El entrevistado es Guillermo Valdés, Socio Director de GEA, Grupo de Economistas y Asociados.

El entrevistador, un servidor (1).

El entrevistado entra directamente al tema de su especialidad:

GV: El tema que tú mencionas, Efrén, es muy importante, porque vemos en nuestros estudios entre GEA e ISA, que en efecto, la vinculación entre economía y seguridad, más que nunca es importante. Los niveles de inseguridad en el país son muy elevados, dado que no ha dado resultados la política de seguridad del Presidente López Obrador. La supuesta estrategia de los “Abrazos y no Balazos”, ha hecho que el crimen organizado extienda una de las dos lógicas con las que actúa.

La plática con Guillermo Valdés continúa:

“Los grupos criminales son como empresas muy bien organizadas, pero dedicadas a lo ilegal. Pretenden generar ingresos, rentas, a costa de la sociedad”.

“Entonces para que por ejemplo exista la enorme industria de la extorsión en nuestro país, necesitas una fuerte permisividad del Estado. También necesitas protección policiaca -comprar policías-, para que no los persigan, o para que les pasen información, o para que incluso la policía proteja a los criminales”.

“Así pues, -continúa el interlocutor-, la lógica económica de las actividades criminales, ha impactado de una manera impresionante a las empresas legales en lo que va de este sexenio, gracias a esa política poco eficaz para combatirlos”.

Guillermo Valdés nos ofrece datos duros: La extorsión es uno de los delitos más frecuentes ahora, ha tenido un crecimiento impresionante.

Una encuesta que levanta el INEGI sobre, La Victimización en las Empresas, descubrió que en 2017, 1,150 de cada 10,000 empresas, o sea cerca del 11.5 por ciento de todas las empresas sufrían extorsión.

Ya en el primer año de gobierno del presidente López Obrador, según esta misma encuesta, había 18 por ciento de empresas sometidas a extorsión. O sea, había aumentado a 58 por ciento ese número de empresas en el primer año de la actual administración federal.

Todavía no sale la siguiente encuesta para conocer el crecimiento de la extorsión entre 2019 y 2021.

Pero las Cifras del Sistema Nacional de Seguridad nos hablan de que las denuncias de extorsión puestas ante los ministerios públicos en lo que va de este año, en el primer trimestre de 2022, han crecido casi el 60 por ciento.

La afectación que tiene el crimen organizado sobre las empresas, es altísimo.

El mismo estudio del INEGI identificó el valor que tiene la inseguridad pública sobre las actividades productivas: Para las empresas tiene un costo de 226 mil millones de pesos (mdp), directo, anuales, por robos y extorsiones, más las medidas de seguridad que las empresas tienen que contratar.

Entonces el gasto total o el costo total que tienen las empresas por temas de inseguridad, asciende a 358 mil mdp.

El dato anterior es para las empresas.

Para las familias, los costos de la inseguridad porque los han robado, o porque tienen que atenderse por ejemplo por heridas o gastos funerarios, entre otros, ascienden a 277 mil mdp.

Si sumas las dos, -la inseguridad empresarial y familiar-, te dan cerca de 640 mil mdp al año lo que nos cuesta a los mexicanos la inseguridad.

Ese costo es Una Vez y Media, todo el dinero que el gobierno reparte en sus programas sociales a la población.

Esto es, el dinero que gastó el Presidente López Obrador para la atención de Adultos Mayores el año pasado, fueron 238 mil mdp, la tercera parte del costo de no combatir al crimen organizado.

Es un sinsentido el que no combatir la inseguridad tenga un mayor costo que los programas sociales, y que no haya una política de seguridad eficaz.

Estos costos mayores en empresas y familias, tarde o temprano se reflejan en menor actividad económica.

“También ahora es la principal causa por la que un mayor número de mexicanos ha emigrado a EEUU”, -amplía Guillermo Valdés, nuestro entrevistado-.

