Les platico: el empresario regio Gustavo M. de la Garza Ortega es un coleccionista precoz porque gusta del arte barroco.

Así lo dijo la curadora de su colección personal y presidenta de la Fundación Callia, de España, Carmen Reviriego, durante la bienvenida y bendición por parte del Arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López, del cuadro “Aparición de la Virgen y el Niño Jesús a San Francisco de la Porciúncula”, obra maestra del pintor español del siglo XVII, Juan Carreño de Miranda.

Arzobispo de Monterrey, Rogelio Cabrera López

 

Mensaje del Arzobispo

“Cuando se conectan las imágenes a la devoción y al arte llegamos al momento culminante de la humanidad. Una manera de llegar a Dios es el camino de la belleza, tal como decía el Papa San Juan Pablo II.

Cuando tenemos belleza ante nuestros ojos, esa belleza corre hasta el corazón.

Cuando miramos cosas feas, se daña nuestro interior.

De ahí la importancia de que nuestros ojos puedan disfrutar la belleza artística.

Y qué mejor que en este cuadro –“Aparición de la Virgen y el Niño Jesús a San Francisco de la Porciúncula (1665)- en el que aparece uno de los grandes místicos de nuestra existencia: San Francisco de Asís. Esta es una escena mística, donde San Francisco entra en diálogo con la Virgen María, quien le presenta al Niño.

Es un diálogo que se convierte en amor y en devoción. Me da mucha alegría bendecir esta imagen, porque bendecir es decirle al Señor que todo está bien.

Qué bueno que haya dado ingenio al ser humano, que ha logrado que existan artistas que transmitan aquello que hay en el interior, porque Juan Carreño de Miranda sacó desde adentro lo que plasmó a nuestros ojos.

Por eso es digno de admirarse, pero también lo más importante es que provoca un sentimiento espiritual para que quienes vean esta imagen puedan transportarse al objetivo que tuvo el pintor, que es crear esta gran obra de arte y que hoy aquí se ilumina al oír un pasaje de la Sagrada Escritura, en voz de un franciscano, como el franciscano que aparece en la obra”.

Carmen Reviriego

La curadora de la colección privada de Gustavo y presidenta de la Fundación Callia viajó desde España exclusivamente para este evento. La organización que preside promueve el arte como causa filantrópica.

Al presentar las cuatro obras barrocas que hoy se exhiben en la casa del empresario regio, dijo que el arte es ese pellizquito de ternura que sentimos cuando escuchamos una melodía, cuando leemos una novela y nos encontramos con el escritor.

“Es esa emoción, esa conmoción que experimentamos cuando vemos una pintura o una escultura. No hay nada que iguale más al ser humano que el arte.

Y lo iguala por arriba, en las grandes virtudes del ser humano, como la emoción, la compasión, la empatía y es esto lo que nos diferencia de las fieras”.

 

Gustavo, un colecconista precoz

“Cuando conocí a Gustavo me di cuenta de que es un coleccionista precoz, porque es barroco. Las personas, hasta que descubren sus gustos, pues pasa un tiempo mientras visitan expositores, museos y dicen: ´me gusta esto”.

“Gustavo es barroco. Desde un primer momento lo ha sido, es y ha puesto el ojo, la razón y el corazón en estas cuatro obras.

Juntos hemos puesto esto, hemos adquirido estas cuatro obras maestras, barrocas, que son piezas de una calidad museística”, dijo Carmen al presentar esta colección.

(Las otras tres pinturas que son exhibidas en el antecomedor de la casa de Gustavo son: “San Juan El Evangelista”, del pintor italiano Il Guercino; un bodegón clásico de la época barroca, que escolta a la pintura de Carreño de Miranda y una de las tres versiones que pintó José de Ribera, “El Españoleto”, San Jerónimo, considerado como uno de los cuatro médicos de la Iglesia.

La versión que pintó con una calavera a la derecha forma parte del acervo del Museo Hermitage, en San Petersburgo, Rusia.

El cuadro sin calavera está en el Museo Del Prado, de Madrid y el de la calavera a la izquierda puede verse en la casa de Gustavo.

Del “Españoleto” se decía que empapaba el pincel en la sangre de los santos que pintaba).

 

Obras únicas en Aamérica Latina

Carmen considera que en toda América Latina no hay un acervo tan importante, de esta calidad, como las cuatro piezas que son exhibidas en casa de Gustavo.

“Por eso, lo que hoy estamos presenciando es una alegría, es una celebración”.

Son obras barrocas del siglo XVII, una de las épocas más ricas de la pintura.

Este siglo viene precedido de dos grandes emociones y evoluciones en el arte:

  • El Renacimiento, donde surgen Leonardo, Miguel Angel, Rafael, Tiziano.
  • El Manerismo, donde aparecen artistas que se tienen que reinventar, como el Greco, que tienen que darlo todo para superar a quienes les precedieron”.

Invitados

Entre los invitados al evento en “La Querencia” -casa de Gustavo y su esposa Carmen Bortoni de De la Garza– estuvieron su familia y amigos; Eric Gustafson; el Cónsul General de EEUU en Monterrey, Roger RigaudAlejandro Pérez, presidente de MOS, México Opera Studio; Ernesto Diazmuñoz, director de la Sinfónica de la UANL, y su esposa; Alberto de la Garza Evia y su esposa; los ex gobernadores de NL, Benjamín Clariond Reyes Retana y Fernando Canales Clariond; Jesús Horacio González Delgadillo, quien fuera director general del Parque Fundidora; Alberto “El Shamuko” Villarreal; Leopoldo Espinosa Benavides y su esposa; Andrés Meza, pionero de las encuestas políticas en México, y muchos otros.

El destacado comunicador Gregorio Martínez tuvo a su cargo la conducción del evento, al cual fueron invitados -pero no asistieron- el gobernador de NL, Samuel García, y Luis Donaldo Colosio Riojas, alcalde de Monterrey.

 

CAJÓN DE SASTRE

“Bienvenido el arte y la cultura en estas bárbaras, sedientas y violentas comarcas del norte”, remata la irreverente de mi Gaby.

 

CRÉDITO FOTOS: Plácido Garza.