico?

Siendo la Asamblea Nacional la autoridad máxima que en términos ordinarios se convoca cada tres años y tiene por encargo, entre otros:

  • Reformar los documentos básicos y el Código de Ética partidaria.
  • Definir las políticas nacionales y evaluar el desempeño de los militantes que integran los poderes públicos y también las líneas de acción conforme a la situación política vigente.

 

1.- Una primera reflexión de fondo: una realidad nunca antes vivida.

La simple lectura del artículo 70 de nuestros Estatutos, hace pensar que los objetivos de la misma, están pensados y planteados para una Asamblea que celebra un partido en el poder, pero como lo hemos apuntado, esta XXIII será distinta, será celebrada siendo partido en la oposición, en circunstancias que no se tienen precedente en la historia. 

Diferente, por el sistema de Gobierno de corte autocrático que se ha instalado en México con mayorías legislativas irreflexivas, que no cambian ni una coma y que demuelen órganos autónomos y eliminan cualquier contrapeso.

Diferente porque nuestra gobernanza en los distintos ámbitos se ha ido menguando. Hoy tenemos muy destacados priistas en el Congreso federal y en los estatales y en las gubernaturas y  en cargos municipales, pero suman pocos, frente a un avasallador partido en el poder, avasallador no por sus ideas que son escasas, pero si por su número.

 

2.- Segunda reflexión: hoy el reto de nuestra Asamblea es mayor.

El tamaño del reto, ante todo exige una UNIDAD FERREA, que responda a las convicciones de todos con debates incluyentes, con ideas disruptivas e innovadoras.

Para esto habremos de revisar con cuidado los resultados de la 21 y 22 Asamblea, porque lo que ha pasado en estos últimos 7 años ha sido un cambio diametral, eso nos permitirá saber en dónde estamos y dar brújula a donde debemos ir.

Hoy ante la opinión pública somos un partido que no es aceptado, un partido que fue derrotado en la pasada elección, pero un partido con ganas de volver a ganar.

En la última Asamblea, valientemente planteamos modificaciones profundas a nuestros documentos básicos, por primera vez validamos la participación de  un candidato simpatizante, e hicimos reformas que pensamos eran la idóneas, pero la fórmula no funcionó. El voto de castigo por parte de la ciudadanía fue mayúsculo, con razón o no,  fuimos fustigados por haber permitido crecer la brecha de desigualdad social a niveles inhumanos y fuimos estigmatizados con el sello de la corrupción.

Incorporamos el Código de Ética a nuestros documentos base y recordamos a nuestra militancia y candidatos los principios que deben regir la política: legalidad, lealtad, honestidad, imparcialidad, transparencia, congruencia y responsabilidad, pero no fue suficiente y no fue suficiente porque la gente se cansó.

En función de lo anterior tenemos que revisar si estamos actuando como una verdadera oposición, una posición presente, constante, sólida, inteligente, y articulada.

Hoy tenemos que pensar si estamos siendo una oferta real para millones de mexicanos  que se ven desamparados ante el poder omnipresente de uno solo, que está tomando para si las instituciones que pertenecen al Estado.

Hoy tenemos que pensar, si en realidad hemos asumido nuestro rol de defensores de la vida democrática, las instituciones y el estado de derecho.

Y ante este cúmulo de trabajo que tenemos por delante…otra reflexión:

 

3.- Tercera reflexión: en que debemos ocupar nuestro tiempo?

La gran ola destructora que a diario nos amenaza, hace difícil dar mucho espacio a la reflexión, ésta se debiera dar en tiempos de paz, de calma, hoy son tiempos de lucha que nos obliga a actuar y hacerlo rápido.

Ante este panorama ¿Es válido u oportuno ocuparnos ahora en reformar los documentos básicos? ¿Los textos actuales siguen reflejando nuestro pensamiento, nuestra ideología, nuestros principios básicos? ¿No será que en lugar de reformar tendríamos que ocuparnos en generar mecanismos para que estos documentos se vuelvan de nuevo letra vigente?

El objeto de la Asamblea, creo, no debe y no puede reducirse a la reforma de documentos básicos, leamos detenidamente el artículo 70 de los Estatutos y demos espacio a las otras atribuciones que tiene la Asamblea, como aquel que nos mandata reflexionar sobre la situación política y electoral que observe el partido y definir las políticas y líneas de acción a seguir.

A partir de esta atribución, ocupemos en construir propuestas para ser una oposición sólida y recuperar el poder fáctico

No nos quedemos en una actitud reformista, cuando tenemos enfrente el gran reto histórico de nuestro Partido y la oportunidad de reconciliarnos con la ciudadanía, que solamente nos perdonará si logramos se una oposición seria que brinde alternativas reales.

Por eso debemos estar muy conscientes que hoy tenemos unas mesas temáticas muy claras; 

  • La mesa Nacional de Proyecto de País 
  • La mesa Nacional de Estrategia Política
  • La mesa Nacional de vida interna del partido y la de vida nacional
  • La mesa Nacional de prospectiva del partido;

Todas ellas presididas por muy distinguidos priistas que con su experiencia haban de conducir las mejores reflexiones, entonces, otra reflexión ¿qué debemos y que estamos dispuestos a hacer?