Valdés agrega: “Te doy las cifras de cómo han  evolucionado las cifras de emigración a EEUU”:

“En la estadística que publica mes con mes el gobierno de los EEUU sobre cuanta gente deporta, hasta marzo o abril de 2020, -es decir antes de que iniciara la  pandemia-, los estadounidenses detenían y deportaban cada mes a 20 mil Mexicanos; ahora en el mes de marzo de 2022 regresaron 88 mil mexicanos, en abril 82 mil, y en mayo 77 mil. O sea alrededor de los 80 mil mensuales, cuatro veces más que hace 2 años”.

De aquí la charla con Guillermo se extendió a otro tema igualmente grave; cómo el grupo criminal de los Zetas al ver el negocio que significaba la actividad de los polleros, los amenazaron, los convirtieron en Zetas, y este grupo delictivo obtuvo pingües ganancias de la emigración.

“Pero esto también explica la crueldad con la que ahora los polleros tratan a los emigrados. Son zeta-polleros: inhumanos, con trato enfermizo a sus clientes, que en promedio pagan US$5,000.00 por el transporte al otro lado de la frontera. Ya no hay ningún interés por las personas. Dinero y cada quien con su destino”.

Estos polleros ahora pertenecen a una de las más violentas y crueles organizaciones criminales.

Por esto último, resulta nauseabundo pero no de extrañar, el trailer abandonado en un paraje de una carretera cerca de San Antonio, TX, donde la mitad de los cerca de 52 fallecidos (asesinados), son de nacionalidad mexicana.

México casi no invierte en Seguridad.

Nuestro país siempre ha invertido muy poco en seguridad.

Pero dados los pobres resultados, ya es el momento de seguir el ejemplo de otras naciones latinoamericanas que invierten mucho más, y a cambio obtienen buenos resultados en el combate al crimen organizado.

Al respecto nuestro entrevistado, Guillermo Valdés, Socio director de Grupo de Economistas y Asociados, GEA, amplía el particular: “México invierte menos de 1 por ciento del PIB anual en materia de seguridad y justicia. Otros países más o menos parecidos al nuestro, y similares en problemas de seguridad como Colombia, con problemas de violencia, crimen y narcotráfico, gasta 3 veces lo que gasta México.

Es decir que nosotros tendríamos que destinar por lo menos el 3 por ciento del PIB a la seguridad, para tener policías buenas y eficientes, y para tener suficientes ministerios públicos que lleven bien las investigaciones, y hagan que sean sentenciados los culpables; enseguida que los jueces sean suficientes y ganen bien en la federación, pero también en los estados, para que  no se dejen corromper. … “.

“Nada más un dato que me vino a la memoria, -dice Valdés-, cada estado de la República tiene un poder judicial estatal. Si tú sumas el presupuesto de todos los 32 poderes judiciales estatales, resulta ser un presupuesto menor al que tiene el poder judicial de la federación.

Es entonces una miseria el presupuesto de los poderes judiciales estatales, los jueces no ganan bien, hay muy pocos jueces, los juzgados están atascados de trabajo, miles de personas encarceladas sin sentencia, o sea es una tragedia la procuración y la impartición de justicia en México, porque no hay recursos destinados en debidas proporciones ni la gobernanza ni la vigilancia de la rendición de cuentas, pero tampoco la capacitación, el entrenamiento, ni el pago de sueldos adecuados”.

“Si queremos que se reconstruya el Tejido de la Seguridad, necesitamos que se reconstruya lo que yo llamo, -nos dice Guillermo Valdés-, la Cadena de la Seguridad y la Justicia, que tiene Cuatro Componentes:

  • Policías. Policía que prevenga y que persiga a los criminales.
  • Ministerios Públicos. Que sean capaces de investigación, que estén entrenados y pagados para armar correctamente los expedientes que pasarán al juez.
  • Jueces formados, educados, vigilados y pagados, para que no se corrompan, con juzgados suficientes para atender los casos que reciban de los ministerios, y que emitan sentencias expeditas y eficientes, justas y que desahoguen bien los casos.
  • Pero luego necesitas sistemas carcelarios eficientes, para la sociedad, para la comunidad, que conviertan a los encarcelados en ciudadanos responsables, en vez de lo que tenemos ahora, cárceles que se constituyen en auténticas universidades del crimen, que en vez de rehabilitar a las personas, las gradúan en violencia y criminalidad, y salen a cometer delitos al por mayor”.

