Esta semana terminó el primer periodo ordinario de sesiones del segundo año de la presente legislatura del Congreso de la Unión. Llevan tres, les faltan tres. El periodo concluyó como inició: en medio de la polarización y descalificación entre los grupos parlamentarios que integran las cámaras, que a su vez son una extensión de lo que ocurre en el país.
Al final de cada periodo ordinario, los servicios parlamentarios de cada cámara emite una numeraria que es el recuento del trabajo realizado. Este año, destacan cuatro cambios. El paquete económico 2023, particularmente lo referente al Presupuesto que corresponde exclusivamente a la Cámara de Diputados. La reforma constitucional que amplía la participación de las fuerzas armadas en materia de seguridad de cinco a nueve años. La reforma a la Ley Federal del Trabajo, en materia de vacaciones dignas. La reforma a seis leyes electorales, el llamado Plan B.
El presupuesto del siguiente año será de más de 8 billones de pesos. Destaca, en un contexto dominado por la inflación, el aumento del 20% en promedio a los programas sociales. Con esta tendencia, al término del sexenio de AMLO, las pensiones a adultos mayores, los apoyos a madres solteras, las becas a estudiantes de bajos recursos y a los jóvenes construyendo el futuro se duplicarán. Así como los recursos para terminar las obras de infraestructura del gobierno, como el tren maya, la refinería de Dos Bocas y el Tren a Toluca.
La oposición a AMLO juró que no aprobarían ninguna reforma constitucional propuesta por el Presidente o Morena. Pero no dijo nada de las propuestas por la oposición, al menos así lo entendió el PRI. La diputada priísta Yolanda de la Torre propuso reformar el Artículo Quinto Transitorio de la reforma en materia de Guardia Nacional. En público, la oposición calificó la reforma como el ejemplo más claro del avance de la militarización en el país. En privado, los gobernadores y presidentes municipales de todas las fuerzas políticas expresaron su apoyo para que los efectivos de la SEDENA y la Marina sigan en sus territorios.
México es el país miembro de la OCDE en donde los trabajadores laboran más horas y producen menos. Donde hay más horas nalga y menos productividad. Obviamente, en donde hay menos vacaciones. La reforma a la Ley Federal del Trabajo en materia de vacaciones amplía los días de de 6 a 12 al año de manera continua. Las vacaciones son un derecho laboral, la duplicación del número de días de descando es un avance y la única reforma que tuvo el consenso de la mayoría de los grupos parlamentarios.
En San Lázaro, la reforma constitucional en materia electoral no alcanzó la mayoría calificada de dos tercios. La reforma legal fue y vino de las cámaras. La oposición acusa inconstitucionalidad. Morena y aliados la consideran necesaria para consolidar la democracia. Huele a controversia constitucional. Las reglas de la elección del 2024 están en el aire. Al final, las definirá la Suprema Corte. Eso pienso yo, ¿usted qué opina? La política es de bronce.
@onelortiz