En 2024, se llevarán a cabo elecciones en México, Estados Unidos y la India, comicios que ya preocupan a nivel internacional por el tema de desinformación y los efectos en los votantes que esto puede tener.

Hay varios datos en este sentido que empiezan a circular y forman parte de los esfuerzos para evitar que la desinformación pueda provocar que gane un contendiente que no debería hacerlo. De acuerdo a Claire Wardle, cofundadora y codirectora del Information Futures Lab de la Universidad de Brown, citada por la Red Internacional de Periodistas, “la desinformación, finalmente, es un contenido deliberadamente falso o engañoso que pretende engañar a la gente. ‘La desinformación no consiste en convencer a la gente de que vote en un sentido u otro’, explicó Wardle. Su intención es sembrar el caos y la confusión, y reforzar las divisiones existentes’”.

En el artículo al que hacemos referencia, se menciona que “durante el ciclo electoral de 2016 en Estados Unidos, los medios estatales rusos difundieron desinformación a favor de Donald Trump y en contra de Hillary Clinton, según reveló el Comité de Inteligencia del Senado estadounidense”.

México no está exento de esta situación, por la costumbre de muchas personas de todas las edades y estratos sociales de informarse mediante redes sociales sin verificar la información, confiando que un amigo es la fuente de los datos que reciben, pero sin darse cuenta que son reenviados sin verificar su autenticidad, algo que todos deberíamos hacer.