Gracias a técnicas conocidas como siembra de nubes o bombardeo de nubes, con sustancias como el yoduro de plata, se puede lograr que en una región determinada llueva.

Es una medida que se ha estado utilizando, como recientemente en Nuevo León y la Ciudad de México, para paliar los efectos de la sequía en determinadas épocas del año y en regiones en las que los mantos acuíferos se han visto reducidos por el abuso en la extracción.

Un dato poco conocido es el que tiene que ver con la experiencia que tiene la Sedena, junto con la Conagua, en esta actividad, pues desde 2012, a raíz de las sequías en el norte del país, se ha recurrido a esta medida para ayudar a la población ante la escasez de agua.

Pero, ¿cómo funciona esta técnica? El uso de yoduro de plata provoca que, al entrar en contracto con las nubes, entre en contacto con la humedad que existe en éstas haciendo que se las diminutas partículas de agua en la atmósfera fusionen y caigan en forma de precipitación, después de 15 a 30 minutos aproximadamente de realizar el bombardeo.

Como dato curioso, el mayor sistema de siembra de nubes en el mundo es el de la República Popular China, que logra un aumento en la cantidad de lluvia en varias regiones áridas de dicho país, incluida su capital Pekín, mediante el disparo de cohetes con yoduro de plata hacia el cielo donde se desea la lluvia.