Les platico: Todas los pasos fronterizos entre México y Estados Unidos se venden al mejor postor. Las aduanas más caras son Tijuana y Nuevo Laredo. Cada una de ellas vale $2 millones de dólares.

Plazas como Ciudad Juárez, Reynosa y Matamoros se cotizan en $1 millón de dólares. Nogales, Mexicali y Piedras Negras andan por el medio millón y de las más baratas, Colombia, NL, cuesta $300,000 dólares.

¿Quién las compra? Contrabandistas de textiles, electrodomésticos, juguetes, combustibles –mayormente diésel– pacas de ropa usada, pollo, carne de res y de puerco. ¿Quién vende esos pasos fronterizos? La “maña” con sus respectivas nomenclaturas, dependiendo de si se trata de Baja California Norte, Sonora, Tamaulipas y otros estados fronterizos.

¿Y quién se los vende a ellos? Los subadministradores de Aduanas que siguen bajo las órdenes del ex jefe de Aduanas y ex sub secretario de gobernación Ricardo Peralta, y del ex gobernador de BCN, Jaime Bonilla, quien fue sucedido por la también morenista Marina del Pilar Ávila.

La “maña” infiltra los pasos aduaneros, metiendo en sus nóminas a quienes ocupan puestos clave, principalmente en áreas operativas, aunque muchas veces le llegan al precio al mismo jefe de la aduana, para mayor seguridad.

Cuando un paso fronterizo está “arreglado” se dice que está “abierto” y cuando la “maña” se topa con pared se habla de que tal aduana está “cerrada”.

Desde diciembre de 2017, todas las aduanas mexicanas con EU están abiertas. El gobierno de AMLO no ha cerrado ni una sola.

Empresa como “Seguritech”, perteneciente a Ariel Picker y “Kio”, de María Asunción Aramburuzabala, instalaron equipos tecnológicos en las aduanas, siendo el responsable operativo Arnoldo Martínez, exadministrador central de operación aduanera, que estuvo bajo las órdenes de Peralta, a quien jaló a la SEGOB doña Olga Sánchez Cordero, antecesora en el puesto de Adán Augusto López, quien sigue deshojando la margarita para ver si se va como presidente de Morena en sustitución de Mario Delgado, quien hasta antes de ser mencionado por el gobierno de EU como posible implicado en el trafique de remesas hacia campañas políticas, se le citaba como corcholato para la jefatura de la CDMX, cuando Claudia Sheinbaum vaya a buscar la presidencia en el 2024 como candidata del presidente López Obrador.

A Martínez lo removió del cargo la ex directora del SAT, hoy Magistrada de la SCJN, Margarita Ríos Farjat y puso en su lugar a Juan Alcalá Pignol. Peralta fue cesado del SAT –también– porque permitió el cruce ilegal hacia México de millones de litros de combustibles, en plena guerra contra el huachicoleo.

Los boletines P008, P0009 y P010, publicados por Peralta, omitieron informar los cruces de contrabando por las empresas importadoras, ExxonMobil, Tesoro, Shell, PMI, Arco, Chevron, BP, entre otras.

Justo antes de las elecciones de BCN, el administrador de la Aduana de Tecate no logró llegar a la cuota quincenal solicitada por el ex gobernador Jaime Bonilla y por Peralta, por lo que prescindieron de sus servicios a pesar de ser del equipo inicial y habérsele prometido la aduana de Mexicali. A partir de entonces, la operación estuvo directamente a cargo de Juan Dallet.

A la salida de Alejandro Miramontes como jefe de la aduana de Mexicali, le fue encargado el jale a Raymundo Humberto Jiménez, quien adquirió una franquicia de restaurantes con un valor que difícilmente se justificaría con su salario. Pagó al contado más de $2 millones de dólares.

Miramontes es investigado desde el año 2019 por ser parte de una red de funcionarios aduanales involucrados en el paso ilegal de mercancías en Ciudad Juárez y de sobornar a legisladores de BCN. En agosto de 2018, la FGR inició la citada investigación y hasta donde mi BigData sabe, el expediente sigue abierto de par en par.

