Ave de tempestades

“No llores por mi Argentina”, de la comedia musical Evita, del famoso Andrew Lloyd Weber, bien podría referirse a los peronistas, comenzando por Cristina Kirschner, la pretendida Evita de estos tiempos y Sergio Massa el candidato derrotado en las elecciones del domingo pasado, declarando por enésima vez, su amor por el país, sumido en una grave crisis de la que son en mucho, responsables.

Podría también, suprimiendo un par de palabras, ponerse en boca de Javier Milei, presidente electo, quien diría en su primer mensaje: “no llores Argentina, hoy comienza el fin de tu decadencia”, O, en fin, ser la expresión compasiva: “no llores Argentina”, de los muchos que consideran la elección de Milei como una tragedia.

Lo cierto es que el recién electo mandatario –“personalidad estridente”, según Andrés Oppenheimer– ha producido con sus estrafalarias propuestas de gobierno innumerables comentarios de alarma y críticas, entre ellas las que lo consideran un “Trump sudamericano “, otro Jair Bolsonaro, Nayib Bukele, o hasta un Hugo Chávez; de los que prometen soluciones contrarias al establishment. El propio Milei, según el ya mencionado Oppenheimer, se declara admirador de Trump y de Bolsonaro.

Por mencionar algunas de las propuestas del mandatario electo, expresadas en estilo patanesco, está la de eliminar al banco central y dolarizar la economía -hacer del dólar la moneda nacional- fusionar. privatizar y eliminar ministerios, algunos clave, del gobierno, liberación de militares y policías condenados por crímenes de lesa humanidad -recuérdense las dictaduras, la última de 1976 a 1983. Las que obviamente provocan alarma.

Sin embargo, Milei es el presidente que ha obtenido el mayor número de votos y porcentaje, 55.7 por ciento, de sufragios de los mandatarios electos desde el retorno de la democracia, en 1983 con Raúl Alfonsín. Y no solo eso, sino que su contrincante derrotado, Sergio Massa, aceptó de inmediato los resultados y lo felicitó, como también lo hizo el presidente Alberto Fernández -y Cristina Kirschner- iniciando ambos mandatarios, el saliente y el nuevo, conversaciones con vistas al traspaso del poder. Conducta civilizada, ejemplar, que pone en alto a la democracia argentina.

De acuerdo a los usos diplomáticos, la elección de Milei ha dado lugar a las felicitaciones de gobiernos, entre los latinoamericanos la mayoría, con distinto énfasis: la del presidente Lula, discreta, la del mandatario chileno Gabriel Boric, muy bien como siempre, a pesar de que el argentino es identificable, hoy por hoy. como ultraderechista. El mandatario colombiano Gustavo Petro fue, por el contrario, impertinente al felicitar a Milei al tiempo que se manifestaba “triste” por el triunfo de la ultraderecha.

Milei recibió ya, también, la felicitación de Estados Unidos, Rusia, China, India, la Unión Europea y España -aunque ésta solo del gobierno y no de Pedro Sánchez, “muy ocupado en la formación de su gabinete ministerial”-. En el caso de México, la canciller Alicia Bárcena felicitó a Argentina por las elecciones pacíficas y declaró su voluntad de trabajar con el nuevo gobierno. No felicitó a Milei, como tampoco lo ha hecho el presidente López Obrador, quien, en cambio, no se ha cansado de criticar y ofender al nuevo mandatario. Una actitud bochornosa y violatoria del principio de no intervención que la Constitución consagra como uno de los principios clave de nuestra política exterior. Por si fuera poco, el presidente argentino recibió la felicitación de los expresidentes Vicente Fox y Felipe Calderón, ¡tragicómico!