Si sabemos que el reto es mayor, estamos obligados a actuar en función del mismo y no como siempre lo hemos hechos. Si queremos resultados distintos empecemos a actuar en forma distinta.

Aprovechemos el espacio de la Asamblea para definir qué vamos a ofrecer, cual será  nuestra oferta política

Empecemos desde ya a pensar como abordaremos los grandes temas a debate que se presentarán en el Congreso, al menos tres de los anunciados: reforma eléctrica, guardia nacional, y reforma política electoral. Y como estructuraremos una agenda legislativa que sea del interés de la ciudadanía, sobretodo que dé respuesta a sus problemas cotidianos. 

Sigamos pensando en el futuro de la alianza, como podemos mantenerla y fortalecerla rumbo al 2024. Como impulsaremos un candidato de unidad.

Que implicaría pensar en figuras como gobiernos de coalición

Qué aconsejaremos a nuestros militantes y a la ciudadanía rumbo al proceso de revocación de mandato. 

Como vamos a defender nuestras instituciones electorales ante la embestida de la que están siendo objeto.

Como vamos a reconstruir nuestros lazos con la ciudadanía, como reconciliarnos y sumarnos a esa porción de la sociedad que está generando una crítica activa y propositiva. Como seremos parte activa de redes organizadas y movilizaciones sociales.

Tendremos que pensar en una estrategia para tener más presencia en foros multilaterales y alertar desde ahora a los actores internacionales de los atropellos diarios que se cometen en México.

Tendremos que aliarnos y generar un canal permanente con las organizaciones de la sociedad civil que son voz para los reclamos más sentidos y que hoy son atacadas desde la reconfiguración del presupuesto

Tenemos que generar mesas de trabajo con los empresarios, para conocer de viva voz sus necesidades y escuchar propuestas para generar crecimiento económico.

Tenemos que buscar mecanismos de diálogo permanente con intelectuales y expertos para contar con elementos técnicos en todo debate. Tendremos que dar insumos a nuestros legisladores para que sean los mejores en el debate parlamentario.

Como hacer que nuestros legisladores en cada una de las Comisiones conozcan a fondo los temas que van a debatir y sean expertos en el manejo de las materias propias de la Comisión. 

Tendremos que conformar un órgano de expertos, atento a denunciar por los medios correspondientes cualquier acción de este gobierno que atente contra el Estado de Derecho y nuestras Instituciones Democráticas. Un grupo de litigio estratégico que defienda las causas de los ciudadanos. 

 

Finalmente, ¿cómo debemos organizarnos para esta XXIII Asamblea?

Asumamos una actitud pragmática y diseñemos la Asamblea de tal forma que prioricemos los temas prácticos. Privilegiemos la discusión de ideas y no de artículos. Una visión global sobre una vocación reformista. Generemos un debate de fondo sobre las distintas agendas.

Que no se nos olvide que la gente quiere escuchar propuestas, y que la ciudadanía vota primero por la agenda, después por el candidato y por último por el partido, repito, la ciudadanía vota por las ideas, por el candidato y finalmente por el Partido.

Que nos quede claro que si no hay ideas y propuestas sólidas y convincentes, vamos a volver a ser rechazados.

No hay que olvidar que esta votación, la votación del último momento electoral, el año que ésta por concluir, tuvo uno de los procesos más adversos que hayamos presenciado, en el crimen organizado que determinó los resultados en muchos estados del país, y en el que el dinero público corrió como nunca antes para comprar voluntades. 

Hoy el Presidente del PRI Alejandro  Moreno ha mostrado que sabe trabajar en equipo, que sabe dialogar y establecer puentes con la oposición, y eso es precisamente lo que necesitamos en este momento, el dio la palabra por el PRI  y es el quien la debe honrar, respetar, respaldado por el partido.

Al interior del Partido puede haber divergencias, distintas formas de pensar, pero estas necesariamente deben solucionarse en el dialogo y los acuerdos, nunca ser motivo de enemistad o violencia, como las que hace semanas vimos, quien no se es capaz de conducirse, bajo el respeto y la legalidad no puede pretender hacerse con la diligencia del partido y no es que yo convoque, una obediencia ciega, sino que convoco a unirnos y a respaldar a un dirigente, a un Comité Ejecutivo Nacional, que fue electo en un proceso democrático y bajo las normas que marcan nuestros estatutos.

Los resultados del proceso pasado electoral sin duda muestran una oportunidad, está claro que la mayoría de los mexicanos no están de acuerdo con los nuevos estilos de gobernar, el desencantó, entre una gran proporción de la ciudadanía llegó a tal extremo que votaron por la alianza, así muchos mexicanos tacharon emblemas partidarios en contra de su ideología, de sus principios morales, lo que nunca se hubiera alcanzado, pero lo hicimos como última opción para eliminar a un partido, que es un peligro real para México.

Es tiempo de revisar lo que tanto ha molestado, ha desencantado a la ciudadanía, y a través de acciones concretas sumarnos a su causa. Vamos en esta Asamblea a unirnos y a defender a nuestros dirigentes, nuestro país lo necesita.

MUCHAS GRACIAS.