Entrevista Alejandro Guillén/Profesor e investigador de la UPAEP
Nora Rodríguez Aceves
En Puebla, lo más importante que se jugó en la elección del pasado domingo no fue solamente la presidencia municipal de la capital del estado, que por supuesto tiene su peso, sino, desde el punto de vista estratégico y político, el Congreso estatal, que para el gobernador Rafael Moreno Valle era lo fundamental, porque necesitaba un Congreso que le permitiera la continuidad de su administración, desarrollar su proyecto; que le permitiera que su proyecto, sus decisiones, sus iniciativas se aprobaran para que le pavimente la segunda parte de su mandato como gobernador del estado y por supuesto que tenga un proyecto estatal consolidado, que eso también le sirve de plataforma para 2018, que es el otro objetivo que tiene.
“Hemos vivido un procesos electoral que no deja de ser un proceso electoral importantísimo sobre todo por lo que viene en el futuro, pues con esto Moreno Valle está ya generando la plataforma o el resto de la plataforma que le faltaba para construir su candidatura a la Presidencia de la República en 2018, aunque sabemos que en política nada está definido y que pueden surgir diferentes circunstancias, otros actores que puedan cambiar el escenario, pero mientras tanto el resultado electoral aquí en Puebla es un resultado que le favorece a Moreno Valle para su proyecto para 2018”, afirma Alejandro Guillén Reyes, profesor e investigador de la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
En este sentido y de acuerdo con los resultados del Programa de Resultado Electorales Preliminares del Instituto Electoral Estatal (IIE) de Puebla, 22 de 26 distritos son de la alianza Puebla Unida integrada por los partidos Acción Nacional, PRD, Nueva Alianza y el estatal Compromiso por Puebla, mientras la coalición 5 de Mayo conformada por el PRI y el PVEM sólo obtuvo 4 distritos.
En cuanto a los 217 municipios, la coalición Puebla Unida se quedó con 93 municipios, de los cuales 15 son cabeceras distritales, incluida la capital del estado. Mientras que la alianza 5 de Mayo gobernará 86 ayuntamientos, y otros partidos se quedaron con 37. Aquí cabe mencionar que el Instituto Electoral del estado anuló el resultado de la elección en el municipio de Cuapiaxtla de Madero, debido a que no se pudieron instalar las casillas, y convocará a elecciones extraordinarias.
Hubo de todo
Guillén Reyes comenta en entrevista, vía telefónica, con Siempre! que “en términos generales este proceso electoral ha sido como se esperaba: un proceso muy intenso, unas campañas muy intensas en lo que se refiere a los ataques entre partidos y candidatos, una campaña que tuvo de todo un poco, propuestas, campañas negras, en fin, esa intensidad obedeció en buena parte a todo lo que se jugaba aquí en Puebla con respecto a los intereses tanto estatales como nacionales”.
“Se jugaba el futuro político del gobernador que apostaba por mantener el control del Congreso local y afianzar su proyecto a largo plazo y, por otra parte, el futuro de los candidatos a la presidencia municipal, debido a que es la primera vez que contienden por un puesto de elección popular; y que desde un inicio se había establecido una serie de condiciones que parecían favorecer desde un principio a la alianza entre el PAN, PRD, Panal y otros.”
En lo que toca ya a la jornada electoral del pasado día 7, “encontramos algunos eventos que tenía rato que no veíamos por aquí, como el robo de urnas en dos casillas, la compra de votos, que se denunciaron a través de las redes sociales y de organizaciones de la sociedad civil; sin embargo, a pesar de estas circunstancias la jornada electoral concluye en términos normales, termina bien, no hay más consecuencias y los resultados ya los sabemos: prácticamente la alianza Puebla Unida gana la mayoría de los distritos, gana 22 distritos de los 26 que se refieren a los diputados de mayoría relativa y gana o recupera la mayoría de ciudades importantes con la excepción de Tehuacán, y esto evidentemente fortalece en el futuro inmediato el proyecto del gobernador Rafael Moreno Valle, no solamente en lo que se refiere a la segunda mitad de su gobierno sino a su proyecto a buscar ser candidato a la Presidencia de la República en 2018”.
