Nueva Ola Francesa (Nouvelle Vague, Francia, 2025) de Richard Linklater.

Admirable recreación, diríase que perfecta, del  movimiento conocido, en la historia del cine como Nueva Ola (Nouvelle Vague) que hizo explosión en el cine francés, a fines de la década de los 50s del siglo pasado, y que, revolucionaría en su medida, la nerrativa cinematográfica. En la película van apareciendo los personajes, principalmente, los realizadores, que consolidarían lo que se conoce como “cine de autor”: Los precursores, el equipo de Les Cahiers du Cinema y algunos otros, si nos atenenos a la clasificación hecha por Jacques Siclier, en su temprano libro La nouvelle vague? (1962), sobre el movimiento. El realizador Richard Linklater (30 de julio de 1960, Huston, Texas), inspirado en un guión de Vince Palmo, con fotografía en blanco y negro, a cargo de David Chambille, y edición de Catherine Schwartz, le rinde culto a los impulsores de un movimiento que ha dejado huella imborrable en la evolución del cine contemporáneo, hasta le fecha. Con profundo conocimiento de los hecho y anécdotas, el homenaje se centra, principalmente, en el equipo de Les Cahiers du Cinema: Claude Chabrol, Françrois Truffaut, Jacques Rivette, Jacques Doniol-Valcroze, Eric Rohmer, Pierre Kast y, sobre todos, en Jean-Luc Godard, y el rodaje de su opera prima Sin aliento o Al final de la escapada (A bout de souffle, Francia, 1959-1960), película clave en la historia del cine. Es significativa la secuencia en la que vemos, en la portada de un número de la revista Cahiers du Cinema, un fotograma de Jean Seberg, quien con Jean-Paul Belmondo, fueron los protagonistas de la película. Admirable recreación, apasionada y apasionante, en la que el realizador incursiona en lo que se ha dado en llamar “el cine dentro del cine”. Permítaseme citar un breve comentario de Jacques Siclier sobre Sin aliento que le queda muy bien a la realización de Richard Linklater, aunque hay una gran diferencia en la planeación exacta y la genialidad de la improvización: “Cierto don natural para agarrar las cosas al vuelo, para la improvisación rápida. A bout de souffle es el más nuevo de todo los films de la ‘nueva ola’”.

La desaparición de Josef Mengale (Das Verschwinden des Josef Mengele, Francia-Alemania-México-Uruguay, 2024) de Kiril Serebrennikov.

Polifacético realizador, en cuanto a temáticas varias (habría que revisar su filmografía y ver sus películas), con supuesto pasado turbio y actividades anti rusas, Kiril Serebrennikov (7 de septiembre de 1969, Rostov del Don, Unión Soviética) nos receta una película escalofriante, con final onírico (inventado?) de la muerte del “ángel de la muerte”, como fue apodado Josef Mengele, Dr. Nazi que ejecutaba sádicos experimentos con los prisioneros judíos en el campo de concentración de Auschwiitz, a nombre de la ciencia, incluida su fascinación por los seres humanos gemelos. La biografía, en blanco y negro, desde su huida a Sudamérica, de un psicópata, llevada al extremo por el realizador, incluye momentos de delirio paranoide y decadencia física y mental, sin remordimiento de conciencia. Las secuencia en color de sus actividades en el campo de concentración y su vida familiar durante la guerra, irónicamente, son similares a sus últimos momentos de vida.

Ella y su hijo (Zan o bacheh, Irán-Francia, 2025) de Saeed Roustayi.

So pretexto de confrontar el sentido común con la norma jurídica, en pro de las mujeres que sufren injusticias sociales, sin lograr todavía la plena libertad de justificar sus razones y derechos, el realizador Saeed Roustayi (14 de agosto de 1989, Therán, Irán), nos receta variantes de semicomedia, semidrama,  y semilios judiciales intrascententes y arrepentimientos a última hora (el testigo acusatorio para quitarle la hija a  la protagonista), con una mujer semifatal, que sufre la muerte de su hijo problema, por no atenderlo como es debido, ya que trabaja y anda de enamorada, después de separarse de su marido y que pierde a su enamorado, porque el muy traidor se enamora de su hemana menor. El asunto cae en el más increible melodrama telenovelero que se puedan imaginar, para envidia de Libertad Lamarque y Marga López que, al menos, sentían sus papeles hasta la médula.

Sueños (Sexo-Amor) (Drommer, Noruega, 2024) de Johan Haugerud.

Vaya que el cine nórdico, ahora el noruego, nos sigue recetando historias de moral intelectualizadas, con cierto contenido psicoanalítico freudiano y psicoterapeutas profesionales que cobran y toda la cosa, para justificar su trabajo de contribuir a la salud mental de adolescentes y jovencitas románticas que se enamoran de sus profesoras y que son aspirantes a ser grandes escritoras. El sesentón realizador Johan Haugerud (30 de diciembre de 1964, Eidsberg, Noruega) continua la segunda entrega de la trilogía planeada (información del texto de presentación de la Muestra). No he visto la primera y, por supuesto, tampoco la tercera. El texto de la presentación de la Muestra nos informa, también, que el realizador llega para ofrecernos un viaje por la intensidad emocional del autodescubrimiento, el amor y la sexualidad. Bueno, David Ramón me comentó que es la mejor pelicula que ha visto sobre lesibianismo. Hay más diálogos que acción, al estilo de Eric Rohmer. Queda la duda de si la chica enamorada tuvo sexo con su bella y liberal profesora que lo niega, cuando la chica dice que sí lo hicieron.