Excesos en comunicación social y publicidad
Félix Fuentes
Aceptado por el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, de que habrá recortes en el gasto público, los problemas de la economía pueden ser mayores a los del año pasado, con menor crecimiento.
Debido a los bajos ingresos fiscales y al desplome en el precio del petróleo, el gobierno del presidente Peña Nieto deberá gastar menos en obra pública, compras, servicios y publicidad.
Se aproximan días similares a las crisis en gobiernos de López Portillo y De la Madrid, cuando fue necesario el despido de servidores públicos, cancelación de contratos y restricción en uso de teléfonos y otros menesteres.
En un avance de lo que espera a la nación debido a la falta de ingresos suficientes, Videgaray dijo que para no recurrir a un mayor endeudamiento o incremento en el déficit fiscal se recurre al manejo prudente de las finanzas, ¡sin aumentar impuestos!
Según Diego de la Mora, director del área de presupuesto de Fundar, el gobierno podría empezar por recortar presupuestos de comunicación social y publicidad.
En 2013, el régimen peñista gastó en publicidad 485 millones 600 mil pesos y el año pasado aumentó esa cantidad en 3.9 veces.
Según Reforma, en 2014 tuvo un costo de mil 908 millones de pesos la publicidad del gobierno de Peña Nieto, a razón de 6.3 millones por día. Indicó el 5 de este mes que en las últimas semanas del año pasado destinó el gobierno cerca de mil millones de pesos en la promoción de obras, reformas y campañas de salud bajo el rubro de Mover a México.
De esa suma, 450 millones correspondieron a las televisoras, 175 millones a periódicos, entre ellos los de Organización Editorial Mexicana, Excélsior y El Universal. Así dejó constancia Reforma de que no tiene compromisos publicitarios con el gobierno federal.
Los regímenes panistas no se quedaron cortos. En su último año, Felipe Calderón hizo un dispendio superior a ocho mil millones de pesos.
Durante su gestión, Calderón gastó en el renglón publicitario 39 mil 40 millones 580 mil 390 pesos; cifras descomunales de la publicidad, en un país de tan escasos recursos.
Si en el tercer año de Peña Nieto se aproxima otra era de recortes en el gasto público, en la propia Secretaria de Hacienda se proyecta reducir la publicidad.
En esa dependencia se menciona la necesidad de recortar pagos de servicios personales, principalmente sueldos de funcionarios.
Se duda de que esto ocurra o sean abatidos los privilegios millonarios de diputados y senadores, los cuales escandalizaron al final del pasado periodo de sesiones.
Tampoco tienen control los gastos cuantiosos de gobernadores que agotan presupuestos estatales en latrocinios y adornos personales, en estos días en que México es azotado por la corrupción y la impunidad.
El estancamiento puede ser peor debido a la violencia en el narco-guerrillero estado de Guerrero —como lo define el empresario Alejandro Martí—, donde familiares de los 43 desaparecidos y presuntos maestros de la CETEG se enfrentan a militares y pretenden revisar cuarteles.
No se ha querido actuar a tiempo y con firmeza.