Siendo así, podemos decir que quien ganó en estas elecciones fue el gobernador Rafael Moreno Valle, “él desde un principio encabezó esta alianza, incluso, apareció en espectaculares con el candidato a la alcaldía de la capital, Antonio Gali Fayad, parecía ser el jefe de la campaña de Puebla Unida, y si en términos generales, así como se planteó en su momento que, si perdían, el gran perdedor sería el gobernador, ahora si ganan —como ocurrió—, pues uno de los grandes ganadores sin duda alguna es el gobernador del Estado”.
La sombra de Elba Esther
Sin embargo, cabe recordar que esta coalición PAN, PRD, Panal estuvo en peligro de no darse, pues luego de la aprehensión, el pasado mes de febrero, de la hoy exlíder del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Elba Esther Gordillo, acusada por la Procuraduría General de la República de desvíos de recursos de las cuentas del sindicato de maestros por más de 2 mil millones de pesos, algunos miembros del PAN pidieron reconsiderar la posibilidad de la alianza política y electoral, “porque calculaban efectos negativos en futuras elecciones en la entidad poblana y en el país”. En la misma posición estaba el PRD, donde se observaban señales de revisar la gran coalición.
Sin embargo, su partido Nueva Alianza logró, gracias a la intervención del gobernador Moreno Valle, afianzar la alianza con el PAN y el PRD. “Al gobernador le interesaba la alianza, sobre todo para consolidar que en el proceso electoral y que el día de la elección se lograra el mayor número de diputaciones posibles y lo logró”, consiguió la mayoría de triunfos en los distritos, y no sólo eso, también ganó la mayoría de los municipios.
En este sentido, el politólogo de la Facultad de Ciencias Políticas de la UPAEP, señala que “el tema de Elba Esther Gordillo sin duda alguna puso en cierto aprieto la alianza, sin embargo lo que hicieron tanto el líder de Acción Nacional como todos aquéllos que negociaron la alianza Puebla Unida fue tratar de aislar un tanto al personaje llamado Elba Esther Gordillo con respecto a una institución llamada Partido Nueva Alianza. De hecho en las primeras declaraciones que hicieron los lideres que estaban negociando la coalición decían eso, que a final de cuentas se trata de una alianza con el partido y no con un personaje en concreto; y de hecho, cuando se suscita la detención de Elba Esther Gordillo, una de las primeras declaraciones que recuerdo que hizo el gobernador del estado —sin deslindarse de su cercanía con Elba Esther Gordillo— fue simplemente: ojalá y las instituciones se encarguen de resolver este asunto y a seguir con el plan”.
“Entonces realmente no se vio afectado el proyecto original, que esto es lo más importante, realmente no impactó o, por lo menos, repito, logran aislar el impacto de la detención de la maestra con respecto a lo que era la alianza institucional, la alianza de partidos. Y de hecho, cuando uno revisa lo que fue el convenio de la alianza al Partido Nueva Alianza, realmente no le va mal, yo recuerdo que lograron meter al menos dos candidaturas a diputaciones de mayoría relativa, me parece que le tocaron dos, pero recuerdo por lo menos dos nombres, ya no supe si fueron cuatro en total, pero realmente les dieron los espacios en lo que se refiere a las candidaturas de diputación de mayoría relativa, también lograron en los primeros lugares colocar dos nombres en la lista de plurinominales, y también lograron meter candidatos a algunos municipios, siete candidatos de los 217 municipios y con los resultados que ahora tenemos es muy probable que tengan cuatro diputados ya en el Congreso.”
El Panal se fortalece
Además, “otro dato interesante del Convenio de Coalición Electoral es que el Partido Nueva Alianza se quedaba con 20 por ciento de la votación —el PAN con el 50%, el PRD con el 24 y el Partido Compromiso por Puebla con el 6%—, por lo tanto el partido se fortalece con este proceso electoral y eso es lo que a grandes rasgos observo de las ganancias que obtuvo Nueva Alianza en este proceso, que sin duda alguna el gobernador del estado los rescata y los logra aislar del problema Elba Esther Gordillo”.
No es nuevo, debido a la relación entre SNTE, Elba Esther Gordillo, Panal, que en todos los procesos electorales se hace presente la misma crítica y sospecha: el desvío de recursos económicos del SNTE hacia Nueva Alianza, y las pasadas elecciones de Puebla no fueron la excepción; sin embargo, en esta ocasión fue el secretario general de la sección 51 del SNTE, Jorge Luis Barrera de la Rosa, quien declaró a los medios de comunicación, en abril, que el SNTE y el Panal trabajan de manera independiente, “es Nueva Alianza el que se dedicará a atender las cuestiones políticas. El SNTE se encargará de defender los derechos de los trabajadores de la educación. Además, señaló en ese momento que “no hay manera de que las cuotas sindicales se trasladen para cuestiones políticas”.
