¡Qué peligroso juego el de López y el T-MEC!. López sabe muy bien que no ganó la batalla por las energías limpias, sino que se extendió el tiempo de Conversaciones Amistosas, durante la pasada reunión Cumbre de los tres mandatarios norteamericanos aquí en CDMX. Eso no significa que en cualquier momento se puedan romper esas negociaciones amistosas y pasar a Páneles de controversia encabezados por especialistas de cada país.
México, su gobierno, el presidente, han decidido jugar ahora un peligroso dominó, donde México juega contra EE.UU. y Canadá, con dos temas candentes:
- Energías limpias de inversión privada.
- Mas ahora el tema agrícola, -por un lado-, con la supuesta prohibición de importación del maíz genéticamente modificado que llevamos muchos años importando porque no somos autosuficientes; -y, por otro lado-, la prohibición del glifosato como herbicida.
¿Qué sabemos?
Que el gobierno estadounidense pidió al mexicano por conducto de su nuevo jefe de comercio agrícola de la Representante Comercial Katherine Thai, -Doug McKalip-, que explique la planeada prohibición del maíz mencionado, así como del herbicida, pero con argumentos científicos. Vaya, dicho sea de otra forma, que no sean argumentos ideologizados.
La fecha límite: 14 de febrero –irónicamente el día del amor y la amistad-, para que la respuesta mexicana ayude con la ciencia que le sustente, a aceptar, o en su caso decidir los próximos pasos a seguir, para resolver esta larga disputa en torno a las políticas agrícolas y biotecnológicas de nuestro país. Ahí está la trampa. Le costará mucho trabajo al gobierno federal demostrar sus argumentos.
Puntos destacados de la contestación de la Comunidad Científica Mexicana al Gobierno de la 4T:
- Los alimentos modificados genéticamente son los más estrictamente evaluados para autorizar su comercialización y a la fecha, no se ha reportado daño derivado del consumo de OGM para la salud humana o animal.
- Existen cientos de publicaciones científicas que sustentan la inocuidad de cultivos transgénicos, particularmente para el maíz y soya cuando son consumidos por animales. Además, los cultivos transgénicos se han caracterizado a profundidad por ciencias ómicas y resultan ser muy parecidos molecular y sustancialmente a las plantas parentales de las que provienen, lo que soporta su inocuidad. En más de 20 años de uso y consumo continuo por más de 1200 millones de humanos y 100 mil millones de animales, no se ha presentado ninguna evidencia científica de daños por su consumo. El supuesto daño reportado en algunos artículos (Séralini et al., 2012 y 2014), no tiene sustento científico relevante.
- La inocuidad se sustenta también en el hecho de que una de las modificaciones más exitosas –hacerlas resistentes a plagas de insectos– ha evitado el uso de miles de toneladas de insecticidas químicos, muchos de ellos carcinogénicos, lo que representa un extraordinario beneficio para la salud y el medio ambiente.
- Las agencias responsables de la inocuidad alimentaria en varios países (por ejemplo, FDA de Estados Unidos, EFSA de la Unión Europea y COFEPRIS de México) no han retirado del mercado ningún transgénico de los que actualmente se comercializan.
- Tampoco han modificado los límites máximos permitidos del herbicida glifosato, que se usa para controlar las malezas desde los años 70 y perdió su patente en el año 2000. El uso irresponsable de los herbicidas (y de cualquier agroquímico) puede causar daño a la salud y al medio ambiente.
- Debido a la gran cantidad de maíz importado por nuestro país y su uso en la elaboración de una gran cantidad de productos de uso cotidiano, no debe sorprender a nadie que desde hace más de una década los productos derivados de maíz disponibles en México contengan maíz transgénico, sobre todo en la Zona Metropolitana de la Ciudad de México que es donde se realizó el muestreo reportado
- En un mercado globalizado tampoco es sorprendente que la presencia de maíz transgénico en alimentos de zonas urbanas en México sea estadísticamente igual a la encontrada en alimentos disponibles en el extranjero. Por ejemplo, en la Unión Europea (UE), donde más se ha cuestionado la siembra de cultivos genéticamente modificados, se importaron en los últimos 5 años, de los Estados Unidos, un promedio anual de 13 millones de toneladas de maíz y 14 millones de toneladas de soya modificadas genéticamente para la producción de alimentos de consumo humano y animal.
- Tampoco es sorprendente que algunos alimentos etiquetados como libres de transgénicos (GMO-free) contengan trazas de maíz transgénico, ya que las normas internacionales permiten que dichos productos contengan entre un 0.9% (en Europa) y 5% (en Japón) de productos transgénicos, sin requerir su etiquetado.
- La discusión se centra en el porcentaje de productos en los que se detecta, mas no en la cuantificación, es decir qué tanto transgénico contiene cada muestra del producto. Dado que los métodos existentes pueden detectar la presencia de trazas (menos de 0.1% de contenido de maíz genéticamente modificado), es de esperarse que la concentración que se encuentra sea proporcional a la cantidad que se usa de maíz de importación en los diferentes productos.
- En consecuencia, los datos suplementarios presentados en el artículo muestran que los 61 productos que contienen maíz transgénico (de 107 analizados), contienen menos del 5% de este maíz y que en muchos casos, los niveles son inferiores al 0.9%. De acuerdo con las normas internacionales, todos estos productos se pueden considerar como libres de maíz genéticamente modificado y por lo tanto, no requerirían de etiquetado en Europa. En las 47 muestras que reportan con un contenido mayor al 5%, no indican si se trata de 5.1% o de porcentajes mayores.
