En la época actual, de pandemia y crisis económicas, el deporte no puede ser una excepción y se debe adaptar a las circunstancias, en especial si consideramos que es un negocio y, como tal, debe buscar la rentabilidad.

Así, sin que muchos lo notaran, varias disciplinas abrieron sus puertas a competidores trans, un sector que había sido marginado, a la vez que la pandemia impuso una serie de medidas a tomar para garantizar la salud de los competidores.

Son dos ejemplos que nos muestran como el deporte se ha tenido que adaptar, aunque sin duda la más llamativa es la que tiene que ver con el Mundial de Qatar de futbol, el cual se llevará a cabo en meses en los que tradicionalmente no se juega este tipo de torneos.

Por ser una zona desértica y con altas temperaturas en el tiempo en que se han jugado Mundiales anteriores, el de este año se tuvo que programas en la parte final del año para que estas condiciones no afecten a los participantes, que realizan un gran esfuerzo físico en cada partido.

Pero como se trata de uno de los países que más dinero puede aportar al negocio, que ya de por sí da ganancias, pues el clima y la fecha de realización pueden cambiar, demostrando que el deporte, sobre todo si es negocio, se puede adaptar a lo que sea.