En este sentido, de la participación del magisterio en las elecciones Alejandro Guillén tiene su propia opinión: “realmente ya su actuación fue muy discreta, a diferencia de lo que se comentó hace tres años en la elección de 2010 en donde en los diarios, en la opinión pública, se manejó siempre la idea de que los maestros tuvieron una participación muy activa en el proceso electoral, particularmente, el día de la elección. Sin embargo, a raíz de la detención de Elba Esther Gordillo, el SNTE fue muy discreto en su participación en el proceso electoral. De tal manera que hoy, si uno revisa la prensa, nadie habla de participación de maestros ni cosa por el estilo el día de la elección; por eso, aun cuando le va bien desde el punto de vista electoral al Panal, se logra mantener una actuación muy discreta en la campaña y esto me parece que también fue parte de la estrategia para que el tema de Elba Esther Gordillo no fuera un obstáculo para lograr sus objetivos”.
Aunque no fue éste el único obstáculo para la consolidación de la alianza triunfadora en Puebla, también estaba el entonces líder del PAN: “Juan Carlos Mondragón tenía una serie de diferencias —con Moreno Valle—, en buena parte porque estamos hablando de dos grupos distintos; sin embargo, con la finalización de la dirección de Juan Carlos Mondragón como líder estatal del PAN y la entrada de Rafael Micalco, esto permitió que prácticamente el morenovallismo tuviera ya una mayor injerencia y un mayor control sobre el partido”.
PAN, plataforma para Moreno Valle
“El PAN es la segunda fuerza política importante —ahora ya podría considerarse la primera—, habría que ver si esta alianza al final de cuentas es únicamente parte del impulso del PAN o también el PRD y los otros partidos colaboraron. Yo creo que, en menor medida, el PAN sigue teniendo el mayor peso electoral; lo que hemos visto hasta este momento es un PAN que sin duda alguna va al paso, va apoyando, va sirviendo de plataforma importante a Rafael Moreno Valle; es decir, esas diferencias que se tuvieron anteriormente quedaron zanjadas y ya la mayoría de los grupos finalmente lograron una cierta cohesión en el interior de Acción Nacional y esto hizo que funcionara de manera eficaz en toda esta campaña y en el proceso electoral mismo.”
Para el analista político, esta alianza PAN, PRD, Panal sí podría funcionar para la elección presidencial en 2018 llevando como candidato a Rafael Moreno Valle, aunque explica: “el gran acierto desde que la Maestra estaba o era la líder no solamente del SNTE sino del Panal mismo, una de las características fundamentales era que el Panal se aliaba con aquellos partidos que tenían posibilidad de ganar, y yo creo que en esta ocasión la fórmula se repite o la intención se repite. El Panal termina por entrar en una alianza con posibilidades de ganar —como ocurrió— y habría que esperar también los tiempos, porque a veces los partidos, particularmente los pequeños, lo que buscan es aliarse fundamentalmente con aquel candidato o aquel partido que tenga posibilidades de ganar; ésa ha sido la lógica que durante estos años ha prevalecido al menos en el caso de Nueva Alianza”.
Hemos visto también, dice Alejandro Guillén, que “el Panal se alía con el PRI en otros estados de la república; entonces, en donde ven posibilidades de triunfo, con ése se alían. Aquí no hay asuntos de compatibilidad ideológica, no, simple y sencillamente obtener posiciones de poder, ese es el móvil fundamental, aunque yo creo que tendrían que valorar en todo caso si en 2018 se pueda dar una alianza con Rafael Moreno Valle, con el PAN, etc., impulsándolo como candidato a la Presidencia de la República. Pero eso tendrían que valorarlo en su momento y ver cómo está el escenario para 2018, ya sabemos que de aquí a 2018 pueden ocurrir muchas cosas pero, mientras tanto, queda el antecedente de que esta fórmula funciona, y tan funciona que estamos viendo que los resultados electorales son contundentes, el PRI y el Verde Ecologista simple y sencillamente en lo que se refiere a las diputaciones solamente lograron cuatro de 26 y perdieron las principales ciudades en cuanto a la elección de ayuntamientos”.