Luego de que  Insight Crime y Propublica publicaran sus respectivas investigaciones que tenían como base una investigación de la DEA que buscaba comprobar un supuesto financiamiento a la campaña presidencial de López Obrador en 2006 de parte de un cártel del narcotráfico, la cual fue detenida para evitar problemas diplomáticos con nuestro país, se da a conocer otra indagación –ahora de parte de The New York Times–, pero relativa a la campaña de 2018 nuevamente con la presunta entrega de dinero a cercanos de quien en ese entonces era candidato presidencial de Morena.

El rotativo estadounidense apunta al inicio del trabajo firmado por Alan Feuery y Natalie Kitroeff, que “los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley estadounidense pasaron años investigando acusaciones de que aliados del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se reunieron con cárteles de la droga y les quitaron millones de dólares después de que él asumió el cargo, según registros estadounidenses y tres personas familiarizadas con el asunto”.

Los reporteros de The New York Times indican que “la indagatoria, de la que hasta ahora no se había informado, descubrió información que señalaba posibles vínculos entre operadores poderosos de los cárteles y funcionarios y asesores mexicanos cercanos a López Obrador cuando ya gobernaba el país”.

También el medio aclara que “Estados Unidos nunca abrió una investigación formal a López Obrador y los funcionarios que estaban haciendo la indagatoria al final la archivaron. Concluyeron que había poca disposición en el gobierno estadounidense para rastrear acusaciones que pudieran implicar al líder de uno de los principales aliados del país, dijeron las tres personas con conocimiento del caso, quienes no tenían autorización de ofrecer declaraciones públicamente”.

Los defensores del presidente de inmediato salieron a decir que se trata de un ejemplo de mal periodismo, que no hay pruebas y es parte de la campaña en contra de su líder, misma que se inscribe en la creciente presencia de las etiquetas en redes sociales #NarcoPresidenteAMLO y #NarcoCandidataClaudia, pero nada de eso superó la conferencia mañanera en Palacio Nacional del pasado 22 de febrero, en la cual el mandatario leyó la carta en la que la jefa de la oficina del diario en nuestro país, Natalie Kitroeff, solicita se responda a varias preguntas para el texto a publicar, con el fin de conocer la posición del gobernante respecto a este tema, pero incluyendo el teléfono de la periodista, lo que puede poner en riesgo su integridad.

El evidente enojo presidencial –en una semana en la que descalificó de nueva cuenta al Poder Judicial y exhibió a Arturo Zaldívar, exministro presidente de la SCJN, como su empleado y volvió a quejarse de las redes sociales–, muestran que este tipo de materiales han dado en uno de los puntos que más interesan al presidente, la percepción pública acerca de su honestidad, pues hay que recordar que la corrupción del sexenio anterior fue un factor de peso para que ganara la elección, por lo que ahora la historia se podría volver a repetir, pero para su desgracia y, quizá, derrota.

 

Más casos de corrupción

Mientras el debate público se centra en lo publicado por el medio estadounidense –con el consabido duelo para desacreditar o difundir el material–, se siguen acumulando casos que reflejan más temas de corrupción en el actual gobierno.

La FGR abrió dos carpetas de investigación en contra de Ana Gabriela Guevara, directora de la Conade, por presuntas irregularidades. La Auditoría Superior de la Federación (ASF) encontró irregularidades por 283 millones de pesos en gastos sin justificar, pagos excesivos en eventos especiales, pagos de becas sin cumplir requisitos, pagos irregulares en viáticos, entre otros aspectos que reflejó la auditoria.

La exatleta ha sido señalada anteriormente por este tipo de temas, además de recibir las denuncias por bloquear apoyos para competidores en justas internacionales. Es una de las funcionarias públicas con mayor percepción de corrupción en el actual gobierno.

La Auditoria Superior de la Federación (ASF) encontró irregularidades por 29 millones 98 mil pesos en el programa “Jóvenes Escribiendo el Futuro” del gobierno federal en la cuenta correspondiente al 2022.

Tres aspectos resaltan en el reporte de la ASF, pagos efectuados a 2 mil 820 individuos que no cumplían con los criterios necesarios para ser beneficiarios del programa; falta de control en la verificación de requisitos como edad y condición socioeconómica de los solicitantes; y la selección de personas no elegibles para recibir estos beneficios.

También la ASF encontró, derivado del estudio de la cuenta 2022, posibles irregularidades en el ejercicio presupuestal por 32 mil 894 millones de pesos.

Y de acuerdo con Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad, “un exdirigente tabasqueño de Morena, que en 2012 fue acusado de triangular fondos públicos del Gobierno de la Ciudad al proyecto de AMLO, es hoy responsable de firmar los contratos más cuantiosos en Pemex a empresas ligadas con parientes del presidente”.

La organización señala que “Javier Núñez López ha colaborado con AMLO desde hace dos décadas. En 2012 fue acusado de recaudar dinero para su campaña, a través de un esquema de desvío de fondos públicos del Gobierno de la Ciudad. Ese mismo personaje ahora reparte cientos de miles de mdp en Pemex”.

La columnista Lourdes Mendoza reveló en su espacio en El Financiero, que “Existen evidencias en México y en Estados Unidos y allá hay una investigación y viene fuerte, ¡eh!, con bitácoras, transferencias, operaciones… vamos, de cómo financió el crimen organizado la campaña del hoy presidente de Morena, Mario Delgado, y a gobernadores de Sinaloa, Michoacán, Nayarit y Zacatecas en las elecciones de 2021 y en la de 2022 en Tamaulipas”.

Finalmente, Latinus informó de más tramas en la relación de lo que han dado en llamar “El Clan”, es decir, el grupo cercano a los hijos del presidente y la manera en que han desviado recursos públicos en su beneficio, con nuevas grabaciones y documentos que exhiben este tipo de manejos.