La pobreza, la inseguridad, la violencia y la falta de oportunidades son algunas de las muchas variables que nutre las constantes olas migrantes que buscan ingresar a los Estados Unidos, pero ahora, desde el mismo Congreso parecen alentarla.

El martes pasado, uno de los senadores más influyentes en el Comité de Relaciones Exteriores, Bob Meléndez propuso un plan que no necesita ser sometido al voto del Congreso y que de manera frontal presiona al gobierno de Joe Biden para eliminar medidas punitivas incluidas en la actual política fronteriza. También desafía a los republicanos, quienes culpan a la actual administración de impulsar una política de puertas abiertas y de haber agravado la crisis que se vive en la frontera con México.

Meléndez, hay que destacarlo es demócrata, del mismo partido que el presidente Biden, de ahí que haya llamado tanto la atención esta propuesta.

Bob Menéndez, de Nueva Jersey, se mostró muy optimista de que su propuesta avance ya que incluye “maneras legítimas y humanas” de atender esta “realidad” y aporta soluciones dentro del marco legal. “Los procesos legales no son fronteras abiertas”.

Sobre los permisos de trabajo que se otorgarían para las personas que hayan ingresado sin una visa y los que están por vías legales, “serán utilizados por extranjeros que ocuparán puestos laborales que los estadounidenses no quieren desempeñar” y que los estados y empresarios “necesitan con urgencia”.

El plan de Menéndez se basa en cuatro puntos: 1) crear nuevos caminos legales y ampliar las vías existentes para reducir la presión en la frontera sur… 2) expandir la asistencia humanitaria para integrar mejor a los migrantes y refugiados en países de las Américas…3) aumentar los recursos en la frontera para procesar a los solicitantes de asilo y deportar individuos sin reclamos legales para permanecer en Estados Unidos….4) intensificar los esfuerzos para contrarrestar a las organizaciones delictivas transnacionales involucradas en la trata y el tráfico de personas.

En cuanto a los nuevos caminos legales de inmigración, el documento incluye la creación de un programa de libertad condicional para personas que puedan ocupar puestos que enfrenten escasez de mano de obra según lo determinen los gobernadores de los estados, tanto para personas que migran como para personas indocumentadas que ya están en el país.

También recomienda ampliar el acceso al programa de visas H-2 (trabajadores no profesionales tal como campesinos) en América Latina y el Caribe, teniendo en cuenta las protecciones laborales estadounidenses y el alcance de los empleadores en relación con estas visas.

El senador Menéndez propone incrementar el número de agentes de asilo del servicio de inmigración en las fronteras para “aumentar las entrevistas de miedo creíble” así como, extender el alcance de la aplicación CBP One (solicitudes realizadas desde sus países de origen) más allá del norte de México para que más personas puedan acceder a los programas legales de ingreso y una oportunidad de presentarse en puerto de entrada autorizado.

En cuanto al aumento de recursos en la frontera, el plan incluye procesar y expulsar o como dicen los políticos, deportar de manera expedita a personas que no tengan alguna causa legal para permanecer en Estados Unidos y trabajar con el Congreso para aumentar los recursos y partidas presupuestarias necesarias para llegar a cabo mejoras en la frontera.

La propuesta del senador Meléndez contempla:

  • Crear centros de procesamiento regionales a gran escala en la que participen la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE); el servicio de inmigración (USCIS), la Oficina de Control de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), organizaciones no gubernamentales y proveedores de servicios legales.
  • Procesar a las familias en entornos no estén privados de libertad (colocadas en alternativas a la detención, ATD).
  • Acelerar el proceso de asilo (descongestionar la Corte de Inmigración, EOIR).
  • Garantizar acceso legal a los inmigrantes en proceso de deportación.
  • Reubicar a los inmigrantes en sus destinos finales.
  • Crear una nueva oficina de coordinación de migración dentro de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA).
  • Aumentar el salario de los empleados de la Patrulla Fronteriza y la Oficina de Operaciones de Campo (de ICE) por la mayor carga de trabajo de procesamiento de nuevos inmigrantes y patrullaje de la frontera.
  • Aumentar las inversiones en Centroamérica para reducir las causas de la inmigración hacia otros países y Estados Unidos.
  • Renunciar a cualquier acuerdo de Tercer País Seguro con México.
  • Aumentar los enjuiciamientos en Estados Unidos por tráfico de migrantes y trata de personas.

Hasta aquí, parece viable la propuesta de Bob Meléndez, pero como en la política son tan importantes las formas, habrá que considerar que no le informó al presidente y compañero de partido sobre esto, veremos que tanto afecta.

Y bueno, el legislador hispano dijo que informó a la gente cercana al presidente, a funcionarios de la Casa Blanca y minimizó no haberlo hecho directamente…” el plan se complementa con el Acuerdo de Los Ángeles firmado el año pasado por Estados Unidos y representantes de los países de América que asistieron a la Cumbre de California y con las políticas desarrolladas por el gobierno, lo significativo es que el plan que estamos proponiendo es que la Administración tiene el gran poder Ejecutivo de hacer sólo esto, no tiene que esperar al Congreso para pasar leyes y adquirir los elementos de que estamos hablando y con ello revertir la crisis migratoria de la frontera”.

Se ve bien la propuesta, pero ¿cómo salvar el dique de la discusión política en el Congreso? aún falta por conocerse este importante detalle.

@lalocampos03