Pocas cosas generan un temor más infundado que la palabra marxismo; para las mentes macartistas y conservadoras, y con ideologías fundamentadas en revistas de espectáculos, la pura mención genera reacciones. Esto es fruto de la ignorancia, la mala fe, los intereses o todas las anteriores juntas. El marxismo se ha enseñado en todas las escuelas, por más liberales que sean, desde el siglo pasado; por ejemplo, los cursos de marxismo que se imparten en Harvard desde hace más de 100 años.
El marxismo es una corriente necesaria, ya que surge como respuesta intelectual y política a los abusos de la revolución industrial. En este momento en el que se da una mayor concentración de capital como no se ha dado en la historia, además de un proceso de enajenación mental a través del uso excesivo de redes sociales y otros mecanismos de dominación como la dependencia tecnológica, es necesario una respuesta intelectual adecuada a este momento.
Hoy hay una nueva generación de académicos que están repensando El Capital a la luz de los hechos actuales; mención especial merecen Piketty que hizo una reinterpretación moderna y actualizada, además de explicar que la concentración de riqueza y su desigual distribución causan graves problemas económicos y sociales; Soshana Zuboff, autora del capitalismo de vigilancia que hace hincapié en la mercantilización de los datos personales; y de manera muy interesante y reciente Kohei Saito que está desarrollando teorías muy interesantes como el ecosocialismo que aborda la necesidad de repensar el modelo económico mundial con una perspectiva ambiental socialista.
La realidad es que las naciones más prósperas son también las que más contaminan, las que más destruyen, las que menos energías renovables usan y las que más explotación laboral tienen, por lo que es importante un cambio del sistema económico mundial. Y si bien estos académicos han refrescado el discurso y la idea marxista, aún queda mucho por hacer, como encontrar fórmulas de desarrollo económico, que en libre competencia disminuyan la inequidad y la exclusión.
@LuisH_Fernandez