- Las evidencias existentes, así como los enormes beneficios que puede tener la modificación genética de plantas llevó a 126 Premios Nobel –entre ellos Mario Molina– a emitir una Declaración en favor de la biotecnología moderna y de los cultivares transgénicos. Esta declaración también ha sido suscrita por más de 13 mil científicos y ciudadanos de más de 100 naciones alrededor del mundo. Invitamos a la comunidad estudiantil y académica de nuestra máxima casa de estudios a analizar esta página para tener mayor evidencia sobre su contenido y la calidad académica de quienes la suscriben (http://www.ibt.unam.mx/computo/pdfs/maiz_transgenico_gaceta_UNAM_4917_pp_4_5_.pdf )
En Suma
Por lo pronto la fecha ya se cumplió, y todo indica que el gobierno federal y el Palacio Imperial ya agacharon la cabeza en relación al maíz genéticamente modificado: Se acepta para alimento de animales, y para procesos industriales para alimentación humana. Eso equivale a que la mazorca no, pero la tortilla amarilla, las harinas de maíz, los jarabes de maíz, etc, etc, etc, para consumo humano, sí se seguirán importando, porque ni EEUU cederá, ni nosotros somos autosuficientes.
“El miedo no anda en burro”
Pero siguen con el juego del herbicida Glifosato. ¡Mucho, mucho cuidado!
Este nuevo jefe de Comercio Agrícola, Doug McKalip, no se anda por las ramas. Sabe jugar dominó y además entiende que su adversario quiere jugar una dupla el solo, mientras que de aquel lado juegan pareja EE.UU. y Canadá.
¡Hasta para eso somos brutos! Se necesita sesera. Y López es el maestro electorero. Pero al juego internacional como que no le entiende mucho.
Banco de México +50pb.
Todos los analistas esperaban que el pasado jueves la tasa subiera 25pb. En vez de ello lo hizo en 50pb. ¿Por qué?
Varios factores son los que considera un servidor:
- Banco de México ya no pudo mantener el paralelismo con la FED porque la inflación en México es neciamente persistente.
- Si bien la inflación general ha bajado, la inflación subyacente preocupa por su persistencia. No baja, por más que los analistas teóricamente así lo vean. La subyacente impacta en promedio con una inflación efectiva del 15% al consumidor: alimentos, domésticos, electrónicos que ya son parte de la canasta básica, luz, gas, agua, todos afectan seriamente el bolsillo del consumidor.
- Sueldos paupérrimos en un país norteamericano, mano de obra competitiva, pero al mismo tiempo más de la mitad de la PEA es informal.
- Costos nacionales también difíciles para productores, que cargan con altos impuestos, fiscalización excesiva, cálculos que deben incluir impactos negativos de la 4T, pero también del T-MEC; no se crea la ilusión del nearshoring, dada la Incertidumbre para la inversión privada, la nueva IED, para inversiones en energías limpias por particulares.
- Costos inciertos del exterior por commodities y pleitos regionales, en particular Ucrania agredida por Rusia, y las tensiones comerciales y militares sinoestadounidenses.
- Incertidumbre para la agrotecnología y la agroindustria por definiciones ideológicas, que no de negocio del gobierno federal, generan sobrecostos por incertidumbre, y freno a las inversiones.
- Mínima gobernanza del gobierno y para múltiples inversiones privadas. Pida usted apoyo en una asesoría …… “Este año si voy a estar muy seco. No te puedo ayudar ni contratar”, es la respuesta. Esa actitud provoca un colapso en múltiples cadenas de valor.
- Estado de Derecho. Simplemente no hay Estado de Derecho. Verá usted según lo que pase con el INE y con el INAI la reacción con las inversiones. Medite usted los bloqueos que hubo al aguacate mexicano en época de super bol en EEUU, porque se involucran grupos del narco en su producción.
Si un analista de los 300 mil que hablan afirma: “La tasa subirá 25pb”…., probablemente está en lo correcto. Pero Banco de México considera los factores antes enunciados. Su gobernadora y subgobernadores cuadran mentalmente, -dada su experiencia monetaria-, todos los impactos específicos en México de lo anterior.
Agregue el efecto como escribí antes, de las Commodties internacionales impactadas por la guerra en Ucrania contra un “Extraño enemigo”, más las fuertes inversiones en energías limpias en el mundo, más la recuperación del mercado de semiconductores sin la presencia de México, ni la necesidad apremiante de México para la fabricación de autos eléctricos, ni la decisión estúpida de entregar a una empresa china el yacimiento de litio de Sonora, ni el acercamiento de México a Cuba, a nicaragua, a Venezuela, el silencio acerca de la guerra ruso-ucraniana, que todo en conjunto provoca por lo menos desconcierto internacional, todo ello impacta en el margen que necesitamos tener de mayor tasa base, para que los capitales extranjeros invertidos financieramente en México no se fuguen. Todo eso exige un spread cada vez mayor entre la tiie mexicana y la FED.
¿Ya me hice entender?…. digo, porque AMLO como que todavía no le entiende, verá usted, y quiere que Banco de México se encargue más de la generación de empleos, que de su único y absoluto mandato Constitucional: Política Monetaria.
A ver si alguno de los cuates del Club de empresarios de Lopez, “Chilpitin”, se lo explica.
Efrén Flores es licenciado en Economía. Durante más de 40 años se ha dedicado a la comunicación en medios electrónicos, impresos, digitales, con temas financieros, económicos, empresariales, estratégicos, RSE, PyMEs, y nuevas tecnologías que revolucionan a nuestro mundo. Es conferencista en México y en EEUU. Las opiniones expresadas en este artículo son exclusivas del autor. Efrén Flores nunca ha pertenecido a Partido Político alguno… hasta ahora.

