La Agencia Federal Médico-Biológica de Rusia (FMBA) concluyó este miércoles que el histórico líder palestino, Yasser Arafat, murió de causas naturales y no por un envenenamiento con polonio-210 como se especulaba.

“Yasser Arafat murió a causa de un proceso inflamatorio causado por la enfermedad, no a causa de la exposición a la radiación”, señaló el jefe de la FMBA, Vladimir Uiba, en una conferencia de prensa para dar a conocer los resultados de su investigación, reportó el sitio de noticias Sputnik.

Arafat murió la madrugada del 11 de noviembre de 2004 por una hemorragia cerebral en un hospital militar cerca de París, donde estuvo hospitalizado desde el 29 de octubre de ese año y cayó en coma el 3 de noviembre.

En julio de 2012 expertos del Centro de Medicina Legal del Hospital Universitario de Lausana (Suiza) encontraron en las pertenencias de Arafat, especialmente las que habían estado en contacto con sus fluidos, rastros de polonio-210, una sustancia radiactiva.

Ante la posibilidad de un envenenamiento, la viuda del líder palestino, Suha Arafat, pidió una investigación profunda sobre las sustancias encontrada para determinar las circunstancias de la muerte de su esposo.

Sine embargo, las conclusiones de los expertos rusos, que comenzaron su investigación en diciembre de 2013, descartan ahora el envenenamiento del líder palestino, que murió a los 75 años.

“Yasser Arafat no fue envenenado con sustancias radiactivas, murió a causa de un enfermedad que padecen las personas de la tercera edad”, dijo Uiba.

El especialista agregó que la causa de muerte de Arafat fue una enfermedad inflamatoria que se manifestó en estado séptico.

Información de Excélsior