Además de ser una alternativa a la utilización de combustibles fósiles, la energía nuclear no sólo es parte de los planes para proveer de electricidad a buena parte del planeta –gracias a las investigaciones de especialistas en varias partes del mundo como es el caso de China que busca inaugurar en 2028 una central nuclear que combine la fusión y la fisión para producir más energía de la que consume–, sino que también se considera para los viajes a Marte.

La NASA junto a empresas privadas está trabajando en el desarrollo de un motor nuclear que ayude a que los viajes a Marte se reduzcan de los meses que una nave tardaría en recorrer los 225 millones de kilómetros que, en promedio, separan a nuestro mundo del también llamado planeta rojo a sólo unas semanas.

La idea es aprovechar la actual tecnología utilizada en un reactor de fisión nuclear para hacer funcionar los propulsores nucleares de una nave espacial, algo que ayudaría no sólo a llegar a otro mundo mucho más rápido que con las actuales tecnologías, sino a utilizar mejor el espacio en las cápsulas para llevar más instrumentos o comida y agua para la tripulación.

Hay que considerar que un viaje de meses –dependiendo de la distancia al planeta elegido–, requiere las suficientes provisiones para ir y regresar, lo que supone un problema de espacio en el diseño de las naves que harán el recorrido, por lo que la alternativa nuclear es una opción interesante para resolver este problema.