El presidente de El Salvador, Mauricio Funes, advirtió que el cártel mexicano de Los zetas intenta avanzar en su país y en Honduras, y que su constante movilidad es el principal problema que enfrentan las autoridades.
Tras de que las investigaciones sobre la masacre de 28 Campesinos ocurrida el 14 de mayo en Guatemal apuntan hacia esa organización delictiva, Funes señaló: “Los que estaban golpeando y siguen golpeando México se han movido a la frontera sur de México con Guatemala, a la zona del Petén, a la zona selvática, porque necesitan territorios de esa naturaleza para poder moverse”.
Funes reveló que el tema fue abordado en sus conversaciones de Managua, Nicaragua, con el presidente de Guatemala, Alvaro Colom, a quien le expresó sus condolencia por la matanza de los 28 campesinos en la zona del Petén y le mostró su sorpresa de que en ese hecho hayan participado Zetas guatemaltecos.
Tras la matanza en el Petén, Alvaro Colom decretó un estado de sitio en esa región guatemalteca, lo cual ya había hecho en diciembre de 2010, en Alta Verapaz, donde se detectó la presencia de Zetas.
Se estima que el cartel se trasladó a Alta Verapaz desde 2009, para establecer una ruta alterna que el permita controlar el tráfico de drogas destinadas a México y Estados Unidos procedente de Honduras.