Mediante un comunicado, el Departamento de Defensa de Estados Unidos –conocido coloquialmente como Pentágono, por la forma del edificio que alberga su sede–, informó que de agosto de 2022 a abril de 2023 tiene registros de 273 avistamientos de lo que era conocido como Objetos Voladores No Identificados (OVNIS), pero que ahora se les llama Fenómenos Aéreos No Identificados (FANIS).

El hecho llama la atención por dos aspectos; el primero tiene que ver con la manera en que en fechas recientes autoridades estadounidenses se han convertido en fuente de este tipo de noticias, ya sea a través de comunicados como el que comentamos o mediante videos que dan a conocer, además de algunos documentos desclasificados; pero, en segundo lugar, la manera en que sólo se dan a conocer estos datos sin mayor contexto y al por mayor, algo que ayuda sin duda a la especulación.

En el comunicado comentado, se asegura que la documentación de este tipo de fenómenos se hace para las posibles amenazas que plantean para la seguridad nacional de dicho país, pero sin entrar en detalles acerca de cómo podrían representar una amenaza para la nación más poderosa del mundo militarmente hablando.

La NASA, por su parte, anunció la creación de una oficina para investigar los FANI, con el argumento de que no se están estudiando adecuadamente.

Así, a pesar de que tenemos una gran cantidad de información sobre este tema, y del entusiasmo que genera entre creyentes del fenómeno OVNI –quienes creen que nos están preparando para una gran noticia al respecto–, la realidad es que seguimos sin saber qué es eso que muchos ven en los cielos del mundo y que en muchas ocasiones no se molestan en comparar con fenómenos naturales, otro tipo de aeronaves o reflejos en los lentes de sus cámaras, pues es mejor una explicación extraordinaria que la simple verdad.