Es interesante mencionar, además, estas felicitaciones; “Estoy muy orgulloso de ti. Cambiarás por completo tu país y harás que Argentina vuelva a ser grande“, Donald Trump. “Felicitaciones al pueblo argentino por su victoria con Javier Milei. La esperanza vuelve a brillar en Sudamérica”, Jair Bolsonaro. “Felicitaciones, querido Javier Milei, por tu gran victoria. Hoy se abre un camino de futuro y esperanza para los argentinos y toda Iberoamérica…¡viva España y viva Argentina, libres de socialismo y soberanas!”, Santiago Abascal.

Un vistazo a los medios internacionales revela lo siguiente: El New York Times califica a Milei como “libertario de ultraderecha”. El Times habla de “una victoria para la ultraderecha mundial” y compara al mandatario con Trump. “por su proclividad a las teorías conspirativas”. El País también habla del mandatario “de ultraderecha”, en tanto que uno de sus brillantes colaboradores, Andrea Rizzi, califica a Milei, Trump, Bolsonaro, la primera ministra Giorgia Meloni, de Italia y los promotores del Brexit de nacional populistas a los que “una inmensa frustración ciudadana dio alas”. La Vanguardia (Barcelona) califica a Milei de ultraderechista libertario” y Le Monde de “ultraliberal”, mientras que Le Pont, otro diario francés, lo llama festivamente “súper Trump”.

 

El porqué de un personaje como Milei

Porque Argentina, en crisis intermitente, sufre hoy el aumento de l pobreza en un 40 por ciento y de la indigencia a casi un 10 por ciento. Más inflación de 140 por ciento y la moneda -el peso- a 350 por dólar y cerca de 1000 en el mercado paralelo, de uso habitual. Una deuda pública que ha hecho del país el mayor deudor del FMI. Yo, que viví entre 1985 y 1992 en Buenos Aires fui testigo -y a veces víctima- de estas crisis cíclicas de esta potencia que no ha sabido serlo.

País de grandes riquezas naturales, tiene, en la Pampa y la cuenca del río Paraná, uno de los territorios más fértiles del mundo (Cfr. “Cómo se rompió Argentina…” 19/11/2023, El Orden Mundial, medio de análisis internacional, Madrid), se engolosinó con las cuantiosas ganancias derivadas de la producción agrícola y ganadera y no apostó a industrializarse y exportar productos manufacturados.

Tal torpeza hizo crisis después de la Primera Guerra Mundial y más tarde con el crac de 1929, con la caída brutal del PIB y el PIB per cápita, provocando grave descontento social y el golpe de Estado militar de 1930. Para continuar el país viviendo entre golpes militares y con ello, el fortalecimiento de la casta militar -el país habría de vivir entre ese año y 1976, seis golpes de Estado exitosos y dos fallidos. ¡más el peronismo!

Tanto los gobiernos civiles como los militares. Fueron torpes en finanzas y en las obligadas negociaciones entre partidos y actores políticos, lo que produjo una crisis de deuda e inflación, con gasto público insostenible. Y una inestabilidad política que obligó incluso a la renuncia de presidentes: el caso de Alfonsín, que conocí de cerca fue una suerte de “golpe de Estado” civil, pues ante la crisis económica, el peronismo concertó con empresarios, entre ellos ganaderos, que obligaron al presidente a entregar, en julio de 1989, antes de concluir su período, al presidente electo Carlos Menem. El otro presidente que se vio obligado a renunciar -2001-2002 fue Fernando de la Rua.

 

¿Con Milei, salto al vacío?

Esperemos que no y que la alianza “estratégica” con la derecha moderada del expresidente Mauricio Macri y Patricia Bulrich a la que derrotó en la elección presidencial moderen al “rayado” (“loco”, en lunfardo, el “idioma” popular de Argentina). Que llegue igualmente a acuerdos con los peronistas, todo ello necesario para lograr apoyos en el Congreso.

Asimismo, que las mujeres que rodean a Milei: su “influyente y enigmática hermana” Karina principalmente y Fátima Flórez, pareja del mandatario, lo equilibren. Es discutible, sin embargo, el apoyo que podría darle su vicepresidenta Victoria Villarruel, persona controvertida por su oposición al aborto y su defensa a los militares golpistas.