En Conclusión

Es importante enfatizar lo dicho por Guillermo Valdés: Rehacer esas instituciones nos va a llevar a invertir en ellas mucho dinero, por lo menos triplicar el presupuesto, es decir de más del 1 por ciento en términos PIB, a más del 3 por ciento PIB; no de golpe, pero sí en un proceso de unos 5 a 10 años, para poder hacer nuestra tarea y estar en condiciones de reducir la inseguridad.

Si usted es mexicano, si es aspiracionista, empresario gigante o MiPyME, inversionista, nuevo empresario, nuevo aspiracionista, profesionista, el tono último de Guillermo Valdés es tajante:

Imposible un crecimiento económico elevado y sostenido, sin Estado de Derecho. Es una condición Necesaria para que las empresas puedan generar más riqueza, y crear muchos empleos bien remunerados.

Que el empresario tenga claridad de que las reglas del juego no se van a cambiar al antojo del Presidente, y que las leyes, si alguien las viola, -incluyendo los políticos, los partidos, las oligarquías empresariales e institucionales-, se van a aplicar. Si hay malandrines que quieran extorsionar a la familia, a la persona, comunidad, empresa, se acude al ministerio, se les denuncia, con la seguridad de que la ley les protege.

Todas esas condiciones son las que llamamos Estado de Derecho, con instituciones que sirvan al ciudadano, que apliquen la Ley, y a quien la viola se le castigue, del hombre más fuerte del país, para abajo, al más humilde, a todos.

Entonces si queremos dejar de exportar migrantes, si queremos que las empresas generen riqueza nueva y con ella empleos bien pagados, dignos, que faciliten la Movilidad y la Inclusión sociales, si queremos que a los trabajadores no les roben su quincena a la salida de la empresa, y que no los asalten en el microbús, hay que generar, recuperar y fortalecer El Estado de Derecho.

Solo así podemos tener Visión Futuro 2035 para México y sus 130 millones de habitantes.

Solo así podemos desde hoy preparar las nuevas inversiones hacia el México con Sociedad del Conocimiento.

Todo comienza con Estado de Derecho.

Y el Estado de Derecho tiene que pasar por la Rendición de Cuentas de nuestros gobernantes, y por la Gobernanza de todos los mexicanos. Pero antes y ante todo, el Estado de Derecho comienza por la fórmula que nos ofrece Guillermo Valdés, La Cadena de la Seguridad y la Justicia y sus Cuatro Componentes: Policías, Ministerios, Jueces, Sistema Carcelario.

Viajecitos a Washington, agradecimiento cínico por las remesas, promesas de nuevas inversiones, sean privadas, IED, de gobierno; que si las corcholatas, candidatos, alianzas, todo, todo resulta necio, sin Estado de Derecho y los cuatro pilares arriba mencionados.

1/  Fuente: El Futuro de Todo. Entrevista con Guillermo Valdés https://youtu.be/EU3myfsdW2Y

Efrén Flores es licenciado en Economía. Durante más de 40 años se ha dedicado a la comunicación en medios electrónicos, impresos, digitales, con temas financieros, económicos, empresariales, estratégicos, RSE, PyMEs, y nuevas tecnologías que revolucionan a nuestro mundo. Es conferencista en México y en EEUU. Las opiniones expresadas en este artículo son exclusivas del autor. Efrén Flores nunca ha pertenecido a Partido Político alguno… hasta ahora.