La carrera por la gobernación de Texas no estará fácil para el republicano Greg Abbott. Dos encuestas muestran una estrecha ventaja frente a su adversario demócrata, Beto O’Rourke. En una de ellas, la del centro no partidista Lyceum, la diferencia entre ambos es de 2 por ciento; en la otra, la del Texas Hispanic Policy Foundation, es de 8 por ciento.

Joshua Blank, director de investigación del sondeo de Texas Lyceum que sigue con detalle las proyecciones electorales del estado; Creo que ésta será la batalla más dura que Abbott haya tenido en su carrera y es que no se ha enfrentado a un candidato con tantos recursos y prácticas políticas como las mostradas por Beto O’Rourke en su carrera. Tiene mucho dinero, tiene un ambiente nacional que le favorece, pero éste es el reto más duro que va a enfrentar”.

O’Rourke no es un candidato nuevo para los texanos, el demócrata ha venido ganando espacios, el de más alto perfil en 2018, cuando intentó desbancar a Ted Cruz de su escaño senatorial en Texas. Luego, generó gran atención y levantó recursos para su aspiración presidencial, que no tuvo éxito.

Los demócratas están trabajando para recuperar el Estado de las estrella solitaria y ven en O’Rourke como una carta fuerte para llegar a la casa de gobierno en Austin y a la elección de noviembre próximo como un referendo sobre el liderazgo de Abbott con énfasis particular en las fallas del sistema eléctrico y en su respuesta al Covid-19, pero también deberán enfocarse en los: errores, equivocaciones y hasta excesos que cometa hasta el día de las votaciones y aprovechar el creciente disgusto que han acumulado los republicanos a lo largo de las 3 décadas en las que han dirigido el destino de este fronterizo Estado.

Y de regreso a las proyecciones en la reciente encuesta de la Universidad de Houston muestra que el gobernador Abbott perdió adhesión entre las latinas por su rechazo al aborto, pero obtuvo una ventaja mayor sobre O’Rourke entre los hombres. Veamos algunas situaciones que sin duda influirán el día de la elección en el ya cercano noviembre. En los últimos seis meses, y contra la mayoría de los pronósticos, el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, ha mantenido una ventaja del 5% sobre su rival demócrata, Beto O’Rourke.

Tras la masacre en Uvalde, Texas y el fallo histórico de la Corte Suprema de Estados Unidos que anuló el aborto a nivel federal, muchos observadores esperaban que Abbott perdiera el apoyo latino, algo que sucedió en parte entre las mujeres latinas. Sin embargo, también obtuvo mayor apoyo durante este mismo período principalmente de hombres latinos que son un componente cada vez más indispensable de su plan de victoria.

Pero…

Lo cierto es vida en estos días en el sur de Texas se ha complicado no sólo para los inmigrantes sino para todo aquel que lo parezca, sobre todo, ahora que el número de elementos policíacos ha aumentado hasta 4 veces. El gobernador Gregg Abbott ordenó el despliegue de una red de policías de caminos que detienen el paso de conductores locales para buscar a contrabandistas y migrantes que acaban de cruzar al país.

El gobernador no se ha cansado de repetir que hará todo lo que le sea posible para evitar “la invasión de inmigrantes en su Estado”.

Una de estas acciones fue la implementación del programa Lone Start, pero nunca esperó que mucho de los texanos lo reprobaran, principalmente los residentes de pequeños pueblos y condados que vieron un aumento de la cantidad de policías del Departamento de Seguridad Pública (DPS) de Texas.

Estos policías tienen que justificar su trabajo y el camino que han encontrado es el de las multas de tránsito.

El condado de Kinney, Tx., es donde más se ha sentido este impacto. Las multas y citas ante el juez simplemente se cuadruplicaron, pasaron de 1,400 en 2019-2020 a más de 6,800 en 2021-2022. Y por si esto fuera poco en este pequeño condado de tan sólo 3 mil 674 personas se triplicó el número de oficiales patrullando sus caminos, pasó de 14 a 41 según ha reportado la cadena televisiva NBC News.

A medida que aumentan las multas, muchos de sus residentes dicen estar perdiendo sus libertades civiles, ya que son detenidos por razones que muchos de los que viven allí y grupos civiles califican de cuestionables, al tiempo que afirman que son interrogados o registrados sin causa probable, simplemente por no ser de “raza blanca”.

A consecuencia de estas acciones, residentes de varios pueblos sureños al verse acosados o perseguidos por los elementos policiacos han intentado darse a la fuga lo que ha impactado en un incremento de accidentes de tránsito, incluso algunos de ellos de consecuencias fatales. Han manifestado, al asistir con los jueces de la región, temer por su seguridad y por su vida misma.

El gobernador Greg Abbott anunció recientemente que el estado gastará $30 millones adicionales en su misión fronteriza dentro del programa Lone Star, para otorgar subvenciones a las ciudades y condados que buscan asistencia financiera para combatir la actividad delictiva relacionada con los cruces fronterizos, en descargo del gobernador Abbott, las manifestaciones públicas en los poblados más conservadores tienen como objetivo manifestarle su preocupación por lo que denominan una “invasión migrante”, con lo que bajo la ley texana el mandatario puede aplicar recursos económicos extraordinarios para combatirla.

Es importante tener presente que Abbott busca su reelección para después buscar la candidatura presidencial en 2024.

@lalocampos03