Norma Salazar
Todos los periodistas son escritores aunque los escritores no siempre son periodistas, hay que ser muy versátil para realizar ambas actividades, saber publicar una entrevista a su máxima esencia con una exposición factible que pueda disfrutar el lector, revelando un mejor retrato del personaje o los personajes entrevistados. Como el libro que hoy nos ocupa del editor y periodista Braulio Peralta, El poeta en su tierra Diálogos con Octavio Paz, una edición nueva a cargo de la Legislatura LXII Cámara de Diputados, Consejo Editorial de la Cámara de Diputados y la Comisión Especial para conmemorar el Centenario del Natalicio de Octavio Paz, a cargo de la Coordinación Editorial de Enzia Verduchi. En este libro, Peralta narra aquellas charlas-entrevistas, muy entrañables que tuviera con el Premio Nobel de Literatura 1990, don Octavio Paz.
Un hombre complejo y previsor en el ámbito político y cultural, un hombre activo con sus semejantes, herencia que llevó siempre en sus venas: “Mi abuelo, al tomar el café/ me hablaba de Juárez y de Porfirio,/ los zuavos y los plateados./ Y el mantel olía a pólvora./ Mi padre, al tomar la copa,/ me hablaba de Zapata y de Villa,/ Soto y Gama y los Flores Magón./ Y el mantel olía a pólvora./ Yo me quedo callado:/ ¿de quién podría hablar?”.
Siempre atento Paz exponía sus ideas y desacuerdos. Al ir leyendo el libro podemos ver un acercamiento entretejido por la memoria, en el sentido más simple del término. Una presencia del pasado, una confesión espiritual e intelectual, cito a Paz: “Mientras haya hombres, habrá poesía. Pero la relación puede romperse./ Nació de la facultad humana por excelencia, la imaginación, puede quebrarse/ si la imaginación muere o se rompe. Si el hombre olvidase a la poesía, se/ olvidaría de sí mismo. Regresaría al caos original”.
Reflexiones importantes que en términos de entendimiento sería la comprensión de inter-ligar, es decir, relacionar unos hechos del pasado con otros pasados y con el presente, unas ideas con otras, unos personajes con otros que avanzan por distintas direcciones y siempre son reveladoras y necesarias, vuelve a responderle al periodista: “no tengo un sistema hecho de conceptos… Mis ideas son opciones. Las defiendo y las he defendido por fidelidad a mi verdad relativa… No postulo/ ningún absoluto… Yo soy apenas, si algo soy, un poeta…”.
Su memoria, en el sentido más simple del término, es la presencia del pasado, es una reconstrucción psíquica e intelectual que supone, de hecho una representación selectiva del pretérito, un pretérito que no es nunca el del individuo solo, sino el individuo inserto en un contexto familiar, social, nacional: “los cambios profundos de un país vienen de abajo para arriba, y/ nunca de arriba para abajo; y que los cambios sociales implican también/ revoluciones culturales”.
Peralta ha entendido perfectamente que la voz poética de Octavio Paz se ha convertido en un referente notable, sus propias palabras son focalizadas y citadas por símbolos e imágenes del siglo XX: “La poesía nace de la sociedad y está hecha con palabras que son el alma/ de la sociedad. Si hay algo colectivo en el hombre, es el lenguaje: una propiedad/ común. Ésa es la verdadera propiedad colectiva. Es natural que un poema que/ está hecho de palabras tenga que ver con las pasiones colectivas, con las/ situaciones colectivas”.
En este libro de entrevistas, Braulio Peralta expresa las reflexiones de Paz a manera de diálogo, habla del éxito, el placer, la apariencia, el consumismo, la belleza física, la competencia, la deshumanización, la cotidianidad…, el poeta y ensayista se abre en lo más profundo de su ser, platica los sucesos que lo marcaron El poeta en su tierra. Diálogos con Octavio Paz es una radiografía de lo que es ser humano y, que en uno de sus libros lo sellará, Pasado en claro: “El universo habla solo/ pero los hombres hablan con los hombres:/ hay historia. Guillermo, Alfonso, Emilio:/ el corral de los juegos era historia/ y era historia jugar a morir juntos”.