En las noticias de mi celular, y aclaro no como maestra, recibí las carreras que tienen menos demanda en la UNAM. Una de ellas es Filosofía, que, como recordamos, fue objeto de escándalo hace unos años al desaparecer de la enseñanza media superior las materias de Filosofía, Ética y Lógica. El Observatorio Filosófico, capitaneado por Gabriel Vargas Lozano y Guillermo Hurtado, se dio a la tarea de defender su disciplina y la senadora Ana Gabriela Guevara, presentó un texto que logró un punto de acuerdo en el Senado de que la Secretaría de Educación Pública restituyera las materias con el mismo nombre e impartidas por profesores egresados de las Facultades de Filosofía y Letras y no personas que tuvieran “una filosofía de la vida” como pretendía la SEP. (Parte del proceso, incluidos el discurso de la senadora y el punto de acuerdo del Senado, aparecen en el suplemento en línea de la revista Siempre) Sin embargo, no en todas las escuelas se restituyeron las materias y el resultado a la vuelta de los años es que los estudiantes, por desconocimiento, no quieren cursar esta carrera.

En la misma situación están todas las carreras de Lengua y Literaturas Hispánicas, Inglesas. Portuguesas, Francesas, Italianas o Clásicas. A mis alumnos les pregunto qué clase de Literatura han llevado y me contestan Literatura Española de los Siglo de Oro en secundaria, y Taller de Lectura y Redacción en preparatoria. O sea que no saben de Rulfo, García Márquez o Borges. Igual que borraron del mapa Filosofía, lo mismo hicieron con Literatura. También, según esta lista, han caído en desgracia Historia del Arte y Diseño. Y a pesar de que los millenials escuchan música a decibeles prohibidos, ni piano ni demás instrumentos son solicitados. Una de las carreras desdeñadas es Música y Tecnología Artística. ¿Será? Cuando estudié secundaria y preparatoria el gran Mario Kuri fue mi maestro de historia de la música y la abuela de Mario me dio clases particulares de piano. El problema no acaba ahí. Ahora resulta que Historia y Geohistoria, tampoco atraen alumnos.

Lo de Historia está documentado, y muy bien, por Patricia Galeana en entrevistas que están en línea grabadas por el querido Javier Mendoza para la revista Siempre. Ahí Patricia me dice alarmada que a las culturas prehispánicas (así, amontonadas) les dedican 56 minutos para explicarse en las primarias.

¿Esto significa que el arte está descontinuado? ¿que las Facultades de Filosofía y Letras están en vías de extinción? Claro que no. Hay una asociación mundial en defensa de la Filosofía, una Acción Cívica en defensa de las Humanidades en España, unos 500 historiadores de aquí ya se aglutinaron para defender su disciplina.

La beligerancia mundial en contra de las Humanidades proviene de que la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo) sólo quiere que egresen de las escuelas, trabajadores acordes con la etapa actual del capitalismo. Personas que sólo sepan leer, escribir y unas pocas operaciones aritméticas, para emplearse en las maquiladoras y un grupo de élite, egresado de los posgrados, para controlar los procesos de producción.

Las licenciaturas no les interesan, aunque ahí estén comprendidos médicos, abogados, odontólogos, veterinarios, ingenieros, arquitectos, sociólogos, economistas, biólogos, entre otros, indispensables para que el hombre viva. El arte es una necesidad humana para el tiempo libre, o sea las horas en que no estamos insertos en el trabajo, sino que dedicamos a lo que nos gusta, a la diversión, al placer. Por eso la animadversión de la OCDE a las Humanidades.