En efecto, “ya no podemos seguir así”
Félix Fuentes
El presidente Enrique Peña Nieto procuró su mejor discurso mediante proyectos de seguridad, justicia y combate a la corrupción. Pero las reacciones fueron adversas, incluso de la clase patronal, por carecer de autocrítica y retomar asuntos de regímenes anteriores.
Cumplidos dos años de gobierno, el primer mandatario debiera cambiar de estrategia a falta de éxito con su proyecto de nación, basado en el sistema mediático.
El pueblo está urgido de acciones de gobierno contundentes y de resultados. Ya escuchó suficiente sobre decálogos, iniciativas de ley y buenos propósitos.
Por más que se esfuerce el presidente Peña, poco puede ofrecer, tras lo dicho en campaña y sus años de gobierno.
La gente no quiere saber nada de funcionarios que han abundado en historias como menor índice delictivo y reducción de ejecuciones.
El grito general es por qué el Ejecutivo sigue con el mismo equipo de secretarios, causante de rotundos fracasos en seguridad, crecimiento económico, deficiente producción agropecuaria, finanzas a punto del colapso y desempleo.
Una lectura somera de las reacciones sobre el discurso del jueves pasado daría idea de la frustración general.
Ni pensar en recuentos de redes sociales sobre el mensaje presidencial reciente. Es excesivo para entes de la comunicación oficial profundizar en sus efectos, si son incapaces hasta para uniformar criterios en temas torales del gobierno.
Personas ajenas a la comunicación preguntan por qué el vocero Eduardo Sánchez hizo aclaraciones del discurso presidencial en el noticiario de Carlos Loret de Mola, quien le puso una de padre y señor mío, como suele decir el comunicador de Televisa.
Sánchez se ha esmerado por decir que el señor presidente goza de excelente salud, que su esposa ocupa un puesto honorario y la famosa Casa Blanca fue adquirida con recursos de ella, no de su marido.
Eso ha de reventar al comunicador de Los Pinos, David López, quien ruega a periodistas, amigos suyos, no hacer olas con la famosa residencia de Lomas de Chapultepec y menos detallar en cuánto fue comprada.
Así haya fracasado el hoy estudiante de Florida, Genaro García Luna, en su proyecto de mando único policiaco, los adoradores de Felipe Calderón afirman que Peña Nieto copia ese proyecto y también el operativo de Tierra Caliente, porque el ex intentó uno igual.
El coordinador de senadores del PAN, Jorge Luis Preciado, llamó mediático y electorero el discurso presidencial.
Los empresarios del Consejo Coordinador y de Coparmex no perdonan a Peña Nieto y al titular de Hacienda, Luis Videgaray, por el alza de impuestos, calificada de desmesurada.
El presidente, señalan, no debió centrar su rescate económico en leyes draconianas fiscales y salvar Chiapas, Guerrero y Oaxaca, sin pensar en las otras entidades.
Tampoco se reconoce su proyecto de la Gendarmería Nacional, por raquítico en personal y en capacidad de investigación.
“Ya no podemos seguir así”, dijo Peña Nieto… en efecto, se llega al clímax de la desesperación…
