En la cumbre antiterrorista en Washington, Obama dijo “no estamos en guerra con el Islam. Estamos en guerra con la gente que ha pervertido el Islam”. Apuntó que algunas comunidades musulmanas han aceptado la idea de que el Islam es incompatible con la tolerancia y la vida moderna.
La Casa Blanca lleva tiempo evadiendo la pregunta respecto a si los atentados en París y otras ciudades occidentales se tratan de un “extremismo islámico”, por temor a ofender a una de las grandes religiones del mundo o dar credibilidad a “la guerra contra el terrorismo” en la que triunfó su predecesor.
En sus declaraciones sobre vínculos entre el Islam y el terrorismo, Obama señaló que los musulmanes en Estados Unidos y alrededor del mundo deben combatir la falsa idea de que grupos terroristas como el Estado Islámico los representan.
El mandatario estadounidense, además de que culpó al grupo Estado Islámico y a organismos similares, dijo que los extremistas se hacen pasar por líderes religiosos pero en realidad son terroristas.
Obama también hizo un llamado directo a musulmanes prominentes para distanciarse aún más de las ideologías violentas porque todos los individuos tienen el deber de “alzar la voz muy claramente” a su oposición a la violencia contra gente inocente.
Se blinda Italia y el Vaticano
Las autoridades de Italia y el Vaticano informaron que reforzarán la seguridad de sus territorios ante las amenazas de ataques de extremistas islámicos.
A un día de que el gobierno italiano aprobara medidas de seguridad adicionales, el nuevo comandante de la guardia Suiza de la Santa Sede confirmó que las fuerzas del Estado también están bajo alerta.
“Lo que ocurrió en París con la revista Charlie Hebdo también puede ocurrir en el Vaticano. Nosotros estamos listos para defender a Francisco”, afirmó el comandante Christoph Graf.
La guardia Suiza, con 110 agentes, conocida por sus uniformes azules, rojos y amarillos en estilo renacentista supuestamente inspirados en los frescos de Rafael, protege al Pontífice desde el año 1506. “Hemos pedido a todos los guardias que estén más atentos y observen todo movimiento de personas”, explicó.
Al mismo tiempo, el comité de seguridad del gobierno italiano aumentó el nivel de alerta y confirmó la decisión de elevar el número de agentes y soldados que patrullan las ciudades y monumentos clave de tres mil a cuatro mil 800.
Después de los atentados al semanario satírico francés en París y de las 21 decapitaciones esta semana de cristianos egipcios en Libia a manos de yihadistas, los temores por las amenazas de atentados van en escalada.
En el video en el que se muestra la ejecución de 21 egipcios coptos, difundido el fin de semana pasado, el grupo yihadista amenazó con conquistar Roma y Europa, como prometieron al profeta Mahoma.
En Italia causó conmoción el hecho de que el video de los asesinatos fuera grabado en la costa Libia del mar Mediterráneo; el ministro de Relaciones Exteriores, Paolo Gentiloni, explicó este miércoles que en Libia se corre el riesgo de que se fusionen yihadistas del EI con milicias locales, y que hay poco tiempo para hallar una solución política para ese país, dividido en diferentes bastiones de las milicias.
Detienen a joven que quería unirse al EI
Las autoridades de Malasia detuvieron a una joven de 14 años que intentaba viajar a Siria supuestamente para unirse a la milicia yihadista del Estado Islámico; la joven fue arrestada este martes por la unidad antiterrorista de la policía en el aeropuerto de Kuala Lumpur cuando abordaría un vuelo a El Cairo.
El inspector general de la Policía, Khalid Abu Bakar, dijo que la mujer planeaba casarse con un malasio de 22 años que estudia en Egipto antes de viajar los dos hacia Estambul, para luego intentar conseguir cruzar la frontera hacia Siria.
“Descubrimos que había estado en contacto con dos militantes malasios que están en Siria. Seguiremos investigando para descubrir quién está detrás de este reclutamiento de chicas para el EI”, dijo Khalid en un comunicado, “no permitiremos que Malasia sea utilizada como campo de entrenamiento o escondite para terroristas o militantes. Cualquiera que ayude o apoye a un terrorista será detenido”.
Con este caso, suman 68 el número de malasios detenidos desde 2013 por vínculos con el terrorismo, incluidos varios funcionarios del estado y personal de la Marina y las Fuerzas Aéreas.