El 3 de noviembre de 2019 se realizaron las votaciones para elegir presidente en los Estados Unidos para el periodo 2024 y la lucha electoral entre demócratas y republicanos fue cerrada, la diferencia fue de 7 millones de votos en un universo de 158 millones y bueno, como todos sabemos Joe Biden y los demócratas fueron los triunfadores.

Donald Trump obtuvo entonces su mayor derrota y no sólo política, sino moral y sobre todo en su orgullo y se vio profundamente afectado.

Como empresario desarrolló una carrera no exenta de fracasos y controversias, pero a pesar de ello, bueno muy probablemente por ello, fue que decidió participar en política, un terreno que conocía desde afuera pero no conocía en sus entrañas. Después de muchas consultas, alianzas y compromisos decidió participar y alcanzar la posición más importante de la Casa Blanca en el periodo 2016-2020, pero su apetito de poder lo llevó a buscar extender por un segundo término.

Sin embargo, su controvertida presidencia jugó en su contra y le precisó su más contundente derrota y los 81.2 millones de personas que votaron en su contra lo exhibieron públicamente como un derrotado.

Y bueno, ahora fuera del halo protector que le ofreció la Casa Blanca su “buena suerte” le está dando la espalda y las investigaciones en torno a su cumplimiento en el pago de impuestos van muy avanzadas y, cada vez se acercan más a la conclusión de que engañó al fisco con cifras maquilladas en su favor para pagar menos y recibir un rembolso. Otras de las investigaciones que van decantándose en su contra son las relativas a la toma del Congreso en enero de 2021 y su participación que alentó la turba de fanáticos, y para concluir las malas nuevas, el cateo que realizó el FBI en su casa de Mar a Lago allá en la Florida donde encontraron por lo menos 12 cajas con información, en algunos casos clasificada, que nunca debió sacarlas de la Casa Blanca, pero, sobre todo, de la vigilancia del Departamento de Seguridad Nacional.

Los días pasan y las nubes sobre Donald Trump se presentan más negras.

Aquí detalles sobre las investigaciones que se realizan a este empresario-político, presentadas por el periódico angelino “La Opinión”

El 6 de enero del 2021

El Departamento de Justicia mediante un gran jurado en Washington investiga los esfuerzos de Donald Trump y su círculo íntimo para crear falsos electores y presionar al exvicepresidente, Mike Pence, para anular las elecciones de 2020.

El periódico The Washington Post, informó por primera vez que los fiscales habían preguntado a los testigos ante un gran jurado sobre las conversaciones con Trump en relación con el resultado de las elecciones. Algunas de las preguntas se centraron en la sustitución de electores en los estados que ganó Joe Biden por aliados de Trump para, forzar el resultado de las elecciones presidenciales en el Colegio Electoral y en una campaña de presión sobre el entonces vicepresidente Mike Pence, para anular la elección, informó el periódico.

Indagatoria por fraude

La fiscal general del estado de New York, Letitia James, tiene abierta una investigación civil sobre posibles valoraciones fraudulentas de activos en la Organización Trump y, el fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, no ha descartado un caso criminal contra el expresidente después de que acusó a la Organización Trump y a su director financiero de esquemas de evasión de impuestos.

La oficina de James dijo en enero que encontró evidencia “significativa” que indicaba que la Organización Trump usó valoraciones de activos falsas o engañosas en sus estados financieros para obtener préstamos, seguros y beneficios fiscales y que necesitaba entrevistar a los Trump sobre su participación. La semana pasada, Ivanka Trump y Donald Trump Jr., se presentaron para declarar como parte de la investigación civil sobre las finanzas de la Organización Trump después de meses de peleas en los tribunales.

Georgia y las elecciones

La fiscal de distrito del condado de Fulton, Fani Willis, es la fiscal del área de Atlanta que investiga los esfuerzos del expresidente Trump y sus aliados para anular los resultados de las elecciones en Georgia en 2020.

El gran jurado está explorando si Donald Trump y sus aliados violaron la ley estatal de Georgia en sus esfuerzos por revertir la derrota del expresidente en 2020 en el estado. Esos esfuerzos incluyeron su notoria llamada telefónica del 2 de enero de 2021 con el secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, en la que Trump dijo que quería “encontrar 11,780 votos”.

También abarca los esfuerzos de la campaña de Trump para crear una lista de electores falsos en Georgia para transmitir votos electorales fraudulentos al Congreso para su certificación. Willis envió una carta a los 16 falsos electores en el estado para informarles que eran considerados “objetivos” de la investigación, lo que significa que se les considera sujetos potenciales de acusación criminal y no sólo testigos.

Recientemente, Willis pidió el testimonio de una variedad de figuras en el círculo íntimo de Trump, incluido el exalcalde de New York, Rudy Giuliani, y el senador de Carolina del Sur, Lindsey Graham.

La investigación en el Congreso

El Comité Selecto de la Cámara de Representantes que investiga el asalto al Capitolio mostró los esfuerzos que Donald Trump realizó para anular el resultado de las elecciones de 2020 , y los que no realizó cuando estaba ocurriendo el asalto al Capitolio en varias audiencias públicas.

En audiencias anteriores se determinaron vínculos entre el expresidente y su círculo con grupos supremacistas que lideraron el asalto, así como las acciones de Trump para lograr que se alterara el resultado de las elecciones de 2020, con presiones a funcionarios del Departamento de Justicia y al exvicepresidente, Mike Pence, para ejecutar su campaña para revertir las elecciones de 2020.

Los miembros del Comité Selecto de la Cámara que investigan la insurrección del Capitolio del 6 de enero de 2021 han dicho que creen que la evidencia que han acumulado podría ser motivo para una investigación criminal contra Trump.

La vicepresidenta del comité, Liz Cheney, dijo en una entrevista reciente con, Kasie Hunt, de CNN que si el Departamento de Justicia no procesa a Trump por el papel que desempeñó en la insurrección… “los hechos y las pruebas están ahí”, la decisión podría cuestionar nuestra capacidad de “llamarnos a nosotros mismos una nación de leyes.

@lalocampos03