Miramontes no aparecía en la escena pública para no desafiar las instrucciones del presidente López Obrador para sanear las aduanas. Pero siguió administrando los negocios de Bonilla y Peralta en las aduanas de la región y repartiendo el dinero para el ex subsecretario de Bucareli y el ex gobernador de BCN.

 

Calderón, padrino de bodas de gobernadora de BCN

Una de sus últimas apariciones públicas de Miramontes fue cuando se le vio platicando con Bonilla en la boda de Marina del Pilar Ávila, ex alcaldesa morenista de Mexicali y gobernadora de BCN desde el 2021 hasta el 2027, si el presidente López Obrador no dispone otra cosa.

Ella se casó en el 2019 con Carlos Torres Torres, exdiputado panista y exadministrador de la aduana de Tijuana. Éste es el segundo matrimonio de la gobernadora, y en el primero tuvo como padrinos de bodas ni más ni menos que a Felipe Calderón y a su esposa Margarita Zavala, en 2009. Como diría Pompín Iglesias: “Qué bonita familia, qué bonita”.

Panistas, morenistas, aduanas, gobernadora, todo mezcladito, para callarles la boca a emBOLAdos defensores de oficio de la 4T, como un contratista de nombre Gerardo Bolaños Ortiz, de la constructora Arbol Proyectos y Construcciones de Mexicali y de un negocio de paneles solares en Mérida.

Bolaños Ortiz no fue invitado a la segunda boda de la gobernadora, pero ahí anduvo rondando el salón. Busca y busca la forma de que la gobernadora le ayude a salvar de la quiebra sus negocios en Mexicali, de cuyo “Club de los Madrugadores” fue corrido por la forma burda en que alaba a Morena siendo que antes era proveedor favorito de los panistas federales.

Se ganó una lana en el gobierno de Calderón haciendo trabajitos en la SCT y ahora es un rabioso defensor de Morena, de López Obrador y de la 4T. Esto es lo que hay detrás de muchos empanizados que hoy muerden la mano de quienes les dieron de comer, pero mis contactos dentro del politburó de Morena me dicen que ya los traen en la mira.

“Si traicionaron al PAN, ¿por qué no van a traicionar hoy a Morena?”, me dijo uno de ellos en Mexicali, a donde estuve el pasado fin de semana para documentar mi tema de hoy.

Todo este trafique en aduanas sucede al margen de quienes han fungido como titulares del SAT y de la misma titularidad de esa dependencia nacional, que dirige desde el 7 de diciembre del 2022, Rafael Marín Mollinedo, quien fuera director del corredor interoceánico del Istmo de Tehuantepec, fundador de Morena en Quintana Roo y postulante -frustrado- a la candidatura de ese partido a la gubernatura de dicha entidad.

Y no es que se dude de sus buenas intenciones y capacidad, sino que la curva de aprendizaje ha sido demasiado lenta, y muy tibia en la toma de decisiones para frenar tanta tropelía en contra del erario. ¿Hasta cuándo permitirán AMLO y su escudero Marín Mollinedo que las aduanas de BCN sigan siendo ordeñadas por Bonilla y Peralta?

Por si las moscas, Bonilla planeaba una secretaría de comercio exterior que ejercería funciones conforme al anexo 8 (convenio de colaboración con el SAT), lo que les permitiría actuar a sus anchas en toda BCN, realizando actos de comprobación de vehículos usados, a transportistas, verificaciones, control de pedimentos y agencias aduanales, empresas importadoras y exportadoras. Pero se le acabó el chiste cuando pretendía extender su gobierno a 6 años y se quedó en 2.

La gobernadora Marina del Pilar le paró el cuento, pero Bonilla y Peralta siguen moviendo hilos muy gruesos dentro de las estructuras de Aduanas en BCN. Se la paso al costo a Marín Mollinedo, por si le interesa. Como decía el patrullero de la 4T: Seguiremos informando. (Investigación de mi BigData en Mexicali).

 

Cajón de Sastre

“El verdadero negocio en las aduanas sigue siendo la extorsión”, afirma la irreverente y bien informada de mi Gaby.