La Subdirección de Igualdad Sustantiva y Grupos Prioritarios, a cargo de July Muñoz de Cote, de la Alcaldía Coyoacán, a cargo de Giovani Gutiérrez, presentará el jueves 11 de septiembre de 2025, a las 11 hrs., en la Casa del Adulto Mayor “Ángeles de los Reyes”, Plazuela de los Los Reyes, número 13, Pueblo de los Reyes Coyoacán, la película Los años de Greta (México, 1992) de Alberto Bojórquez, guión de María Diego Hernández y él mismo, con Beatriz Aguirre (Ariel 1993, por mejor actriz), Luis Aguilar (Ariel 1993, por mejor coactuación masculina) y Meche Berba (Ariel 1993, por mejor coactuación femenina), dento del Ciclo Igualdad Sustantiva, con el tema Adultos Mayores.

Última realización de mi amigo Alberto Bojórquez Patrón (1 de enero de 1941, Motul de Carrillo Puerto, Yucatán-14 de julio de 2003, Ciudad de México), es la culminación de una carrera de un guionista y realizador cinematográfico que hubiera dado mucho más de sí, dada su amplia cultura y, en especial,  su cultura cinematográfica. Beto me regaló dos libros que conservo con mucho cariño: Lecciones de cine de Eisenstein de Vladimir Nizhny, discípulo del célebre realizador letón, y Las películas de mi vida de François Truffaut, uno de los iniciadores y principales representantes del cine de autor. Tuve le gusto de trabajar como su asistente en parte del rodaje del documental Las jornadas del azúcar (México. 1983). Me lo presentó mi amigo Julio Téllez Garcia, titular de la Dirección de Difusión Cultural del Instituto Politécnico Nacional. Llegó con la idea de exhibir un ciclo de películas en defensa del cine mexicano que se programó en el CineClub de Economía del IPN, fundado por mí en aquellos años. Fueron: Naufragio (1977) de Jaime Humberto Hermosillo, Cascabel (1976) de Raúl Araiza, Lo mejor de Teresa (1976) de él mismo y Llovizna (1977) de Sergio Olhovich. “Cabe apuntar que con Beto tuve una gran amistad. Un nefasto día de 1982 (cuando “un incendio consumió las instalaciones de la Cineteca Nacional y su acervo: más de 6 mil películas, entre ellas la única colección completa en el mundo de Luis Buñuel, y la mayor biblioteca especializada en el cine existente en México, con más de 10 mil volúmenes, el peor desastre que se recuerde”, Beto y yo fuimos a ver Soy puro mexicano (México, 1942), en el Salón Rojo, porque queríamos escribir un libro sobre el cine del “Indio”. A última hora, Mario Aguinaga se disculpó porque no tenía a mano la copia de la película. Nos fuimos a los estudios de cine Churubusco, y mientras esperábamos la llegada de unos productores colombianos para discutir la producción de una película de aventuras sobre la explotación de diamantes, nos pusimos a tomar brandy. Pasó un corto tiempo, y, de repente, sentimos que se movió la tierra, vimo que se fue la luz y escuchamos una fuerte explosión. Al salir, precipitadamente de una sala de edición, para enterarnos de lo que había ocurrido, vimos la Cineteca en llamas.  Nos quedamos hasta el final de las cenizas, ya en la noche, Beto lloró como un niño desencantado. Ese día no nos tocaba morir, destino insalvable”.

Probablemente, la mejor película de Beto de su filmografía sea Retrato de una mujer casada (México, 1979), con Alma Muriel y Gonzalo Vega. Saludada, por la crítica como una de las mejores películas del director de Los meses y los días (México, 1970). Los conflictos amorosos de la heroina, una mujer de clase media, suenan por primera vez a verdaderos, a no deformados por el melodrama. Alma Muriel está muy bien en el papel central, lo mismo que sus alternantes Vega y Gómez Cruz. A su vez, la cinta acentúa su verosimilitud con una abundancia de espacios clasemedieros muy identificables y característicos: la colonia Narvarte, el Viaducto, la UNAM, la Cineteca de antes de la quema, el parque de los Venados, etcétera. Es importante decir que Retrato de una mujer casada narra en toda su crudeza el tema de la violencia contra las mujeres.

Después de Retrato de una mujer casada, Beto realizó el documental Los jornaleros de la azúcar y Robachicos (Mexico, 1986), melodrama de acción, con José Carlos Ruiz y María Rojo, muy bien narrado y consolidación de su estilo formal, con Los años de Greta,  que quedó frustrado con su inesperada muerte.

Los años de Greta, escribió Emilio García Riera, “No trató de jovencitas, como era su costumbre, sino de lo contrario: su heroina es una anciana jubilada y atribulada -la interpreta Beatriz Aguirre, nacida en Arteaga, Coahuila (1925-2019), actriz del cine mexicano, desde los años cuarenta del siglo pasado, que merece del director estimable comprensión y afecto, la película llegó a conmover”.

Por supuesto que conmueve. Es una tierna historia de  una sabia mujer, Greta (72 años). y de todos los demás personajes de la tecera edad, que comienza con una breve explicación de su vida anterior, introduciéndonos a su vida actual, serena y tranquila, acompañada de la música de Franz Schubert y música incidental popular mexicana.