Es inaceptable que una persona por dinero, religión, territorio, drogas o armas, se sienta con el poder de dañar o matar a otra, lo mismo a nivel nacional como internacional.

En un planeta en el que vivimos más de 8 mil millones de personas, lo que se necesita es encontrar los puntos de conciliación para prosperar y donde todos nos podamos desarrollar en plenitud y en paz.

Son inadmisible los ataques terroristas contra la población civil israelí, al parecer planeado con meses de anticipación.

Que López Obrador haya dicho: “nosotros no queremos tomar partido”, sólo demuestra su complacencia con grupos extremistas.

Pero que podemos esperar del Gobierno federal, cuando le ha fallado a México, permite que el crimen organizado desaparezca a miles de personas y no hacen nada para frenar el dolor de las familias.

Hay un Estado fallido cuando el gobierno no funciona, no hay seguridad, no hay servicios de salud mínimos, no hay prosperidad, están intentando destruir a las instituciones que les estorban.

En México, en promedio, con este gobierno, diariamente desaparecen 25 personas. Mientras que en el sexenio anterior eran 14 y en el anterior a ese eran 7.

En promedio, durante este gobierno, asesinan diariamente a 92 personas. En la administración anterior eran 71 y la anterior a esa eran 55.

Los datos, son del INEGI y del propio registro de desaparecidos. Este sexenio, es el más violento en la historia moderna.

Tanto la política interior como la exterior, deja mucho que desear. Es necesario condenar cualquier acto terrorista como el perpetrado contra los civiles que se encontraban en sus casas, en un concierto o en las calles de Israel.

El gobierno mexicano debe ser contundente en estos momentos donde se hace tan necesaria la paz.