Como parte del avance de la tecnología, ahora tenemos la posibilidad de generar videos a partir de simples instrucciones de texto –algo que ya OpenAI ha mostrado con su interfase Sora–, pero son sus resultados en plataformas como YouTube lo que ha empezado a generar preocupación y, también, temor.
Es algo que ya conocemos como Deep Fake, es decir, una serie de creaciones de imágenes fijas y en movimiento que simulan una realidad que confunde nuestros sentidos, pues le damos toda la validez que fotografías y videos reales.
El impacto que están teniendo los Deep Fake apenas empieza a generar algunas investigaciones para tratar de entender sus efectos, en especial en materia informativa y electoral, pues es en donde han empezado a sentir sus resultados.
Pero es curioso que para varios usuarios de redes sociales esto ha generado preocupación, no por las implicaciones en temas noticiosos o relacionados con las votaciones, sino porque han notado como han ocupado el lugar de actrices o actores de cine o televisión, como lo ejemplifica el caso del canal de YouTube de Jenna Ortega, la estrella de la serie Merlina de conocida plataforma de streaming derivada de los Locos Addams.
¿Cuál es el problema? Pues que los espectadores han comenzado a notar que se trata de un canal en el que no actúa la actriz, sino que es algo generado con la tecnología de Deep Fake, además de que el propio canal se llama Fake Jenna y su usuario es @fake_ortega, y para colmo han empezado a interactuar con otros otras Deep Fakes que simulan ser Leonardo DiCaprio o Margot Robbie.
Los millones de seguidores y visualizaciones muestran los alcances que tiene este tipo de creaciones, a lo que muchos han hecho pensar que pasaría si se usa esta tecnología para culpar a alguien de un delito, algo que ya supera la preocupación para aterrizar en el terreno del terror.